Uno de los nombres vinculados al caso Tognoli
Ascaíni pagó la fianza y quedó libre
Este hombre de 37 años, de Villa Cañás, es el protagonista central de la conexión entre supuestos narcos y las fuerzas de seguridad. Quedó en libertad ayer porque su detención carga con aparentes irregularidades.
Germán de los Santos
Carlos Andrés Ascaíni, de 37 años, con domicilio en Villa Cañás, quedó libre ayer a la tarde luego de depositar una fianza de 20 mil pesos en el Banco Nación, último requisito que le pidió el juez federal Marcelo Bailaque para abandonar la cárcel de Piñero como su lugar de residencia.
Ascaíni quedó en libertad porque el operativo en el que se lo detuvo con 1,2 kilos de “cocaína” y un arma de fuego con numeración adulterada se puso en duda en la Justicia Federal. El “Vasco” fue apresado el 8 de mayo pasado por la Brigada Operativa de Drogas, que estaba al mando de Alejandro Druetta, quien detuvo al presunto narco en la intersección de las rutas 90 y 94, en Chapuy, cuando el Audi 4 en el que se trasladaba estaba estacionado.
En el expediente 46.921 se resalta lo que declaró un testigo del operativo, algo que incrementa las dudas sobre el procedimiento. Este testigo dijo que los policías que habían detenido a Ascaíni le dijeron en qué lugar del auto debía mirar para advertir una bolsa transparente, que era donde estaba la cocaína.
Otro punto llamativo es que la supuesta droga incautada resultó ser, según una pericia oficial del laboratorio químico de la ex Drogas Peligrosas, una solución de azúcar y anestésicos en un 96 por ciento con una concentración de cocaína de apenas el 4 por ciento.
Ascaíni es un protagonista central no sólo de esta trama sino también de otras causas, como la que tiene implicado al ex jefe de la Policía Hugo Tognoli, a quien le dictaron la falta de mérito el lunes pasado.
En la Justicia Federal sostienen que en torno a este supuesto narcotraficante gira gran parte del sistema de complicidades con las fuerzas de seguridad, entre las que aparecen no sólo la policía provincial, sino también la Federal y Gendarmería, según se desprende del fallo del juez Carlos Vera Barros.
Cadena de complicidades
En el juzgado federal Nº3 señalan que el sur de la provincia, con Venado Tuerto como cabecera, adquirió un peso muy grande en el mapa del narcotráfico y que su área de influencia no sólo es Rosario. Las escuchas que cita el juez en el fallo cuando le dicta la falta de mérito a Tognoli hacen hincapié en la vinculación no sólo de “los pantalones negros” como llaman a los uniformados provinciales sino también de los “puertas verdes” (serían efectivos de Gendarmería Nacional) y los “azules” (Policía Federal).
En el juzgado federal Nº3 consideran que es peligroso el mensaje que se le está dando a la sociedad, que parece que todo lo ligado al narcotráfico queda impune en el departamento General López. Se refieren concretamente a dos hechos. Uno es el
procedimiento supuestamente irregular llevado adelante en Firmat por efectivos de la Dirección Provincial de Prevención y Control de Adicciones, al mando del subcomisario Alejandro Druetta, jefe de la Brigada Operativa Nº 8 el 27 de junio contra Aldo Totola Orozco. La justicia dictaminó que el operativo en el que le encontraron un kilo de cocaína estuvo mal hecho o que los policías le habrían colocado la droga. Y el otro es al que tiene otra vez a Carlos Andrés Ascaíni, quien quedó ayer a la tarde en libertad.
Fuentes del juzgado señalan que nada es casualidad. Y hacen memoria. Se viene observando un comportamiento muy llamativo de las fuerzas de seguridad de esa zona, donde todos los procedimientos se realizan sin investigación previa ni judicialización. Las órdenes se piden los fines de semana a la Justicia Federal. Y otra cosa, advierten las fuentes, gran parte de los detenidos por esos procedimientos aparecen golpeados.
Carlos Andrés Ascaíni quedó en libertad en una causa que la justicia Federal lo investigaba luego de ser detenido en posición de 1,2 kilogramos de cocaína. Foto: Archivo El Litoral
Voces en el teléfono
En la foja 615 del expediente 282/12A se reseñan una serie de escuchas telefónicas en las que supuestamente Carlos Andrés Ascaíni le cuenta a otro integrante de la banda que “llevaba el fierro en el baúl, que le avisó ‘al boludo este del jefe’ al Beto” (que se sospecha que es Néstor Fernández, actual comisario de la seccional 2ª de Rosario). Dice, según consta en el documento judicial, que “para mí están todos arreglados”.
En otra conversación grabada, Andrés (que sería Ascaíni, según el tribunal) charla con un tal Ale, que estaba siendo “molestado” porque “saben que trabaja” para el Vasco. Éste le dice que no se preocupe, que lo “anda asustando gente de chamullo y que te doy la garantía y la seguridad de que a vos la gente de ahí -de Venado de los azules- tanto los puertas verdes como los federales, ninguno de los dos te van a molestar y eso, yo esto te doy te doy la garantía que nadie te va a molestar, en eso, en lo otro... viste”.
Insiste: “Yo te doy la garantía de que los muchachos estos de pantalones negros no te van a molestar.Vos quedáte tranquilo que los únicos que nos pueden embagallá están del lado nuestro. Mientras nosotros le pongamos como corresponde nadie te va a embagallá... vos... y te digo más... eso de eso si querés la semana que viene voy, te llevo y te presento al Federal”.
