Rechazo a las políticas del gobierno

Histórica movilización en Santa Fe

Varios miles de personas se concentraron en la Plaza 25 de Mayo, con una masividad inusual para una protesta en nuestro medio. El clamor, que recorrió todo el país, se hizo sentir en toda la provincia.

De la redacción de El Litoral

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Varios miles de santafesinos se concentraron en la Plaza 25 de Mayo, al igual que en las principales ciudades de la provincia y el país, para protestar contra el gobierno nacional y exigir respuestas a diversas consignas. Los principales blancos del clamor popular fueron la corrupción, la inseguridad, la inflación y las pretensiones re-reeleccionistas, ilustradas con cánticos, carteles y consignas de diverso tenor, acompañadas por palmas y cacerolas.

La elevada temperatura no impidió que, en un rango de cerca de tres horas -de las 20 hasta casi las 23- los santafesinos se dieran cita frente a la Casa de Gobierno, en una concurrencia que en parte se renovaba con el transcurso del tiempo, y en otra apostaba a la permanencia, pero que siempre ostentó una masividad mucho mayor que la del 13 de septiembre y que, en nuestra ciudad, fue de carácter histórico.

El acto se desarrolló con absoluta tranquilidad, sin discursos ni banderas partidarias. Las consignas, en tanto, pivotearon sobre los temas centrales apuntados, con variaciones entre quienes recuperaban -con mayor o menor virulencia- el “que se vayan todos” y los que rechazaban esa premisa. Pero en todos los casos, se apoyaban en la necesidad de dar rienda suelta a la “angustia” y el imperioso deseo de “ser escuchados”. El clamor no se ceñía al gobierno nacional como destinatario, sino que también abarcaba a las autoridades provinciales y municipales, y a los dirigentes de la oposición.

El punto de mayor afluencia fue a las 21, momento en que -a instancias de una participante que se tomó el trabajo de recorrer la plaza para proponerlo- se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino. Por entonces, el saturado espacio urbano también era atravesado por una gigantesca bandera nacional. En el entorno -extendido a las cuadras circundantes-, vendedores de choripanes y gaseosas, y también de réplicas de la enseña patria, se desentendían de la naturaleza de la convocatoria y aprovechaban la concentración de personas.

Por la provincia

En Rosario, la multitudinaria concentración se realizó en el Monumento a la Bandera, otorgándole un imponente marco, en imágenes que recorrieron el país. En San Justo, el punto de encuentro fue la esquina de Independencia y Avenida Iriondo, frente a la plaza San Martín. Alrededor de 80 personas se reunieron a partir de las 20.30, en forma pacífica, sin carteles y con cacerolas. En Tostado la cita fue pasadas las 21, cuando alrededor de 150 personas se concentraron pacíficamente en la Plaza 25 de Mayo, portando banderas argentinas y pancartas con diversas leyendas en contra de la política del gobierno nacional. Es digna de destacar la presencia de adolescentes y jóvenes, que se expresaron en contra del voto a los 16 años, ya que consideran “que la entrega de una simple netbook condiciona la decisión” del sufragio, aunque este no sea obligatorio a dicha edad.

En Rafaela, la convocatoria congregó a más de dos mil personas frente a la Municipalidad. Personas de todas las clases sociales y edades, fueron llegando e incrementado la concentración. Luego la marcha se trasladó hasta el microcentro de la ciudad, donde unas seis cuadras se vieron desbordadas de familias marchando pacíficamente.

La movilización en la primera colonia agrícola del país, Esperanza, se realizó desde las 20, donde se congregaron unos 800 vecinos en Plaza San Martín. Desde diferentes barrios llegaron hasta el centro de la ciudad con banderas, pancartas, carteles y cacerolas, expresando su disconformidad con las políticas del gobierno. Como ocurrió en la capital provincial a las 21 cantaron el himno nacional y cerraron con el grito de unidad por el país. Vale recordar que Esperanza no se movilizó el pasado 13 de septiembre, pero si estuvo presente este 8N.

Finalmente, en Reconquista, a las 21 unos 250 manifestantes se trasladaron hacia la esquina de Iturraspe y Obligado de la plaza central, exhibiendo una bandera nacional de varios metros, con cacerolas en las manos y carteles bien en alto.

Vuelve Cristina

La presidenta presidirá el lunes próximo el acto de la inauguración de la nueva planta de la firma Laminados Industriales SA, subsidiaria del grupo Beltrame, ubicada en Villa Constitución. Desde allí, y por videoconferencia, también participará del corte de cintas de la ampliación de la planta industrial del fabricante brasileño de acoplados Randon en Alvear y de una nueva línea de producción de la fábrica de alimentos para mascotas Purina que Nestlé tiene en Santo Tomé. Con el inmediato antecedente del cacerolazo de anoche, y los cruces por el narcoescándalo, la mandataria se verá cara a cara con el gobernador Antonio Bonfatti, quien ya confirmó su asistencia.

Bonfatti: “Hay que escuchar”

El gobernador Antonio Bonfatti exhortó a la dirigencia política tanto oficialista como opositora a pensar en el “9 de noviembre”, tras la masiva protesta de ayer, y “escuchar lo que la gente dice”. El mandatario llamó a “alcanzar consensos” al advertir que si no “se puede volver un boomerang”.

Bonfatti opinó que los opositores “deben pensar una forma para que una protesta masiva como la de ayer, la segunda en su tipo en dos meses, realmente tenga una expresión en un partido político o en varios”.

De todas formas, advirtió que “el primer error hubiese sido aquel pícaro que hubiera querido capitalizar lo que surge espontáneamente de la gente. Lo lógico -expresó- sería que la democracia se canalice a partir de partidos políticos en el momento electoral”.

Según opinó, los cientos de miles de manifestantes que salieron a la calle “se expresaron con demandas de necesidades, pero lo importante -insistió- es el 9 de noviembre; qué hacemos con esto, qué espacio le damos a poder escuchar lo que la gente dice y avanzar con los consensos necesarios”, sostuvo. Pero advirtió que esto debe realizarse sin “torcer el sentido de un gobierno, porque fue electo por la voluntad popular; hay que tratar de alcanzar consensos”, sugirió.

En Rosario, la concurrencia saturó las inmediaciones del Monumento a la Bandera. La movilización se repitió en San Justo, Reconquista, Rafaela, Esperanza y Tostado. Foto: DyN

Al cruce

La presidenta Cristina Fernández aseguró hoy que “no tienen que pensar todos exactamente lo mismo” y aseguró que “lo que más enriquece a una persona, a un país, a una sociedad, es poder incluir y poder convivir y compartir, aun con los que tienen historias diferentes”, sostuvo la mandataria.

Durante un acto oficial con intendentes justicialistas bonaerenses realizado en el Salón de las Mujeres de la Casa de Gobierno y a pocas horas del masivo cacerolazo opositor, Cristina Fernández defendió su gestión en materia cambiaria y de asistencia social, y cuestionó a quienes “parece que están a favor de los fondos buitres”.

Sin hacer referencia directa a los cacerolazos, la mandataria aseguró que “un formidable aparato cultural” se “extendió y actuó sobre todos los argentinos para que tuvieran ideas distorsionadas sobre el país”.

“Lo de afuera todo bien y lo de adentro todo mal”, ironizó, luego de resaltar las políticas que se llevaron adelante desde 2003, que afirmó hicieron que el país sea “mucho menos vulnerable” ante la crisis en Europa y Estados Unidos.

Al respecto, agregó: “Nos han instalado determinadas frases, títulos, que cuando uno le pregunta sobre el título no sabe explicar o desarrollar. No hay sustento, ideas, es simplemente repetir lo que se lee o que alguien le dice desde una pantalla de televisión”.