Buenos Aires

Hallan en un pozo ciego a una mujer que estaba desaparecida

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El horroroso hallazgo fue producto de las sospechas de uno de los hermanos de la víctima. Foto: Archivo

 

Télam

Los restos óseos de una mujer que estaba desaparecida hace un mes fueron hallados ayer enterrados en un pozo ciego de su casa de la localidad bonaerense de Villa Luzuriaga y el principal sospechoso del crimen es uno de sus hermanos, informaron fuentes policiales y judiciales.

El hallazgo se produjo en una vivienda situada en Atenas 195 del barrio Los Pinos de esa localidad del partido de La Matanza y la víctima fue identificada como Beatriz Morales (45), vista por última vez a comienzos de junio.

Efectivos de la seccional de la zona concurrieron esta tarde a la vivienda tras el llamado de otro hermano de la mujer, que denunció que había visto cabellos y una mano a través de una abertura del pozo ciego de la vivienda.

Personal de la Policía Científica y bomberos comenzaron a trabajar en el lugar y hallaron restos óseos con muy poca piel, por lo que estimaron, en principio, que la data de muerte es de unos 30 días, aunque habrá que esperar la realización de la autopsia. Un investigador explicó a Télam que un pozo de este tipo degrada cualquier cuerpo humano rápidamente y por eso del cadáver sólo quedaban restos mínimos.

Las sospechas

No obstante, los pesquisas descontaban que se trataba de la mujer desaparecida, cuyo hermano, Ariel Alejandro Morales (40), había denunciado su desaparición el 12 de junio pasado en la seccional de Los Pinos y ahora tiene pedido de captura por el homicidio.

Otro hermano de la víctima comenzó a sospechar de éste y por eso esta tarde concurrió a la casa, pero el hombre había desaparecido de la vivienda y descubrió los restos de Beatriz, tras lo cual llamó al 911.

“Betty era una persona alegre, siempre la veía cuando pasaba a comprar y estaba sentada en la puerta. Era discapacitada mental, pero se podía mover por sus medios”, contó al canal TN una vecina que se identificó como Flavia.

La joven dijo que la mujer charlaba con la gente, los saludaba y la noticia de que habría sido asesinada y enterrada en el fondo de la casa por su hermano tiene “conmovido” al barrio.

“El era el único que vivía con ella porque el año pasado el padre falleció, así que ellos dos estaban a cargo de la casa. Obviamente al tener ella un retraso, del único que se puede sospechar es de él”, opinó la joven. Agregó que el hermano, al que conoce como Pío, tenía un taller de chapa y pintura y “no se hablaba bien de él en el barrio, porque tenía problemas con los clientes”, en general porque no terminaba los trabajos o por dinero.

Flavia dijo que hace un mes que dejaron de ver a Beatriz y que recién tuvieron novedades esta tarde, cuando la policía cortó la calle para comenzar a trabajar en la vivienda.

La causa es investigada por los fiscales José Luis Marotto y Catalina Baños, de La Matanza.