Coyuntura
¿Lo peor de la tormenta ya pasó?
Félix Canale
La prensa especializada en economía y negocios destacó que durante la reunión del Consejo de la Américas, la semana pasada en Buenos Aires, los dirigentes empresariales manifestaron una actitud más distendida que la mantenida durante los últimos meses.
En buena medida, tal actitud es reflejo de distintas estadísticas, que muestran que durante el mes de julio se frenó la caída de la actividad económica, particularmente en el sector industrial, lo que podría estar señalando que la repercusión de la crisis en el mercado doméstico encontró un piso.
En su último reporte, fechado en agosto, la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (Fiel) indica que “en términos desestacionalizados, el Índice de Producción Industrial (IPI) de julio subió un 2,2% en comparación con el mes de junio pasado, lo que marca una reversión, al menos transitoria, con relación a la tendencia de hace más de 10 meses”.
Agrega que los datos provisorios del IPI de julio señalan que la industria acumula una caída de 1,1% durante los primeros siete meses del 2012 respecto de igual período de 2011, y que si bien el número no resulta significativo, cabe señalar que la misma se ha concentrado en los últimos cuatro meses.
Los autos
Durante la reunión del Consejo, el presidente de Fiat, Cristiano Rattazzi declaró a la prensa que las ventas de la marca en Brasil crecieron 20 por ciento, lo que puede dar una aproximación al desempeño total de la industria automotriz durante agosto.
De acuerdo con un informe de la consultora Abeceb.com, que sigue el comportamiento del mercado brasileño de automóviles, las trabas impuestas por el país socio a las importaciones extra zona (Corea y México), más la reducción temporal de impuestos a los productos industriales nacionales, está permitiendo que la demanda de automóviles se acreciente, al punto que los patentamientos crecieron casi 20% interanual en julio.
De hecho señala la consultora- los stocks en las concesionarias de Brasil se encuentran por debajo del nivel mínimo de 2011, con lo cual un nuevo incremento en los patentamientos para el mes de agosto impulsaría de forma más intensa la producción y las importaciones brasileñas, favoreciendo por lo tanto a la industria automotriz argentina.
La consultora proyecta que para los dos últimos meses de 2012 las terminales argentinas se podrían estar acercando al nivel mensual promedio de exportaciones de vehículos que se verificó en 2011.
La inversión
Más allá de estos datos, que reflejan los flujos y reflujos circunstanciales en las demandas del mercado, un seguimiento crucial es el referido a la Inversión Bruta Interna Mensual (Ibim), una serie estadística que desde 2006 elabora la consultora Orlando J. Ferreres.
De acuerdo con la misma, en julio de 2012 se invirtieron en la Argentina 8.345 millones de dólares, una caída de 1,5% interanual, pero menor a la registrada en junio, cuando presentó un número negativo de 16,4 por ciento. Según el dato de julio, la participación de la Ibim en el PBI ronda 22,3 %, que es el mejor registro de los últimos cuatro meses.
Nada es color de rosa. Sintetiza OJF: “En julio, hemos evidenciado una marcada desaceleración en la caída interanual de la inversión. Esto es resultado de la mejor performance de la inversión en maquinaria y equipo, ya que la destinada a la construcción mantiene la tendencia bajista (...) la perspectiva para los próximos meses no es positiva en la medida que se mantengan las restricciones vigentes en la economía que desalientan el proceso inversor”.
Pese a la advertencia de la consultora (obviamente dirigida a las políticas oficiales), sus propios números indican que pese a todo existe tendencia en el sector industrial para reforzar su capacidad productiva (ver gráfico de inversiones). Al poner la lupa sobre tales números, surge que desde mayo las inversiones en equipos durables de producción (los fierros) están creciendo, ya se trate de fabricación nacional o importada.
También que la compra de equipos nacionales (que supuestamente responde a una sustitución de importaciones) tanto en dólares (levemente) como en porcentajes, comienza a aventajar a las compras externas.
Tales detalles, aunque interesantes, no hacen a la cuestión de fondo, que es saber si la tormenta ya pasó o si sólo es un mejoramiento temporal. Hoy, nadie aspira a tasas chinas. Todos se conformarían con algún número por encima de cero.
Algunos foros internacionales sirven para medir expectativas empresariales. En el Consejo de las Américas, realizado la semana pasada en Buenos Aires, imperó la buena onda.
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Todos los documentos citados
en http://blogs.ellitoral.com/empresariosyempresas.
