Fortuna

El último fin de semana de marzo la ciudad recibió la visita de un emblemático velero de la Armada Argentina: el ARA Fortuna, botado en 1949. Permaneció amarrado una semana en el Yacht Club, fue visitado por amantes de la vela y curiosos, y acompañó una regata a Rosario.

TEXTOS. NICOLÁS LOYARTE. FOTOS. FLAVIO RAINA.

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Con sus velas al viento, desde hace más de medio siglo surca los océanos y mares del mundo. Su casco de metal, sus herrajes de bronce, su cubierta e interior con detalles de madera impecables, conservan cientos de historias, regatas y travesías testimoniadas en su bitácora. El Fortuna (Q 74) es un velero yawl (palo mayor y mesana) que mide 19,4 metros de eslora con una superficie vélica de 182 m2.

Fue botado en la Dársena Norte de Buenos Aires el 22 de noviembre de 1949 como barco escuela de la Armada Argentina, y lleva su nombre en honor a la goleta homónima que combatiera en la guerra de la Independencia. Hoy tiene amarra permanente en Puerto Madero. Pero la última semana de marzo permaneció amarrado en la caleta del Yacht Club Santa Fe, donde fue visitado por los navegantes santafesinos y otros curiosos que, al enterarse de semejante presencia, se acercaron a ver de qué se trataba.

Uno de los cuatro suboficiales de la embarcación, el Cabo Primero de Mar de la Armada Bernardo Carricarte (27) recibió con amabilidad a Nosotros, compartió una mateada junto al equipo periodístico en el interior del Fortuna, y mostró en detalle todos los herrajes, velas, cabos y demás elementos de navegación de la nave que fuera diseñada en 1947 por Manuel Campos. En la charla, Carricarte contó que pese a su corta edad en los dos años que lleva a bordo del Fortuna tuvo la oportunidad de navegar las aguas del sur, y antes tripuló la Fragata Libertad.

Junto a Carricarte se encontraban el vicecomodoro del YCSF Mario Salva, y el secretario Romeo Angelucci, quienes expresaron el orgullo y emoción de la histórica institución de vela santafesina al ofrecerle amarra al Fortuna el domingo 24 de marzo, cuando arribó a nuestra ciudad. La Comisión Directiva del YCSF agasajó al capitán de la embarcación, Luis Tesolín, y su tripulación, en una cálida velada en las instalaciones de la institución ubicada sobre el río Santa Fe, junto al Puente Nicasio Oroño.

EN LA REGATA

El motivo de la visita del Fortuna fue la regata Paraná-Rosario, que se disputó desde el primer minuto del domingo 31 de marzo, en el marco de los festejos por el 50º Aniversario del Club de Velas de Rosario -fundado en el YCSF- y los 200 años de la elevación a villa del primer poblado que dio nacimiento a la ciudad de Paraná. Aquella noche, un espectáculo de luces al tope de los mástiles y decenas de velas blancas sobre el agua se vivió en la barranca de Paraná, y cientos de vecinos se acercaron a ver el paso de los competidores junto al Fortuna y a disfrutar además de los fuegos artificiales.

Un encanto aún mayor fue el que vivieron los tripulantes de los 60 veleros en regata que fueron acompañados hasta Rosario por el Fortuna en medio de la noche, iluminados por la luna y las estrellas.

La regata Santa Fe-Rosario (que esta vez se largó desde Paraná) es la más importante de la región y este año participaron veleristas del YCSF, Club Marinas Puerto Santa Fe, Náutico Paraná y demás clubes rosarinos. El arribo a Rosario fue pasado el mediodía del 31.

LOS AFORTUNADOS

Con líneas tipo “crucero oceánico”, el Fortuna necesita para navegar a vela siete tripulantes fijos, tiene capacidad para alojar hasta a doce personas, y cuenta con todas la comodidades necesarias para realizar una regata de largo trecho con el velamen repartido pero de generosa superficie, con velas livianas y de trabajo para buen o mal tiempo.

Un artículo periodístico firmado por Fernando Murillo cuenta algunos detalles de lo difícil que fue la construcción del Fortuna. “Era una época de crisis (por la Segunda Guerra Mundial), hubo que acopiar materiales de diversos orígenes. Manuel Campos relató en una oportunidad que el plomo para el quillote provino de las baterías de acumuladores del sumergible Salta, fuera de servicio. El aluminio utilizado para los lomos de ballena de las escotillas se extrajo de los planos de un hidroavión Southampton Mk III, fuera de servicio en Puerto Belgrano. Los perfiles ángulos, de 50 x 50 x 5, utilizados en las varetas metálicas también fueron obtenidos por similar procedimiento”, recuerda.

El Fortuna está hoy impecable. Brilla por donde se lo mire y cuenta con dos nuevos mástiles (de mayor y mesana) que reemplazaron a sus antiguos palos de madera. Además tiene velas de regata en excelente estado y el contraste de algunos herrajes antiguos y modernos le otorgan un encanto y belleza únicos. En su interior de madera barnizada no hay un rayón. Las cuchetas, la cocina, los baños y el tablero de navegación están impecables. Y en la proa los cabos y velas se encuentran en un perfecto estibado, listos para ser utilizados.

DE CARRERAS Y TRAVESÍAS

En 1954 el Fortuna resultó ganador de la regata Buenos Aires-Mar del Plata y en 1956, de la regata Buenos Aires-Río de Janeiro. Participó en la regata Newport-Bermudas (Estados Unidos) en cuatro oportunidades, la más importante de aquellas épocas.

Ganó, en 1966, la serie “A” frente a barcos mucho más modernos. Obtuvo el 1er. puesto en la categoría “Escuelas Navales” en la regata Newport-Cork en 1969 y dos años después triunfó en su serie en la regata Ciudad del Cabo-Río de Janeiro. Intervino en la regata conmemorativa del quinto centenario del descubrimiento América “Colón ‘92”, según publica la Armada Argentina en su sitio en Internet. Además, entre las navegaciones de crucero que realizó el Fortuna por los mares argentinos cuenta con una a Ushuaia e Isla de los Estados, y otra a las Islas Malvinas.

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bernardo carricarte (27). Oriundo de tapalqué (bs. as.), hace dos años está a bordo del fortuna.

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cada pieza del velero está en perfecto estado.

CARACTERÍSTICAS

Eslora total: 19.4 m

Eslora en flotación: 13.7 m.

Manga: 4.33 m.

Calado: 2.7 m.

Desplazamiento: 31.5 t.

Lastre de plomo: 10 t.

Superficie vélica: 182 m2.

Aparejo: yawl bermuda.

Vela: ARG 222.

Botadura: 22 de noviembre de 1949.

Fuente: “El Fortuna, un yate hecho leyenda” (Fernando Murillo) http://www.cibernautica.com.ar/fortuna/fortuna2.htm

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en su viaje hacia santa fe niños alumnos de una escuela de vela navegaron el fortuna.

UN SELLO DE LA ARMADA

El velero Fortuna fue diseñado por Manuel Campos y fue botado en 1949. Veintisiete años más tarde, en 1976, llegó el Fortuna II, que fue diseñado por Germán Frers.

Su casco de aluminio representó un avance tecnológico para los veleros de esa época. El diseño estuvo relacionado con la idea de competir dentro de los lineamientos de la Fórmula IOR, pero con posterioridad fue sometido a modificaciones y adaptado a la Fórmula IMS.

Y finalmente, en 2004 se realizó la botadura del Fortuna III, unidad de regatas de vanguardia de última generación. El Capitán de Fragata Marcelo Goyenechea fue quien tuvo a su cargo el desarrollo y dirección del proyecto. Este yate versión crucero-regata que se incorporó a la escuadra náutica de competición internacional de nuestro país, promete seguir los exitosos pasos de sus antecesores.

Fuente: Armada Argentina (www.armada.mil.ar).

+datos

TRAVESÍA

1971 - 29 de diciembre. Partió de Dársena Norte (Bs. As.) rumbo a las Islas Malvinas, en donde permaneció del 10 al 15 de enero de 1972. Regresó a Buenos Aires el 23 de enero. Comandante: CF Máximo Rivero Kelly.

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fue botado en 1949 y tiene amarra permanente en puerto madero.