El Concejo ratificó el proceso de traslado de cinco locales bailables

Fijaron nuevos plazos para la relocalización final de boliches

El Cuerpo aprobó los planos de mensura en la zona de la Ruta 168, y ahora se podrán suscribir los boletos de compraventa de los terrenos. Los bolicheros tendrán 6 meses para empezar a construir en esa área. Y tres años como máximo para funcionar donde hoy están.

De la redacción de El Litoral

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El Concejo ratificó ayer con una ordenanza el proceso de relocalización de boliches bailables iniciado en 2009. Sancionó una norma -en base a un mensaje del Ejecutivo- con la cual aprobó el plano catastral de mensura para la superficie sobre la que se van a construir cinco locales bailables en una de las tres zonas autorizadas para realizar actividades de recreación nocturna -a la vera de la Ruta Nº 168-, las calles públicas y los lugares de estacionamiento. Con ello, ahora se podrán suscribir los boletos de compraventa de los terrenos donde se erigirán los boliches.

La norma sancionada define la “cuenta regresiva” -aseguraron concejales oficialistas- para concluir el proceso de relocalización de locales bailables: habrá un plazo de 6 meses para que los propietarios de los cinco boliches que firmaron oportunamente el convenio de traslado -Kwam, Passage, Soviet, Island y La Loca- empiecen a construir en la zona asignada, y podrán seguir funcionando hasta 3 años como máximo donde están ubicados actualmente (en Candioti Norte y Recoleta), contados a partir de la promulgación de la norma, y una vez que se suscriban los boletos de compraventa de los terrenos.

“La ordenanza original establecía que los plazos de relocalización empezaban a correr desde la escrituración pública de los terrenos. Pero esa transferencia por escritura pública iba a demorar mucho los plazos. Entonces, a través de la ordenanza sancionada ayer, se aprobaron los planos mensuras, y ahora los tiempos para el traslado definitivo de los boliches empezarán a correr desde que se suscriban los boletos de compraventa por parte de quienes habían firmado convenios y asumieron el compromiso del traslado de sus actividades bailables”, precisó a El Litoral el concejal Ariel Rodríguez (FPCyS-UCR).

Para el edil radical, los tiempos empezarán a correr “en el momento en que se firmen los boletos de compraventa, cuando los bolicheros ya tendrán la posesión de los terrenos. Sin las mensuras, no había un acto administrativo que dividiera el terreno y le permitiera al Ejecutivo avanzar con los boletos de compraventa. Ahora, con los planos catastrales aprobados, se agilizará el proceso de relocalización”, remarcó.

Antecedente

En octubre de 2009, durante la gestión Barletta, se declaró la emergencia nocturna en la ciudad, como consecuencia de los reiterados casos delictivos y de violencia juvenil en la zona de Recoleta. En paralelo, se aprobó una norma que establecía la relocalización de boliches céntricos hacia tres zonas alejadas del ejido urbano: a la vera de la Ruta 168, en avenida Alem -zona del Puerto- y avenida Aristóbulo del Valle desde Gorriti hacia el Norte.

Sólo pudieron continuar funcionando como boliches bailables aquellos emprendimientos que aceptaron entrar en el proceso de relocalización. El resto debió “reconvertirse” a local nocturno “sin actividad bailable”. El tema motivó reiteradas resistencias de parte empresarios bolicheros y de dueños de pubs. El reclamo público de vecinos de Recoleta -afectados por el ruido la actividad nocturna- también tuvo su peso en todo el proceso. En octubre del año pasado, municipio y dueños de cinco boliches -los mencionados más arriba- firmaron convenios donde se consensuó el traslado.

Con la norma sancionada ayer “se da un paso muy importante para concluir con el proceso de relocalización de los boliches. Pues se ratifican las acciones que se han llevado adelante con los empresarios de la noche, se aprueba la mensura y se fijan así los plazos definitivos”, señaló dijo el edil oficialista Esteban Aignasse (FPCyS) en el recinto. “Ahora se mejorará la actividad nocturna de la ciudad, y se hará un beneficio a los vecinos que directamente se veían afectados”.

Traslado. Cinco boliches que hoy funcionan en Candioti Norte y Recoleta ya firmaron el convenio con el municipio para reubicarse.

FOTO: Archivo El Litoral / Pablo Aguirre