En Rosario

Una mirada sobre el hábitat y las ciudades

En el seminario “Hábitat y calidad social”, el experto brasileño Rodolfo Ramirez Soto explicó cómo se llegó a la urbanización de las favelas. Dijo que no hay que apuntar a la autoconstrucción sino a la autogestión de los vecinos.

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Especialistas internacionales se dieron cita en el seminario, que fue abierto esta mañana por el gobernador Antonio Bonfatti. Foto: Gobierno de la provincia

 

De la redacción de El Litoral

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Corresponsalía Rosario

El gobernador Antonio Bonfatti y el secretario de Hábitat Gustavo Leone inauguraron hoy a la mañana el seminario Hábitat y Calidad Social, que se lleva adelante en Rosario, donde se pondrá eje en el debate en torno a la problemática del acceso al suelo, el derecho a la vivienda y las herramientas de política habitacional con las que cuentan los distintos niveles de Estado.

Cuando se presentó este evento, Leone enfatizó que “la propuesta de este gobierno es la de transitar un nuevo paradigma que implica gestionar la política de hábitat de manera integral y coordinada con actores públicos y privados, promover el esfuerzo compartido y la participación de todos los sectores”.

“Este nuevo paradigma no contempla las viviendas construidas sólo en términos cuantitativos, sino que pone su esfuerzo en promover la planificación urbana y territorial sostenida, concentrando sus esfuerzos en un rápido y franco acceso a suelo urbanizado con servicios e infraestructuras por parte de sectores que hoy carecen de tierra y vivienda”, agregó.

Luego de la inauguración formal del seminario, de cuya organización también participa el Lincoln Institute of Land Policy (Cambridge, Estados Unidos), una de las ponencias más importantes fue la de Rodolfo Ramirez Soto, secretario de Articulación Internacional del gobierno de Pernambuco Brasil. El tema abordado por este experto fue el de las “Herramientas para una gestión de hábitat y vivienda”.

Casos

Ramirez Soto hizo un relato con varios ejemplos de gestión de la comunidad en la construcción de viviendas en distintos lugares de Brasil. Dijo que los programas estatales “no deben promover la autoconstrucción de casas sino la autogestión de sus viviendas, algo que es diferente”. Porque, según el brasileño, “los ciudadanos no deben participar de las decisiones de forma periférica sino que deben tener una injerencia determinante en la gestión”.

Ramirez Soto contó el caso de Recife, en el norte de Brasil, donde a partir de los años ‘70 durante la dictadura militar se promovió un plan de “erradicación de las favelas”. “No había una

justificación para eliminar las favelas por lo que el plan diseñado por los militares se centró en una cuestión puramente legal. Las favelas había que erradicarlas porque no cumplían las normas de urbanidad”, reseñó el investigador.

Una década después, explicó el brasileño, se empezó a agitar el proyecto Hermosinha, que era una de las favelas más importantes de esa zona de Recifes, y estaba ubicada en un lugar privilegiado, con vista al mar, y al lado de uno de los barrios residenciales más importantes de esa ciudad.

“Surgió un proyecto basado fundamentalmente en la especulación inmobiliaria, que lo impulsaron fundamentalmente los habitantes del barrio más rico de la ciudad”, dijo Ramirez Soto, quien graficó cuál era el proyecto: “Querían hacer en ese lugar, donde había una favela, una pequeña Miami Beach”.

Luego de que fracasaran estos intentos, el especialista afirmó que se dio paso a un plan mucho más integral, que incluía la opinión de los ciudadanos y fundamentalmente de la gente que vivía en ese lugar.

“Se creó a nivel institucional en esa favela lo que se llamó zona especial de interés social”, y nunca más en Brasil se intentó erradicar este tipo de asentamientos de la manera en la que se había pensado en los años 70”, apuntó Ramirez Soto, quien advirtió que ahora se habla de “urbanización

de las favelas”. Hoy están catalogados bajo esa denominación 27 asentamientos.

Viviendas para ciudadanos

Ramirez Soto opinó en el marco de su disertación que “no hay que construir

viviendas para pobres”, con la visión de que la gente de menos recursos, que no tiene un techo, “se conforma con cualquier cosa”.

“Ésa era la idea que imperaba antes y que ahora fue rebatida por otra. Hay que producir viviendas para seres humanos y ciudades para ciudadanos”, dijo.

Sorteo de lotes “Mi Tierra, Mi Casa”

  • El gobierno provincial sorteará en octubre los primeros lotes en el Parque Habitacional Ibarlucea, uno de los emprendimientos desarrollados en el marco del programa “Mi Tierra, Mi Casa” para Rosario.

Según informó el secretario de Estado del Hábitat, Gustavo Leone, la idea de la Casa Gris es realizar el sorteo la primera semana del mes próximo. “Vamos a hacerlo en la sede de la Lotería de la provincia, en la ciudad de Santa Fe, pero como siempre lo vamos a transmitir en vivo a través del sitio web oficial del gobierno para que todos los interesados puedan seguir las alternativas”,

precisó.

“Tal como lo planteó el gobernador Antonio Bonfatti al inicio de su gestión, desde el gobierno provincial estamos garantizando el acceso al suelo urbanizado a precios accesibles, para sectores que hoy no encuentran una solución a su problema habitacional”, expresó Leone.

Serán los primeros 300 lotes del Parque Habitacional Ibarlucea (están previstos más de mil) los que se pondrán en juego. Participarán del sorteo unas 8.500 personas que forman parte del padrón de inscriptos de la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo. Muchos de ellos realizaron el trámite entre noviembre y diciembre de 2012, cuando se puso en marcha un operativo especial en el Patio de la Madera.

“Seguimos generando soluciones habitacionales en un contexto donde al común de la población se le hace muy dificultoso acceder al techo propio. Hoy, ni el mercado inmobiliario ni los bancos están dando posibilidades ciertas de acceso al suelo o vivienda. Claramente esta política de Estado que definió Santa Fe va por un buen camino”, reflexionó el funcionario.