Crónica de lo que ocurrió ayer luego de la derrota frente a Boca

Spahn le dijo: “Yo no te echo”. FDK no contestó

Spahn le dijo:  “Yo no te echo”. FDK no contestó

El presidente de Unión “no quiere despedir” al técnico; el plantel y la gente “apoyan” su continuidad. Anoche, tarde, resolvió que sigue.

 

Alberto Sánchez

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Amigo lector, las líneas que usted recorrerá no expresan más que una crónica de lo sucedido ayer cuando la tarde llegaba a su fin, minutos después de que Boca, en un repleto 15 de Abril, venciese a Unión por 2 a 1. Es cierto que (hoy más que nunca) le gustaría saber la opinión del entrenador rojiblanco, Frank Darío Kudelka, no sólo sobre la caída ante el xeneize, sino del angustioso presente del elenco que dirige, signado por haber sido la de la víspera, la cuarta derrota consecutiva sufrida en la misma cantidad de cotejos de este arranque del torneo Inicial.

Pero, eso no será posible porque el director técnico decidió no efectuar declaraciones a los medios. Por supuesto que la decisión de FDK es respetable desde todo punto de vista, es más, antes de retirarse del estadio unionista, se acercó a los periodistas que aún estábamos en la zona de conferencia de prensa y disculpándose, explicó por qué no hablaría: “Les pido disculpas a todos, pero sepan entender mi posición. No creo que el momento sea el indicado para hablar. Les aseguro que mañana (por hoy) hablaré luego del entrenamiento. Les agradezco a todos por saber comprenderme”.

Cuando el técnico tatengue habla de que “no es el momento”, lógicamente se refiere a la comprometida situación futbolística por la que atraviesa la entidad de la avenida. Aún no ha sumado puntos sobre 12 unidades disputadas, el equipo no juega bien (por no decir que juega mal) y se metió en la “zona roja” del descenso. Pero además, aún suena lo dicho por Kudelka tras perder contra Godoy Cruz en la segunda jornada: “Y, si pierdo dos partidos más, me echan”.

Claro que esas disculpas formuladas en las pocas palabras del entrenador fueron parte del último acto, ocurrido ya de noche. Entre eso y la finalización del encuentro, pasaron varias cosas que bien vale contar, aunque algunas de ellas se expresan en “potencial”, ya que no hubo ninguna declaración de ningún integrante del cuerpo técnico, dirigentes o jugadores. Precisamente, lo primero que se dio a conocer fue la decisión de los futbolistas de no hablar ante la prensa.

Mientras eso pasaba, con el plantel dentro del vestuario, se lo vio ingresar al presidente del club, Luis Spahn. No sólo él estaba en el recinto, varios compañeros de la comisión directiva también estaban presentes. Lo que el máximo dirigente rojiblanco habría expresado es: “Darío, yo no te echo”. Claro que la escueta frase no es sinónimo de apoyo incondicional al trabajo de Kudelka. A propósito de la labor del técnico, la mayoría de los integrantes de la “mesa chica” de la CD está de acuerdo con la continuidad de FDK, pero tampoco sería unánime el pensamiento, ya que se habrían escuchado algunas voces (las menos) de pedido de renuncia de parte del director técnico.

De lo que no hay dudas es del apoyo de la totalidad de la plantilla de jugadores. En algún momento, dentro de los camarines, se habría producido un encuentro entre Kudelka y el capitán, Juan Pablo Avendaño (quizás se haya agregado otro referente del grupo). De la charla quedó claro algo fundamental: los futbolistas están “a muerte” con el técnico. Más todavía: anoche, el propio Avendaño llamó en varias ocasiones a Kudelka para ratificarle lo dicho en el vestuario.

Otra cuestión que FDK puso en la balanza es la categórica respuesta de la gente. Seguramente se habrá sentido muy emocionado por el recibimiento que le brindó el pueblo tatengue al aparecer en el banco antes de empezar el partido. Y lo mismo (o más), después de haber perdido por cuarta vez en el certamen, y recordando que la última victoria de Unión ante su público fue por la 15ta. fecha del Clausura, frente a San Lorenzo, 1 a 0 con gol de Barisone de cabeza.

Sintéticamente, esto pasó ayer finalizado el partido. Anoche, Kudelka y su cuerpo técnico se reunieron para conocer la manera de pensar de cada uno con respecto al futuro. Esta mañana, a partir de las 10, el plantel profesional rojiblanco entrenó en Casasol. Y tras la práctica, como lo prometió Frank Darío Kudelka ayer, habló con la prensa para decir que sigue.

Spahn entró al vestuario y habló con Kudelka. El presidente de Unión ingresó al camarín rojiblanco y se reunió con el entrenador. “Yo no te echo”, le dijo a FDK. Luego se retiró sin formular declaraciones, lo mismo hicieron el técnico y los jugadores. Foto: Mauricio Garín

Secuencia

Lo único que generó Unión ofensivamente

1/ pienso, luego existo

Lo dijo Descartes, el filósofo francés; lo pone en práctica Kudelka, el técnico de Unión. Se quejó adentro de la cancha, reflexionó después y al final seguirá conduciendo al equipo.

Foto: Mauricio Garín

2/ El mediocampista uruguayo Brahian Alemán tomó la pelota en tres cuartos de cancha y por el centro del ataque de Unión.

3/ No obstante ser zurdo,

antes de ingresar al semicírculo, remató al arco con su pierna derecha, tomando el balón de lleno antes de que Schiavi pueda llegar al cruce.

4/ Gran imagen de Mauricio Garín, en la cual se observa al charrúa en el aire. Su potente remate lo terminará enviando al córner Sebastián D’Angelo.

5/ Y el tiro de esquina, enviado por Alemán, encontró la cabeza de su coterráneo, Nicolás Correa, quien venció al arquero de Boca, logrando el transitorio empate.

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Spahn le dijo:  “Yo no te echo”. FDK no contestó
Spahn le dijo:  “Yo no te echo”. FDK no contestó
Spahn le dijo:  “Yo no te echo”. FDK no contestó
Spahn le dijo:  “Yo no te echo”. FDK no contestó
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/// análisis

Nunca visto

Enrique Cruz (h)

El veredicto de la gente es implacable. Siempre. Y así lo hizo sentir ayer, con un apoyo irrestricto y nunca visto a un DT que venía de perder tres partidos consecutivos. ¿Convicción, reconocimiento? Poco importa. La gente le pidió a Kudelka en forma multitudinaria y contundente que se quedara. Fue, junto a los jugadores, la muestra cabal de un deseo. No así los dirigentes. Algunos estarán también convencidos y otros pretendían ayer mismo un cambio, pero en definitiva terminaron sucumbiendo ante el reclamo y apoyo popular.

Unión tuvo entrenadores muy queridos por la gente y tan exitosos como Kudelka. Aquellos que consiguieron ascensos (Zuccarelli, Trullet), el mismo Pumpido y hasta Madelón, quien tenía espalda suficiente en el 2001 por esa actuación estupenda como jugador y el gol inolvidable ante Colón en la final de 1989, son algunos ejemplos. En todos los casos, la voz popular no fue tan contundente y generalizada como la de ayer. Implacable demostración de afecto y apoyo.

La opinión en el seno del cuerpo técnico no fue unánime, pero como todo grupo unido marcharon detrás de la decisión final, que fue la de quedarse. ¿Un partido, dos, tres, todo el campeonato?, no se sabe. Sería entrar en un terreno de futurología tan común como inaplicable en fútbol. Un resultado cambia tantas cosas que no se puede predecir qué pasará con Kudelka en Unión el viernes o posteriormente. El DT tiene que poner ahora su granito de arena, acertando con el diagnóstico y con el equipo. Será su mejor aporte para el enorme cariño y reconocimiento de la hinchada.