Crimen en la Recoleta

Recuperó la libertad el dueño del bar Fiji

  • Está acusado por encubrimiento agravado, por el homicidio de Walter González Montaner y por las lesiones graves sufridas por su compañero.
 

De la Redacción de El Litoral

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Mientras la Policía local busca pistas sobre el autor de los disparos que terminaron con la vida de Walter González Montaner e hirieron gravemente a su amigo Fabricio Alarcón, la Justicia liberó ayer al dueño del bar Fiji, hasta entonces único detenido en el marco de la causa.

Así lo confirmó el abogado Luis Hilbert (hijo), tras plantear la excarcelación ante el Juzgado de Instrucción Séptima, de Diego Andrés de la Torre. El profesional acompañó ayer en tribunales a Luciano D., de 32 años, quien desde hace 4 ó 5 meses se encuentra al frente del comercio que lleva el nombre de fantasía de Fiji Bar.

“El padre nos designó a nosotros como abogados defensores” tras enterarse de la noticia de que su hijo había quedado preso en el marco de un crimen ocurrido la mañana del domingo. El muchacho está acusado por el presunto delito de “encubrimiento agravado”, no obstante le concedieron la libertad.

El lunes a la noche, el juez De la Torre convocó al dueño del local para realizar una inspección ocular en el bar que está en la ochava noreste de 25 de Mayo y Santiago del Estero, en la Recoleta santafesina.

El propietario, que llegó por sus propios medios, abrió la puerta del bar e ingresó con las autoridades. Hasta que en un determinado momento “el juez interpretó que no le estaba contando todo lo que sabía”, explicó Hilbert. “Se quedaba callado, no le decía nada o todo a medias y cortado, entonces quedó arrestado en Jefatura, en la Sección Homicidios”, hasta el día siguiente.

“El juez interpretó que estaba cometiendo el delito de encubrimiento porque no decía quiénes eran los autores”, expresó la defensa, que ni bien tomó contacto con la causa presentó un escrito requiriendo la excarcelación.

Las víctimas estaban dentro del bar la mañana del domingo. Se cree que participaron de una discusión con otro grupo de personas y que se habrían tomado a golpes previo a que se oyeran dos certeros disparos. Walter González Montaner fue herido en el pecho, mientras que Alarcón recibió un impacto de bala en el estómago. El primero fue trasladado en un auto particular, que sufrió un accidente camino al hospital Iturraspe y murió esa misma tarde a pesar de los esfuerzos médicos. Su compañero en cambio quedó herido en el lugar, desde donde fue retirado por una unidad de emergencias del Sies 107 y se recupera en el hospital Cullen.

Hasta el momento no hay detenidos y al menos dos personas vinculadas con el mundo de las barras bravas estarían siendo buscadas por la Justicia local. Mientras tanto, los investigadores convocan a aquellos testigos que puedan aportar datos aún más certeros de lo acontecido aquella mañana.