En barrio Los Hornos

Guillermo Dozo

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Días atrás El Litoral publicó la denuncia de la señora Florentina Gómez, de 76 años, que afirmaba ser víctima de violencia familiar por parte de la pareja de su hija que incluía amenazas de muerte y destrozos en su vivienda particular. También denunciaba que el golpeador, su yerno, hasta se había escapado de la Seccional 9na. -donde estaba bajo arresto- y que al salir reiteró las amenazas y habría roto parte del mobiliario de su casa de Pedro de Vega, casi esquina con Zavalla de barrio Los Hornos.

Esta mañana se hicieron presentes en la redacción de El Litoral, Miriam López Barro -hija de Florentina Gómez- en compañía de su pareja, Gustavo Torres quienes desmintieron los dichos de la septuagenaria. “Venimos a desmentir totalmente las declaraciones de mi señora madre porque, en realidad, nosotros somos las víctimas del accionar de un familiar directo que nos acosa de manera permanente”.

Señalaron que “somos nosotros los que venimos sufriendo denuncias inventadas y malos tratos por parte de un familiar cercano” y explicaron que esta situación es de tanta gravedad que “hay una orden de distancia sobre mi casa y mi grupo familiar para que ni mi madre ni algunos familiares se puedan acercar. Este es un decisorio del Juzgado de Familia, segunda secretaría”.

“Estuvo bajo arresto”

Miriam López Barro y Gustavo Torres aclararon respecto de lo publicado que “en la nota se habla de que hasta me había escapado de un arresto que tuvo lugar en la Seccional 9na. -señala Torres- y esto no es así. El arresto fue por 24 horas y lo cumplí tal como fue dispuesto”. Y Miriam agregó que “se denunció que se escapó y no es cierto. No hubo facilitación de ningún tipo”.

Además, Miriam señaló a El Litoral que “hay un familiar que trabaja para una corriente política -100 por Ciento Santafesino- porque quiere lucrar con un subsidio que están otorgando por violencia familiar” y señaló que “tengo solicitado en Correccional Segunda un pedido de continuidad de un tratamiento psiquiátrico porque es alcohólica y adicta y abandonó el tratamiento al que era sometida hace un tiempo”.

Agregó que “el problema es que este familiar está en una situación económica mala y por eso quiere lucrar con los subsidios políticos”.

Para Miriam la denuncia publicada contiene varias mentiras porque “dice que mi pareja hizo cerrar el negocio -un quiosco con algunas mesas fuera- pero, en realidad, es que este familiar adicto me generaba muchos problemas y por eso tuve que cerrar”.

Respecto de los supuestos malos tratos que su pareja le habría inflingido a su madre, señaló: “Yo no permitiría que ni mi marido, ni ninguna otra persona le haga una cosa” como la descripta por Florentina Gómez.

“No hubo agresiones de Gustavo Torres para con mi madre ni para ningún familiar”. A la vez, Torres expresó a El Litoral que “dicen que ingresé al domicilio de ella, y que provoqué destrozos. En realidad, no conozco la casa porque nunca ingresé... no sé ni cómo son los muebles”, expresó.