López, campeón del Súper TC 2000

De “Pechito” rumbo al título

Allí va. José María López muestra el camino, escoltado por el Honda de Risatti, el otro Ford de Jorge Trebbiani y el Peugeot 408 de Fineschi. Foto: Agencia DyN

El cordobés, con el Ford Focus del team PSG16, arribó quinto en la carrera de Potrero de los Funes y se llevó el primer título de la mejor categoría del país. La competencia fue ganada por el cordobés Néstor Girolami, con el Peugeot 408.

De la redacción de El Litoral

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Otro espectáculo que culminó tal cual se preveía, porque en una carrera vibrante y emotiva, que mantuvo el atractivo de principio a fin, José María López (PSG16 Team) se coronó campeón del Súper TC 2000, al arribar ayer en cuarto lugar en el Circuito Internacional de Potrero de Los Funes. La competencia fue ganada por Néstor Girolami (Peugeot Cobra Team), mientras que su compañero el santafesino Facundo Ardusso y Matías Rossi (Toyota Team Argentina), completaron el podio.

Todo lo sustancial que mostró la categoría en esta temporada inaugural del STC 2000, se puso nuevamente de manifiesto en esta última fecha desarrollada en el circuito más moderno, completo y con grado II FIA, como lo es el de San Luis. Ese impulsor que batió el récord en Rafaela, la utilización del paddle shift, la suntuosidad de los callejeros (Santa Fe y Capital Federal), la superioridad del Toyota Team Argentina en las primeras cuatro fechas del año, las otras 4 siguientes quedaron en exclusividad para el PSG16 Team y un cierre con 4 pilotos y otras tantas marcas llegando a la fecha de cierre con chances y cifras palpables de campeonato, hicieron de este primer certamen del STC 2000, algo que sin dudas no va a pasar desapercibido en la historia de nuestro automovilismo.

Vencer al TTA de Ramonda, Aznarez y Bruna no era tarea sencilla. Sin embargo, el PSG16, con extrema dedicación y la experiencia de la trilogía Scarazzini-Ciabattari-López, supo romper con esa racha ganadora. Lo que no podía imaginarse es que de ahí en adelante el piloto cordobés se acercaría a los líderes carrera tras carrera hasta tomar la punta del torneo enlazando 4 triunfos consecutivos.

Ricado Risatti (Honda Petrobras), Rossi, Néstor Girolami (Peugeot 408) y Leonel Pernía (Renault LoJack Team) ganaron las competencias restantes hasta llegar a este domingo, donde desde la disputa del Súper 8 en la mañana puntana fue una mezcla tan extraña como interesante de tensión, emoción e incertidumbre. Ese parcial se adueñó de cada instante de súper acción, más aún cuando ni López ni Rossi lograron sumar puntos y la victoria quedó en poder de Emiliano Spataro con el Fluence de Renault.

Electrizante

La carrera desbordó de alternativas: primero cuando Franco Vivian (Pro Racing) debió salirse de la grilla para una reparación de último momento dejando un claro para que “Pechito” López (largaba 6º) avanzara una posición antes de partir, lo mismo que Rossi con el abandono de Agustín Canapino (Chevrolet Cruze). Mientras tanto, Spataro hacía lo que tenía que hacer para lograr una hazaña: lideraba la carrera con intención de ganarla. El primer golpe de efecto se vivió cuando López superó a Girolami luego de un toque que le desacomodó el P. 408, aunque en la vuelta siguiente le devolvió la posición para no ser sancionado.

Rossi fue por el cordobés tantas veces como pudo, como en el giro 5 cuando logró pasarlo pero en la misma maniobra el piloto del PSG16 Team recuperó la posición y recién al promediar la carrera, fue cuando cumplió el primer objetivo de quedar adelante de su rival.

Tres giros más tarde la cosa fue vibrante, porque el Toyota de Rossi fue por Girolami, lo tocó, lo desacomodó y ambos, intentando reacomodarse, golpearon al Focus de “Pechito” López, siendo los dos superados por el “Facu” Ardusso.

El auto del PSG16 Team quedó sentido y ya no volvió a ser el mismo. La incertidumbre se apoderó de una escena dramática: el lote de los que iban adelante se escapó con Rossi incluido, Spataro debió pasar por boxes por la rotura de un neumático y a dos giros del final, el ascendente Damián Fineschi dio cuentas del cordobés relegándolo al quinto lugar.

Y llegó el final, donde José María López vio flamear la bandera a cuadros 5º, desatando su alegría por el trabajado título conseguido y el alivio de un equipo que aguardó vuelta tras vuelta el desenlace para romper en llanto desbordados de emoción porque su piloto se inscribió como el primer ganador del Súper TC2000.

La definición fue acorde a la categoría, por la enorme tarea de los Peugeot 408 cerrando el año en lo más alto del podio con Girolami y Ardusso. Muy bueno lo de Fineschi e impecable lo de Emiliano Spataro haciendo todo lo que estuvo a su alcance para intentar lo que el viernes parecía una utopía, pero que ayer no pareció ser tan lejano y hasta pudo ganar la carrera. Muy bueno lo de Matías Rossi, que batalló hasta el final en pos de conservar el Nº 1 que tenía pintado en los laterales del Corolla.

Con estos resultados, Renault se consagró campeón de marcas y equipos, seguido por el Toyota Team Argentina.

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“Pecho” argentino. Después de habernos representado en el exterior desde los 15 años, José María López retornó al país y ya logró cuatro títulos: dos en el TC 2000, uno en TR V-6 y el de ayer en el Súper TC 2000. En la toma, acompañado por Matías Rossi. Foto: Agencia DyN

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Fiat Punto Abarth

Marioni tiene el “1”

El ex futbolista Bruno Marioni se adjudicó ayer el primer título de su carrera como piloto. “Barullo”, de 37 años, obtuvo el título de la Fiat Abarth Punto Competizione al finalizar segundo en la carrera realizada en San Luis. Marioni surgió como futbolista en 1995 en Newell’s y luego pasó por varios clubes.

Fórmula Renault 2.0

Merlo campeón

El puntano Carlos Merlo de 18 años se coronó campeón de los monopostos argentinos. La categoría desarrolló dos competencias en el fin de semana y ambas fueron ganadas por Julián Santero; el santafesino Manuel Luque, de gran actuación, arribó segundo en las dos carreras.

/// análisis

Está en buenas manos

Daniel Monticelli

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El primer campeonato del flamante Súper TC 2000 quedó definido en favor de José María López, integrante del equipo privado PSG16. Esta sensacional categoría, que cambió su fisonomía en este 2012 -sobre todo con una nueva motorización: se elevaron a 2,7 litros su cilindrada, erogando una potencia de 430 CV (semejante responsabilidad estuvo a cargo de la empresa inglesa R.P.E., Radical Performance Enginees)- llegó al final de su ejercicio inicial.

Evidentemente, “Pechito” López y sus allegados no se equivocaron cuando a tres fechas del arranque de temporada debieron cambiar del Pro Racing (con los Fiat línea) al PSG16, de Hidalgo-Masas y los Ford Focus, ahora privados ante el alejamiento de la marca del óvalo.

Este equipo, que venía golpeado por donde se lo mire (lo mencionado de Ford y después sobrevino el fallecimiento de su piloto en TC, Guido Falaschi, que se mató en Balcarce el 13 de noviembre del año pasado y de allí el nombre del team en homenaje al joven de Las Parejas), apostó también al cordobés, ante la imposibilidad del brasileño “Cacá” Bueno de continuar toda la temporada por sus compromisos con el Stock Car de su país (sólo hizo tres fechas).

Junto a un gran estratega como lo es Alberto “Cachi” Scarazzini y la dirección de Javier Ciabattari, sumado al gran manejo de “Pechito”, juntos fueron construyendo un campeonato que en los primeros tramos estaba dominado por la gente de Toyota. López comenzó con esta escuadra en la cuarta fecha de San Juan y de inmediato, merced al gran auto que le pusieron en pista, hilvanaron cuatro victorias consecutivas: General Roca, Oberá, Rafaela y Mendoza. Más luego en Río Cuarto fue sexto; en el callejero de Santa Fe tuvo que conformarse con apenas un quinto puesto en la carrera nocturna. Terminó segundo en el Güemes salteño, para lograr el título ayer con un 5to. puesto en Potrero de los Funes.

Sin olvidar el pasado reciente de López (donde por pésimos manejos de terceros, se frustró su posibilidad de correr en F-1 en 2010, además de perder la corona de TC en 2009), el piloto de Río Tercero y como es habitual en él, se repuso a las adversidades. Esta vez los acontecimientos deportivos le fueron favorables, quedándose con la merecida primera corona del STC 2000.

Franco Girolami, campeón

El cordobés, a bordo de un Fiat Línea del Pro Racing, al culminar segundo en la final del TC 2000, disputada en Potrero de los Funes, le alcanzó para coronarse campeón de la categoría. La competencia fue ganada por Gerardo Salaverría (Focus/PSG16 Team), mientras que Agustín Calamari (Fluence/Río de La Plata), completó el podio.

El inicio de la competencia mostró a Salaverría doblegando a Girolami, ganando así el primer lugar que hasta ese entonces era del piloto de Isla Verde. Girolami se mantuvo como escolta del uruguayo. A pesar de haber resignado la vanguardia, un golpe de suerte favoreció al cordobés puesto que Ignacio Julián, el otro contendiente al cetro, era chocado desde atrás por su compañero de equipo Federico Carabetta. Los daños en el Fluence obligaron a un paso por boxes que posicionó a Julián en el último lugar.

Después del objetivo

“Lo vivo como nunca”

José María López reconoció vivir el título de campeón de STC 2000 “como nunca antes y conté con la ayuda de Dios, de Guido (el fallecido Falaschi) o alguien más. Esto es increíble. Estuve a casi 70 puntos y corrí con un auto privado. Sufrí con el golpe de Rossi, me partió, su intención fue sacarme de carrera”, disparó.

Con el alma

“Cachi” Scarazzini

Alberto Carmelo Scarazzini, director deportivo del equipo PSG16, celebró emocionado el merecido título. “Siento una gran emoción y una gran nostalgia. “¡Lo merecimos ‘Gordo’ (así llamaban a Falaschi), vamos! Dimos tres carreras de ventaja y llegar a esta instancia es un sueño y lo logramos. Nos queda la conciencia tranquila de que dimos todo por Guido”, señaló.

“Año positivo” para Peón

El presidente del Súper TC 2000, Pablo Peón, expresó que el balance 2012 en el tema motores fue “positivo” y destacó que además se “avanzó mucho” en el tema seguridad en los circuitos.

“El balance es positivo y en seguridad se avanzó mucho. El accidente de Falaschi nos hizo replantearnos un montón de cosas”, sostuvo Peón, en relación al choque fatal de Falaschi del TC en Balcarce. En referencia a Seguridad, sostuvo: “La responsabilidad es de los organizadores, pero la categoría avanzó mucho en el tema”.

En lo que respecta al calendario 2013, Peón aseguró que habrá carreras en los callejeros de Santa Fe y Buenos Aires, que sería la competencia que daría inicio al torneo, el próximo 31 de marzo.