Trabajo conjunto entre la Municipalidad y el Prohuerta del Inta

Rafaela fomenta las huertas comunitarias

Se busca promover la producción de huertas orgánicas y el autoconsumo a nivel familiar, escolar y comunitario. De este modo, se favorece también una alimentación saludable, variada y equilibrada.

Actividad comunitaria. Grandes y chicos se unen para trabajar en estas huertas que se están desarrollando en distintos sectores de la ciudad. Foto: Agencia Rafaela

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A través de un trabajo articulado entre las Secretarías de Desarrollo Social y Servicios, Espacios Públicos y Medio Ambiente, junto al Programa Rafaela+Sustentable, se están desarrollando huertas comunitarias agroecológicas en diferentes sectores de la ciudad.

Para llevarla a cabo, se cuenta con el acompañamiento de profesionales y técnicos del Programa Prohuerta del Inta quienes, mediante técnicas específicas, capacitación y provisión de insumos biológicos, promueven la producción de huertas orgánicas y el autoconsumo a nivel familiar, escolar y comunitario. De este modo, se favorece también una alimentación saludable, variada y equilibrada.

Esta importante actividad se inspira en un enfoque de la agricultura más ligado al medioambiente y a un fuerte compromiso social, centrado no sólo en la producción sino también en la sostenibilidad ecológica del sistema de producción.

La Municipalidad provee un kit de herramientas (compuesto por palas, rastrillos, carretillas, regaderas, entre otras) para poder realizar la tarea, la que es supervisada por los agentes territoriales del municipio. Por su parte, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) por intermedio de la Estación Experimental de Rafaela provee las semillas y la capacitación para llevar adelante la tarea.

El proyecto se realiza en los barrios: 2 de Abril (sudeste de la ciudad), dentro de las instalaciones del espacios de usos múltiples; en el Monseñor Zazpe (noreste), a través del Centro Integrador Comunitario (CIC), y en el Barranquitas (norte), en el que también se sumaron a la iniciativa alumnos de tercer grado de la Escuela Paul Harris.

Sobre las expectativas que va generando el proyecto, la secretaria de Desarrollo Social, Ana Theler, señaló que “los técnicos a cargo coinciden en que se observa mucho entusiasmo y esfuerzo en cada uno de los participantes, porque más allá de lo producido, se constituyen fructíferos espacios de encuentro entre los vecinos y los niños, festejando los logros compartidos, intercambiando experiencias y, al mismo tiempo, asumiendo buenas prácticas de seguridad alimentaria”.

Se está realizando un trabajo muy importante en los barrios donde “la mamá con sus hijos, las docentes con sus alumnos aprenden y enseñan a labrar la tierra, cultivar las plantas y ver cómo va creciendo ese producto que después termina siendo importante para su almuerzo o la cena, al transformarse en una alimentación saludable, nutritiva, diferente y variada”, agregó la funcionaria.

Objetivo

Respecto de los lugares en los que se desarrolla la iniciativa, Theler apuntó que “se trata de fortalecer lo comunitario para que sean muchas las personas que reciban este aprendizaje, pero también se realiza en casas de familias o si la escuela dispone de un terreno también podemos llevarlo a cabo en el mismo”.

La responsable del área social del municipio rafaelino destacó la participación de los alumnos de la Escuela Paul Harris “quienes concurren dos veces a la semana, en ambos turnos, al Centro de Atención Primaria de la Salud en donde junto a los agentes territoriales y sus docentes riegan, cultivan o siembran semillas y se los capacita con información sobre cuidados y beneficios de una huerta, transformándose de esta manera en una actividad muy interesante que se le agrega a la enseñanza escolar”.

Esta importante actividad se inspira en un enfoque de la agricultura más ligado al medioambiente y a un fuerte compromiso social, centrado no sólo en la producción sino también en la sostenibilidad ecológica del sistema de producción.