Echegaray confirmó que se “fiscaliza” a Lorenzetti y sus hijos

Despunta el conflicto de poderes

El titular de la Afip advirtió que “no corresponde” tratar cuestiones particulares de los contribuyentes. Negó así el pedido del máximo tribunal para “aclarar la situación”.

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Echegaray dijo que el director general de administración de la Corte, Héctor Marchi, “está en una situación fiscal complicada” y se le “detectó que una sociedad había comprado un inmueble en el exterior”. Foto: DyN

 

De la redacción de El Litoral

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DyN/Télam

El fallo que dictaminó la inconstitucionalidad de la elección por voto popular de los miembros del Consejo de la Magistratura desató las reacciones. Aníbal Fernández habló de corte “opositora”, la propia presidenta ironizó con la idea de postularse a jueza, Carlos Kunkel presentó el proyecto para sacarle al tribunal el manejo del presupuesto de la justicia y finalmente el titular de la Afip reconoció que el organismo investiga a Ricardo Lorenzetti y su entorno.

El titular del máximo tribunal se enteró informalmente de las acciones de la Administración Federal de Ingresos Públicos sobre él y sus hijos. Analizó el tema junto a los jueces Elena Highton, Enrique Petracchi, Juan Carlos Maqueda y Carmen Argibay, quienes elevaron un pedido al ente recaudador para “aclarar la situación”.

Echegaray respondió ayer sin eufemismos: “Resulta un abordaje impropio que la Corte Suprema de Justicia de manera institucional” impulse “una audiencia para tratar cuestiones estrictamente particulares del contribuyente y de sus familiares”.

“Eso no corresponde -dijo el funcionario-. Estamos frente a un avance de cuestiones y facultades que la ley le acuerda expresamente a la Afip como organismo ejecutor de la política fiscal.

“Todos los contribuyentes tienen la posibilidad de ir a las áreas de control de la agencia que le corresponde”, sostuvo el funcionario. Es una guerra de sordas versiones: que habría denuncia penal contra Echegaray, cosa que no ha sucedido, y que la Afip investiga a Lorenzetti, cuestión que no está formalmente abierta en la agencia Rafaela de la Afip.

Más allá de los detalles, despunta una disputa institucional de fondo. “La Corte no está dando garantías ni de calidad institucional ni de división de poderes, porque si en la reunión de ministros evaluaron hacerme una denuncia basada en una versión que no comprobaron, qué queda para cuando deban resolver asuntos que son de mucho interés”, ensayó ayer Echegaray.

No es la primera vez que la Casa Rosada hace gala de violación del secreto fiscal tras un disgusto de la voluntad política presidencial. El titular del ente recaudador dio detalles de una empresa de los hijos de Lorenzetti, de un departamento que habita el juez en Puerto Madero.

La Afip le envió a Lorenzetti una carta (entre 500 mil) por la presunción de que era empleador de personal de casas particulares. Y además “fiscaliza” al director general de administración de la Corte y ex socio de Lorenzetti, Héctor Marchi.

¿Quién es Héctor Marchi?

En medio del fuego cruzado

Agencia Rafaela

Que el rafaelino Héctor Marchi esté en “una situación fiscal complicada” -como lo definió Echegaray- sólo alcanzó repercusión en los ambientes “politizados” de la ciudad y en unos pocos espacios de comunicación. Acaso por el bajo perfil que siempre cultivó.

Las charlas de café y los comentarios tras la conferencia del titular de la Afip fueron coincidentes en el sentido de que el “Cabezón” -como lo conocen en su entorno cercano- quedó atrapado en medio del “fuego cruzado” entre el Gobierno nacional y la Corte Suprema. Al contador Marchi no se le conoció militancia activa, incluso tras su ingreso a la administración pública.

Siempre estuvo dedicado a la profesión asesorando a distintas instituciones y empresas; fue en esa actividad en la que coincidió con Ricardo Lorenzetti, que a su vez desempeñaba su labor como abogado.

En 2001, Marchi fue convocado por el intendente Ricardo Peirone, en su segundo mandato, para ocupar la Secretaría de Hacienda. El mismo cargo que ocupó en la provincia, convocado por el gobernador Jorge Obeid.

No extrañó que, una vez designado como presidente del más Alto Tribunal de Justicia, el doctor Lorenzetti consiguiera -ante sus pares- que el millonario presupuesto judicial quedara bajo la responsabilidad de su coterráneo. Al igual que la titularidad del Comité de Inversiones del Poder Judicial de la Corte Suprema de la Nación.

Desde entonces, a Marchi se lo ve por la ciudad los fines de semana, donde comparte el tiempo con su familia y se lo suele ver prendido en algún “picado” de fútbol en la zona de quintas, deporte que abraza con pasión.

No hace ostentación de crecimiento patrimonial alguno que pueda llamar la atención; quienes lo recuerdan de épocas pasadas, guardan la imagen de un contador eficiente, obsesionado por mantener un bajo perfil, que se sigue destacando más por la impresión que dejara como un “áspero” zaguero central (de la primera división del Club Sportivo Norte) que por su exposición pública y política.

Entre la extorsión y la legalidad

Allegados a Ricardo Lorenzetti aclararon ayer que tienen “todo en regla”. Hubo un fuerte rumor en redes sociales -de incierta procedencia- sobre una supuesta cuenta en suiza que el juez niega, aunque reconoce otra en Estados Unidos anterior a su cargo y declarada ante los senadores que analizaron su pliego.

En el entorno del magistrado hablan de “extorsión” y aclaran que Lorenzetti ya no forma parte de una sociedad (Medios) propietaria de una radio, y que el departamento en el que vive (edificio Torres del Dique en Puerto Madero) fue declarado en tiempo y forma desde su compra en diciembre de 2005.

“No tengo ningún problema en ser investigado por la Afip, porque no tengo nada que esconder. Pero el procedimiento debe ser el que marca la ley y los reglamentos, no con un método extorsivo”, habría manifestado Lorenzetti, según revela Joaquín Morales Solá en La Nación.

En el entorno de Héctor Marchi, el administrador general de la Corte, sugirieron que Echegaray “falta a la verdad” cuando dice que no presentó la declaración de Ganancias (lo habría hecho el 27 de junio) y que no fue socio de Ratio, la empresa que compró el departamento de Lorenzetti en Buenos Aires.

El director de la DGI, Ángel Toninelli, habría señalado a Marchi como el emisario de la Corte que expuso la molestia por las investigaciones a Lorenzetti y sus hijos. Del lado de Marchi, argumentan que tomó contacto con Toninelli para averiguar si había espionaje ilegal sobre los jueces.

El dato

Los Rossi y Zaffaroni

Ricardo Echegaray reconoció que el organismo a su cargo está “fiscalizando” al ministro de la Corte Raúl Zaffaroni -el más allegado a la Casa Rosada-; al secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; al ministro de Defensa, Agustín Rossi, y a su hermano Alejandro. También mencionó en la lista de los “verificados” a los senadores oficialistas Marcelo Guinle, Rolando Bermejo y Fabio Biancalani.

La clave

¿Corte paralela?

“Desde la Afip, tenemos que evaluar si hay enemistad manifiesta (de los miembros de la Corte). Si hay que recusar a los jueces, lo haremos, porque incluso la ley nos obliga a eso”, dijo ayer Echegaray. ¿Enemistad sólo con la Afip o con la Casa Rosada? Serían los propios ministros del máximo tribunal los que tendrían que resolver una recusación semejante; sólo si ellos lo conceden, el Poder Ejecutivo podría “contar” con una corte de conjueces para resolver algunos temas decisivos para la estrategia de poder kirchnerista.