“Sentido de pertenencia”

Cuando la familia del deporte motor se iba congregando para defender las instalaciones de la entidad del sur de la ciudad, el fenómeno climático que azotó ayer a nuestra capital suspendió la actividad. De todas formas, en el ambiente quedó flotando esa sensación única: cada uno de nosotros estaba “ en casa”.

Daniel Monticelli

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Hay entidades que van más allá de lo deportivo y conforman un amplio y atractivo espectro en nuestra querida ciudad. Nombrar a clubes tradicionales de esta capital como Gimnasia de Ciudadela, República del Oeste, Villa Dora, Nacional, Newell’s, Sportivo Guadalupe, entre tantísimos, es mencionar a muchas entidades con una historia inconmensurable de pasiones, satisfacciones y fantasías, que afortunadamente van mutando de generación en generación.

En estos momentos en que la inseguridad de los ciudadanos en su conjunto es un tema que nos preocupa a todos, da una gran tranquilidad a las familias cada vez que algún niño o joven pronuncia esa frase casi sagrada: “Estoy (o voy) al club”, porque se sabe que esos espacios físicos son un polo de protección para nuestra juventud.

Y en la disciplina del deporte motor que abrazamos allá a lo lejos y en el tiempo, nosotros tenemos al Automóvil Club Santa Fe. Ése, el reducto adecuado que está metido en un rincón del sur capitalino, casi llegando al Puente Carretero que conecta con Santo Tomé.

Ayer, y como se informara oportunamente, hubo una convocatoria para que todo el ambiente motorizado se dé cita una vez más para preservar y cuidar ese pedazo de patrimonio que con tanto esfuerzo y tesón supieron conquistar un sinnúmero de entusiastas dirigentes.

Todos sin excepción, antes de que se abatiera la fuerte tormenta y lluvia, palpamos inmediatamente algo que sabíamos de antemano que iba a suceder: que se congregara mucha gente. Desde los máximos protagonistas que son los pilotos, hasta los chiquilines y futuros “drivers” que intervienen en la escuela de karting que funciona en la institución, acompañados por sus familias. También había prestigiosos preparadores, dueños de escuderías, una comitiva de directivos representando nada menos que al máximo organismo que rige el automovilismo deportivo en nuestra provincia, como es la Federación de Asociaciones de Pilotos y Clubes del Deporte Motor Santafesino.

Asimismo, existió el respaldo de dirigentes políticos, de diversos medios periodísticos y todos enmarcados en el paisaje y el “sonido inconfundible” del paseo veloz de los Karting en sus distintas divisionales, de las motos de Cross o las del Motociclismo, que giraban en los diferentes trazados que tiene el club. También se dieron cita distintas escuderías, agrupaciones de Autos Antiguos y de marcas de vehículos, poniéndolo mucho color a la jornada.

Para que quede bien claro que el Automóvil Club Santa Fe debe continuar contando con ese hermoso predio para la práctica de diversas disciplinas.

Ayer entre todos quienes conformamos los deportes mecánicos, nos concentramos en armonía y en paz y con una premisa excluyente: sumar cada vez más adeptos para engrandecer esta “gran familia de los deportes motorizados”.

Por si hiciese falta resaltarlo, en ese poco rato que compartimos entre todos, emergía esa “magia de y por los fierros” que nos une invariablemente a través de un hilo perdurable en el tiempo.

Gestas. El Motocross congrega una muy buena cantidad de inscriptos cada vez que llega a la pista del Automóvil Club Santa Fe. Foto: Archivo/Pablo Aguirre