Contingencia inesperada
Una depresión dejó sin candidato a la derecha chilena
- Pablo Longueira renunció a la postulación luego de que le fuera diagnosticada la enfermedad, mientras estaba de vacaciones. Sorpresa y estupor en el oficialismo. Solidaridad desde la oposición.
El oficialismo chileno busca reemplazante para Pablo Longueira, que declinó la candidatura por razones de salud.
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El líder oficialista chileno Pablo Longueira retiró su candidatura presidencial debido a un cuadro de depresión, informó su familia. “Nuestro padre se encuentra enfermo. Con posterioridad al triunfo de la elección primaria de la Alianza, durante unos días de descanso, su salud se fue deteriorando”, afirmó su hijo Juan Pablo Longueira.
En una primera reacción, el gobierno llamó a su sector a levantar cabeza. “Vamos a gobernar hasta el último día y la Alianza se pondrá de pie”, arengó la vocera del Ejecutivo, la ministra Cecilia Pérez desde el Senado.
Posteriormente, llamó al oficialismo a actuar con grandeza y generosidad. “Ésa es la única manera en que podremos enfrentar los desafíos de las elecciones presidencial y parlamentaria”, dijo.
Pablo Zalaquett, amigo por años de Longueira y candidato a senador, reveló emocionado que desde hace 17 días Longueira estaba mal y que los médicos le explicaron que era una depresión inhabilitante. Por su parte, el jefe de campaña de Longueira, el ex ministro Joaquín Lavín, definió los hechos como “especialmente tristes”.
“(Longueira) se va a recuperar, pero para eso necesita tiempo y tranquilidad. Queremos decirle a Pablo, a Chichi (su esposa, Cecilia Brinkmann) y a sus hijos que apreciamos todo su esfuerzo”, afirmó Lavín. “Esto es un tsunami, un terremoto, si no nos unimos nos va a arrasar la oposición en las elecciones”, resumió ante el golpe el vicepresidente de Renovación Nacional, el alcalde José Ossandón.
La postulante presidencial opositora, la socialista Michelle Bachelet, amplia favorita para las presidenciales, expresó su “solidaridad a Pablo Longueira y su familia”. Bachelet, emocionada y vestida de negro, expresó además su deseo de que Longueira “pueda continuar con su pasión de siempre, el servicio público”.
Longueira, líder histórico de la conservadora Unión Demócrata Independiente (UDI), fue elegido como candidato del oficialismo en las elecciones primarias del 30 de junio, tras dos meses de campaña.
Desde la oposición, el senador demócrata cristiano Andrés Zaldívar expresó su apoyo a Longueira y sostuvo que es la Alianza la que debe resolver qué hará para elegir su abanderado.
La ley establece que los partidos del gobierno, la UDI y Renovación Nacional, quedan libres para nominar su o sus candidatos presidenciales de la forma que prefieran.
Los comicios presidenciales y legislativos de noviembre, que encuentran al gobierno con un apoyo de un 30 por ciento, tienen como favorita a la líder socialista opositora, Michelle Bachelet.
La familia de Longueira enfrenta además el cáncer de uno de sus hijos adolescentes, por lo que líderes políticos de distintos sectores expresaron su apoyo a la familia. El sorpresivo hecho humano y político abre una impensada negociación en el oficialismo, enfrentado a una de sus peores escenarios electorales en décadas.
