El gobernador prefirió no hablar con la prensa

La Casa Gris cuida a Bonfatti de

peleas por “desestabilización K”

Bonfatti no formuló declaraciones. Más periodistas que los habituales cronistas de la sede del Ejecutivo quedaron sólo con expresiones de sus colaboradores.

Foto: Pablo Aguirre

Luis Rodrigo

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Sólo funcionarios. Esa parece haber sido la consigna que el gobierno provincial tomó para enfrentar la polémica desatada el presidente del PJ provincial, José Luis Freyre, con sus palabras: “Están dadas las condiciones en Santa Fe para una intervención”.

El titular del Poder Ejecutivo, Antonio Bonfatti, se mostró sonriente y relajado. Cumplió con el acto previsto por su agenda, y después de convidar con alfajores santafesinos a los alumnos de una escuela primaria de la localidad de Alcorta -ocasionales visitantes de nuestra ciudad- se fotografió con ellos, en las escalinatas de la Casa Gris. Rió cuando los inocentes chicos dijeron “¡whisky!” y recibieron una metralla de flashes.

Unos minutos antes, Bonfatti encabezó la inauguración una sala audiovisual -contigua al hall central de la sede gubernamental- y aunque saludó de manera amistosa a los periodistas cumplió lo que habían anticipado sus voceros. “No, no va a hablar”, habían advertido, circunspectos y en tono de pedido de disculpas, desde media mañana los hombres de traje que siguen al mandatario provincial.

Acaso porque se sabe que la tensión entre la Casa Gris y el kirchnerismo tiene necesariamente un día después, acaso porque el gobernador debe cuidar su buena relación con el partido que tiene la mayoría en ambas Cámaras o simplemente porque considera que las expresiones de Freyre no merecen una expresión de su parte, lo cierto es que el gobernador sólo usa a sus colaboradores para responderle al titular del peronismo santafesino.

Llamada sin respuesta

Directamente del despacho de Bonfatti, bajó más temprano el vicegobernador Jorge Henn al hall de acceso en la Casa de Gobierno. Fue a decir, entre otras cosas, que el sureño titular de la sede partidaria de calle Crespo no respondió la llamada telefónica que le hizo el propio gobernador Bonfatti.

Henn dijo que no puede pensarse que las expresiones de Freyre sean solo el fruto de un momento poco feliz, ni que su reproducción en distintos medios de prensa hayan podido tergiversar su contenido. El presidente de la Cámara de Senadores no cree en que se lo haya sacado de contexto. Advirtió que -como ayer salió a decir en pleno el Frente Progresista, Cívico y Social- son “institucionalmente graves” las palabras del kirchnerista que preside al justicialismo santafesino.

En tanto, el ministro de Gobierno, Rubén Galassi, aceptó hablar con los periodistas y observó: “Les pido que como periodistas revisen si en alguna oportunidad en 24 años el PJ habilitó en las Cámaras una interpelación a uno de sus funcionarios”, cuando se le consultó si el ministro de Seguridad Raúl Lamberto concurrirá a una cita de ese tenor a Diputados.

Galassi dijo que no está definido que hará el Ejecutivo con la ley que declara la emergencia en esa materia y subrayó que la respuesta no será improvisada, ni el fruto del momento político que vive la provincia, sino que “se evaluará aquello que sea positivo y aquello que avance sobre las facultades del gobierno que eligió el pueblo de Santa Fe”.

Antes, al hablar al público que concurrió al acto -había tantos funcionarios del Ejecutivo como empleados del Estado- subrayó que la Casa Gris es uno de los edificios “emblemáticos” de la “institucionalidad democrática”.

Cita textual

En una entrevista concedida al diario La Capital de Rosario, el gobernador de la provincia citó ayer una nota publicada en El Litoral años atrás, para aludir al narcotráfico y al uso político que, a su criterio, está realizando la oposición del tema.

“No hay peor mezquindad que tratar de sacar rédito político del narcotráfico -aseguró-. Pido que busquen un artículo del diario El Litoral firmado por Mario Cáffaro el 4 de mayo de 2007. A raíz de los 33 policías apartados de la Dirección de Drogas Peligrosas por la gestión de Jorge Obeid y Roberto Rosúa, hubo una reunión parlamentaria. Yo era diputado opositor y presidente del bloque socialista. En ese momento, dije que había que tomar al toro por las astas porque si no, el toro nos pasaría por encima. Y dije también, en pleno proceso electoral, que no era un momento para sacar provecho partidario porque el tema del narcotráfico debía encontrarnos juntos a los sectores democráticos. Si era por avanzar, me podía haber hecho un picnic. Tampoco buscamos rédito con el tema de las inundaciones de 2003 en Santa Fe. No somos irresponsables”, manifestó.