Siguieron los allanamientos

Creen que barras de Boca tuvieron apoyo de empleados del club

Télam

Los investigadores de los incidentes que motivaron la suspensión momentánea del superclásico del último domingo creen que varios barrabravas de Boca ingresaron al club el sábado último tras romper un alambrado y que escondieron la pirotecnia en los baños de la popular local, con la complicidad de los empleados de seguridad.

Fuentes de la investigación confirmaron a Télam que la principal línea que maneja el fiscal de instrucción porteño Javier López Zavaleta es que los barras ingresaron al club entrada la noche del sábado último, es decir, unas horas antes del inicio del operativo de seguridad organizado para controlar el clásico entre Boca y River.

La hipótesis fiscal, en base a la declaración de testigos, es que los barrabravas rompieron un alambrado perimetral e ingresaron a la sede del club con bolsas de consorcio repletas de bombas de humo, petardos, “tres tiros” y fuegos artificiales.

Los empleados de seguridad admitieron al fiscal haber visto a los barras merodear el lugar, adentro y afuera del club, pero reconocieron que no hicieron la denuncia policial aunque sí que avisaron a sus superiores, dijeron las fuentes.

Luego, se cree que los barras se dirigieron a los baños que están ubicados en las tribunas populares para la hinchada local y escondieron la pirotecnia en los ductos de aire y cañerías.

Durante los allanamientos realizados ayer y que concluyeron por la noche en las instalaciones del club, el fiscal y sus colaboradores encontraron más bolsas con pirotecnia, de los denominados “tres tiros” en conductos de al menos dos baños.

Ese fue el segundo allanamiento realizado por orden del fiscal en la Bombonera. En un primer procedimiento realizado ayer por la mañana, se hallaron “alrededor de 100 restos de cartuchos de bombas de humo, bombas de estruendo y bengalas”, dijo un vocero judicial.

Por eso, el fiscal López Zavaleta decidió clausurar temporalmente la primera y segunda bandejas de la popular local de la Bombonera, en donde se encendieron las bengalas que produjeron un intenso humo azul y amarillo y que obligaron a la suspensión temporaria del partido, que finalizó 1 a 1.

El partido estuvo suspendido en dos oportunidades. En una de ellas, la parcialidad de Boca encendió bengalas con los colores azul y amarillo y todo tipo de pirotecnia. Además, colgó banderas de un tamaño que superaba los límites de extensión permitido.