Ocurrió lo que se preveía

El más grande de la historia

Usain Bolt ganó los 200 y se transformó en el único sprinter en defender exitosamente las dos pruebas reinas de la velocidad en Juegos Olímpicos.

El más grande de la historia

Bolt cruza victorioso la meta londinense, relegando a sus connacionales Blake y Weir; además del estadounidense Spearmon, al holandés Martina y al francés Lemaitre. Foto: EFE

Redacción de El Litoral

DPA/EFE

El jamaiquino Usain Bolt se convirtió ayer en el único velocista de la historia del atletismo universal en conseguir los títulos olímpicos de 100 y 200 metros llanos, al imponerse en el doble hectómetro, con un registro de 19 segundos 32 centésimas, que constituye la mejor marca de la temporada.

El incomparable sprinter jamaiquino fue acompañado en el podio por dos connacionales, ya que Yohan Blake fue segundo, con 19.44; mientras que Warren Weir llegó tercero, con 19 segundos 84 centésimas.

Po ende, Estados Unidos quedó marginado de las preseas, ya que Wallace Spearmon se ubicó cuarto; mientras que el francés Christophe Lemaitre (bronce en el Mundial de Daegu), decepcionó con un sexto puesto, producto de los 20.19 que registró.

Tal como ocurre en cada una de sus presentaciones del extrovertido deportista de 25 años, la estelar imagen de Bolt “eclipsó” otra gran jornada atlética en el estadio olímpico londinense. Y tras la fantástica conquista, tuvo tiempo suficiente para decir lo suyo.

* “No tengo nada más que probar. He demostrado al mundo que soy el mejor y ahora mismo, sólo quiero disfrutarlo. Éste es mi momento y nunca lo olvidaré. Ahora soy una leyenda viva, ya que soy el atleta vivo más grande”.

Minutos después, aprovechó para descargarse contra el estadounidense Carl Lewis, que en su momento insinuó que los éxitos del jamaiquino están relacionados con el doping.

* “Perdí todo el respeto por él, todo el respeto... Estoy realmente decepcionado de que un deportista diga eso; sólo busca atención porque nadie habla de él”, resumió.

Finalmente, insistió que con sólo 25 años, ya se considera parte del estamento de los más grandes del deporte mundial: “Cada uno en su deporte. Alí en el boxeo, Jordan en el baloncesto y yo en el atletismo. Creo que estoy en la misma categoría de ellos... Y también de Michael Johnson, lo que me honra, porque Michael lo es todo para mí. Crecí viéndolo romper récords mundiales y es mi ídolo”, concluyó.

El más grande de la historia

Reinado jamaiquino. El podio de los 200 metros llanos, con Usain Bolt en lo más alto, secundado por sus compatriotas Yohan Blake y Warren Weir. El mundo los admira. Foto: EFE

Pero además...

Con una temperatura de 23 grados y un viento a favor de 0,4 metros por segundos, la noche de Londres 2012 parecía proclive a otra hazaña de Bolt contra el cronómetro, pero finalmente debió conformarse con haber establecido la mejor marca de la temporada, quedando a 2 centésimas del récord olímpico.

Vale recordar que antes de lo de la víspera, con el triunfo pasado en los 100 metros llanos, Bolt había igualado la gesta de otro gran tótem de la velocidad: Carl Lewis, quien se llevó el oro en el hectómetro en Los Angeles 1984 y Seúl 1988 (éste último por la eliminación por doping del canadiense Ben Johnson).

Sin embargo, el norteamericano no logró defender el título de los 200 en Corea del Sur, donde perdió precisamente con su amigo y compañero de entrenamiento en el Santa Monica Track Club: Joe DeLoach.

Volviendo al jamaiquino, es dable señalar que el notable triunfo de ayer no lo alcanzó con el mismo brillo que en Beijing 2008, cuando ganó tres oros (también añadió el 4x100) con tres récords del mundo, pero sí logró tres marcas que perdurarán en el tiempo.

Cuando Johnson corrió en 19.32 en Atlanta, entonces récord mundial, el mundo creyó que aquel crono no sería superado en décadas. Sin embargo, Usain la mejoró en China hasta 19 segundos 30 centésimas y un año después, la dejó en los 19.19 en Berlín.