La economía en análisis

Servicios es un sector con alto valor agregado

De la redacción de El Litoral

[email protected]

DyN

El economista de Cippec, Eduardo Levy Yeyati, advirtió que “la fijación con la industrialización intensiva de sustitución de importaciones, no es el camino a seguir” para sostener a largo plazo el desarrollo económico argentino. Además, aseguró que la importancia del sector industrial en términos reales no exhibe cambios respecto de los niveles que registró durante el período de Convertibilidad, ya que la estructura productiva sigue sosteniéndose en torno a los servicios, la construcción y el empleo público.

El especialista consideró necesario apuntar al desarrollo de un sector de servicios de “alto valor agregado y como generador de empleo de calidad”.

Según una nota de prensa difundida por el centro de estudios sobre políticas públicas, Levy Yeyati explicó que “entre 1996 y 2012 la importancia relativa de la industria manufacturera en términos reales pasó de un mínimo de 15,4 por ciento en 2002 a un máximo de 16,8 por ciento en 2004, para luego descender a niveles cercanos al 16 por ciento”.

Por ello, aseguró que “comparada con el PBI a precios constantes de 1993, la estructura productiva continúa, igual que en la década de los noventa, dominada por los servicios y la construcción”.

El economista del Cippec consideró necesario dejar de bregar por un proceso de industrialización para alentar “el desarrollo y la generación de empleos de calidad sostenible en el tiempo”.

Al respecto, Levy Yeyati abogó por la necesidad de generar en la Argentina un sector de servicios “más moderno y de alto valor agregado”, tal como el que pueden exhibir los países desarrollados.

Alerta

Brasil reveló que hubo en el país un caso atípico de vaca loca y puso a la industria en alerta. El gobierno brasileño anunció ayer que los resultados de las pruebas realizadas a una vaca que murió en el sur del país en 2010 revelan que se trató de un caso “no clásico” de encefalopatía espongiforme bovina (EEB), enfermedad conocida como “mal de la vaca loca”, y descartó riesgos para la salud. La vaca, procedente del Estado de Paraná, poseía el agente que desencadena la EEB, sin embargo no manifestó la enfermedad ni murió por esa causa y así desmintió versiones que habían aparecido más temprano.