Audiencia pública en Santa Fe

Debaten sobre la tarifa de Aguas

Primero fue el turno de los funcionarios que impulsan un aumento tarifario. Sostuvieron que para 2013 se ha previsto cubrir con la actualización la suba de los insumos para producir agua potable.

Luis Rodrigo

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Al cierre de esta edición, comenzaban el turno del primero de los 40 oradores anotados la audiencia pública, que convocó el Enress frente al pedido de aumento de tarifas de agua potable y cloacas.

Con una concurrencia notable, se llevaba a cabo al cierre de esta edición la última de las tres jornadas de la audiencia pública convocada por el Enress para discutir un aumento de las tarifas, tras sendas reuniones en la semana, en Rosario y Rafaela que parecen haber dejado secuelas para la última.

En el interior, el voltaje del debate fue alto y al revisarse los nombres de quienes tenían previsto hablar cabe imaginar lo mismo para la reunión de hoy en la ciudad capital, que coincide con las sesiones de la Asamblea Legislativa (convocada para las 15) y de las Cámaras de Diputados y del Senado provincial, un detalle del que hoy se quejaron entre bambalinas dirigentes de la oposición.

La apertura estuvo a cargo del presidente del Directorio del Ente Regulador de los Servicios Sanitarios, Oscar Pinto, quien explicó las reglas de juego para los participantes que ya habían cumplido con el trámite de inscripción. El titular del Enress recordó lo valioso que resulta para usuarios, funcionarios y otros actores de los sistemas sanitarios la celebración de las audiencias públicas.

Debate

Como es usual, la primera en exponer fue Aguas Santafesinas SA. Alberto Daniele, que deja su cargo al frente de la empresa estatal, eligió usar parte del tiempo de su exposición para responder a las criticas de los diputados de la oposición que aguardaban su turno, en la mitad de la sala Cervantes, en el primer piso de ATE Casa España.

Seguramente hablaba de las declaraciones de la semana de los diputados justicialistas Mario Lacava y Héctor Acuña, que volvieron a hablar con los medios en el ingreso del complejo cultural, quienes han lamentado que los sucesivos aumentos tarifarios de los gobiernos de Hermes Binner y Antonio Bonfatti -desde 2007 en adelante- hayan superado a la inflación (y no hablaban de la que imaginariamente presenta el Indec).

Daniele subrayó que también es “engañoso” razonar en esos términos: comparar evolución de las tarifas y de la inflación real, y recordó que al hacerlo así se parte de una situación de desequilibrio. La relación entre los costos de producción y mantenimiento de los sistemas sanitarios y las facturas que llegan a los usuarios era poco menos que ficticia y no se podía sostener más que con abundantes subsidios estatales, explicó el funcionario saliente, cuya última tarea ha sido presentar el aumento.

Equidad y subsidios

Daniele volvió -como en las otras dos oportunidades anteriores en las que los funcionarios debieron dar explicaciones a los usuarios- a recurrir al criterio de la falta de equidad de los subsidios parciales.

Recordó que Assa cubre solo quince distritos de los 362 que tiene la provincia y que si las tarifas no cubren -al menos- los costos operativos, tal como debe ocurrir con los servicios prestados por las cooperativas, los municipios y las comunas, a la diferencia la paga el conjunto de los santafesinos.

Con el mismo argumento, recordó que el gobierno nacional tiene tarifas congeladas para el agua potable en la ciudad de Buenos Aires y el Conurbano porque el 80% de lo que cuesta mantener su funcionamiento se asume con subsidios nacionales, fondos de todos los argentinos que sólo sirven a porteños y bonaerenses.

Ministerio

Como en Rafaela ayer, y en Rosario el martes, a las audiencias no concurrió el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio. En su lugar lo hizo el secretario de Aguas, Fernando Mussi, quien profundizó las líneas que antes expuso Daniele.

Se apartó del discurso que había preparado para subrayar que en la ciudad del sur se conformó el Foro para el Uso Racional del Agua Potable, formado por intendentes, la empresa proveedora y el ministerio.

Alentó la adopción de medidas no estructurales, porque “creemos que no todo se resuelve con obras”, al recordar los beneficios del uso apropiado de los recursos hídricos que siempre son limitados.

Sumó un informe detallado de las obras del Ministerio para llevar agua a localidades que sufren la ausencia de fuentes aptas de captación. Destacó sobre todo lo hecho para que Tostado no sufra desabastecimiento.

Pidió “no simplificar el debate” al punto de deformar la problemática sanitaria. Y dijo que basta con observar el aumento de los insumos básicos del proceso industrial de potabilización del agua cruda para entender que las tarifas deben actualizarse.

Advirtió que si toda la problemática sanitaria santafesina se reduciría al nivel de la tarifa “estaríamos entonces en una situación ideal”. Y destacó que el problema es que tenemos numerosas localidades que tienen servicios con “costos muy superiores y calidades muy inferiores a las de Assa” o que directamente no tienen agua potable.

Para referirse a los 10 años de privatización usó la palabra “saqueo” y luego “demagogia” para describir el criterio de congelar tarifas en los primeros años de la vuelta del servicio al sector público.

Rafaela pidió la municipalización

• “Nuestra propuesta es que al agua en la ciudad la administremos los rafaelinos”, dijo ayer su intendente, Luis Castellano, en un discurso que sorprendió a los asistentes a la primera audiencia pública convocada por el Enress en La Perla del Oeste.

“Estamos seguros que, en un mediano plazo, vamos a ser más eficientes”, disparó ante las autoridades de Assa.

A esa posición se sumó el diputado provincial Roberto Mirabella (también del PJ), quien advirtió que “comparto la propuesta de municipalización del intendente, y presentaré un proyecto de ley para acompañar esa iniciativa”, dijo.

Castellanos describió a la novedad de las asambleas en el interior como “un quiebre histórico” y reclamó que “no quede en un acto de catarsis, porque es tomarnos el pelo”.

Rafaela necesita un acueducto que aumente la disponibilidad de agua potabilizada y aclaró que lo que su ciudad está dispuesta a hacer se limita a la distribución del agua, no a su transporte desde una fuente de captación apta.

Las aguas subterráneas en el oeste santafesino tienen abundante arsénico lo que crea muy malas condiciones para su potabilización.

“Desde hace mucho tiempo venimos peleando por el acueducto que, en principio, había sido postergado por seis meses cuando entró el gobernador Binner y hoy sabemos que es una obra que va demasiado lenta”, sostuvo.

“Debo repetir que no se ha cumplido con el compromiso de la empresa en la colocación de micromedidores -prosiguió el intendente-, que la planta de ósmosis inversa debería haber estado lista hace más de un año, que la enorme cantidad de pérdidas de agua existente en la ciudad no es subsanada, que no se puede seguir avanzando en un esquema de aumento de tarifas cuando no está discutido globalmente, y la verdad es que son cosas que uno se cansa de decirlas en cada una de las asambleas”, expresó.