Cuento de terror

UNA LECTORA

“Ayer compré un cuento infantil de ‘Alí Babá’, editorial Sigmar, Bs.As., 2011. Grande fue mi sorpresa cuando comienzo a leérselo a mi nena de 5 años y me percato de la violencia con la cual se narra el cuento y de lo horroroso de algunos de sus dibujos. Parecería ser un cuento de terror. Cito textualmente sólo algunos de sus tramos para que comprendan de qué hablo: ‘Al mediodía regresaron los ladrones, vieron a Casim, lo mataron y cortaron su cuerpo en pedazos’, ‘lleno de horror y pena, puso los pedazos en una bolsa y los sacó de allí’, ‘ante la sorpresa del zapatero Margina le dijo que cosiera el cuerpo’, ‘Mustafá, orgulloso, le contó que la noche anterior había cosido un muerto con muy poca luz’... Y así sigue el cuento... Por favor, ¿cómo se puede hacer para sacar esa edición de circulación?”.

Política vs. Código de Publicidad

HUGO LEONARDO TRÉDICI

“Soy un ciudadano que habita en Av. Ángel Vicente Peñaloza. Cada día me desayuno con distintas pegatinas y pasacalles que van apagando el paisaje existente de nuestra avenida. Me dirán ‘es época de elecciones’. Yo pregunto ¿no podremos modernizar el mensaje del candidato y terminar con un sistema que deteriora la imagen de la ciudad? El espíritu de la ordenanza 10.814 referente a la publicidad, en su artículo 1º, tiene que ver con resguardar el ordenamiento físico, la estética y el paisaje de los distintos ámbitos urbanos de la ciudad, preservar los valores culturales e históricos de sus sitios y monumentos patrimoniales, salvaguardada la seguridad y la comodidad de los ciudadanos y sus bienes... Con su aplicación, Santa Fe cambió, se retiraron cientos de carteles de comercios que no se ajustaban a sus disposiciones y hoy la imagen de la ciudad es más linda. Pienso: los candidatos a concejales u otros que renueven su banca, que por supuesto están pensando en mejorar nuestra ciudad, ¿por qué durante cinco meses aproximados y cada dos años se encargan de lo contrario? Quiero aclarar que no estoy en contra de los partidos políticos ni de sus candidatos, sino que estoy a favor del espíritu de la ordenanza y de la belleza de mi avenida Peñaloza”.

Trapitos

JORGE DE Bº SUR

“En sintonía con otras notas escritas al buzón, donde hacen referencia a los trapitos, me gustaría señalar especialmente la situación que se vive en el estacionamiento del Centro Cívico. Allí, los trapitos cobran entre 100 y 200 pesos mensuales a los empleados provinciales que dejan sus autos ahí y cuando no reciben el dinero que exigen, se dedican a rayar los coches, pinchar las cubiertas, arrancar los logos de las marcas y demás. Considero que la provincia debería destinar un policía de los que están en el interior del Centro Cívico para que controle de manera permanente el predio de 7 a 18 hs. por lo menos, de modo que los empleados puedan estacionan sus autos ahí sin ser extorsionados por estos personajes”.