Gran expectativa por las elecciones de mañana

Venezuela elegirá entre el socialismo del siglo XXI o un capitalismo mixto

Para la consulta están habilitados 18,9 millones de electores y los sondeos esperan una participación de 80 por ciento.

A.jpg

Seguidores de Henrique Capriles confían en sacar a Hugo Chávez del poder después de 14 años. Foto: DPA

 

Angel Alberto González - DPA

[email protected]

DPA

Los comicios presidenciales de mañana pondrán a Venezuela en la disyuntiva de elegir entre profundizar el “Socialismo del Siglo XXI” propuesto por el presidente, Hugo Chávez, o implementar un modelo mixto, como aboga el candidato Henrique Capriles.

Esta semana la Comisión Económica Para América Latina (Cepal) vaticinó que la economía venezolana crecería un 5 por ciento para 2012, una cifra más que respetable en medio de la crisis económica que atraviesa el mundo. Entonces,

¿Cuáles son los problemas de la economía venezolana?

El primer quebradero de cabeza es la inflación, que según datos del Banco Central de Venezuela (BCV) terminó en 2011 en 27,6 por ciento, la cifra más alta de América Latina. El gobierno de Chávez ha llevado adelante varios planes para controlarla, incluyendo una reforma monetaria en 2008, pero ninguna fórmula ha tenido éxito.

Sin embargo, el diputado por el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Francisco Torrealba, indicó que usar la inflación como medidor puede ser engañoso porque Chávez ha incrementado los salarios por encima del alza de precios.

“El presidente Chávez ha incrementado los salarios por encima de los niveles de inflación, ese es uno de los grandes logros de la Revolución Bolivariana: la recuperación progresiva del poder del salario”, apuntó Torrealba a la agencia dpa.

Torrealba, quien se desempeñó como dirigente sindical en el pasado, precisó que gracias a esta política Venezuela ha experimentado una reducción progresiva de la pobreza y el desempleo. En cambio, si un gobierno “de derecha” llegara al poder asegura que se podría vivir una situación similar a la de España, que tiene un 25 por ciento de desempleo.

“Si el gobierno fuera de derecha, que creyera en una reducción del tamaño del Estado, habrían cientos de miles de despidos”, advirtió Torrealba, quien se enorgullece que el desempleo en septiembre se sitúe en 7,9 por ciento, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

El economista y asesor económico de Capriles, José Guerra, desmintió que su propuesta consista en reducir la administración pública. Por el contrario, aseguró que su objetivo sería “generar 500 mil empleos por año‘ con “un crecimiento de entre 6 y 7 por ciento interanual”.

Guerra indicó a dpa que la idea es construir “una economía mixta donde convive el sector público y el privado, porque una economía donde el sector privado controla todo no funciona, pero el comunismo ha fracasado en todas partes”.

Según Guerra, la propuesta de gobierno de Chávez para el periodo 2013-2019 es buscar implantar de forma definitiva el modelo socialista, toda vez que “la formación socioeconómica que todavía prevalece en Venezuela es de carácter capitalista y rentista”, en referencia a la dependencia que mantiene el país sudamericano del petróleo.

Guerra recalcó asimismo que un gobierno opositor buscaría reducir gradualmente la inflación hasta un dígito con un tipo de cambio flexible.

“Nosotros hemos planteado la implantación de un tipo de cambio único y flexible, pero para eso es necesario aumentar la confianza para que llegue la inversión extranjera”, explicó Guerra, en referencia al temor que existiría a invertir por las expropiaciones realizadas por Chávez. En materia petrolera, el chavismo y la oposición coinciden en una premisa: la necesidad de duplicar la producción petrolera hasta los seis millones de barriles diarios, aunque difieren en la manera de lograrlo.

“Para el 2021 estimamos producir 6.120.000 barriles diarios y el precio estará mejor estimado. Para el 2021 (el precio de) ese barril debe estar cerca de 200 dólares”, declaró recientemente Chávez durante un acto.

Guerra restó importancia a los objetivos de la administración de Chávez. “La primera vez que Chávez prometió llevar la producción a seis millones de barriles fue en 2005 para 2012 y al día de hoy seguimos produciendo tres millones de barriles”.

Este profesor universitario manifestó que el plan de la oposición “busca atraer al capital privado, no sólo al extranjero como sucede con este gobierno, sino que nosotros creemos que también hay que incorporar al capital privado nacional”.

Torrealba, en cambio, advirtió que sólo la reelección de Chávez como presidente podría garantizar el crecimiento económico que le permita desarrollarse.

“La única forma de que Venezuela mantenga este ritmo de crecimiento es que Hugo Chávez siga siendo presidente. Sólo el socialismo garantiza la paz y el desarrollo del país”, dijo enfático.

Desde el bando opositor, Guerra señaló que Venezuela necesita de un cambio de gobierno que permita el desarrollo de un nuevo modelo económico que permita un alto crecimiento con baja inflación y genere miles de empleos.

“Necesitamos un nuevo modelo económico que permita un crecimiento sostenido con baja inflación y genere miles de empleos productivos. Eso es algo que este gobierno no ha logrado en 14 años y no lo lograrán en seis más”, concluyó.

“Chacho” Álvarez defiende confiabilidad del sistema electoral

El jefe de la misión de acompañamiento de la Unasur en Venezuela, el argentino Carlos “Chacho” Álvarez, destacó la confiabilidad del sistema electoral en el país de cara a los comicios presidenciales que se celebrarán el domingo.

“Es un dato muy importante, porque en una sociedad con una política de mucho antagonismo y con un proceso electoral que tiene ciertas notas de dramatismo en lo que se juega, lo importante es contar con un árbitro confiable”, declaró Álvarez a la emisora local Unión Radio.

Álvarez indicó que se reunió con actores de la oposición y del gobierno que le transmitieron “por unanimidad” que “el sistema es muy confiable y está muy auditado”.

Por ello, recalcó que “no hay ningún margen de posibilidades de fraude”, por lo que fue enfático en que “hay que confiar por supuesto en los resultados que emita el Consejo Nacional Electoral”.