Ayer por la tarde
Detuvieron en la “isla del tesoro” al otro asaltante de la mutual
Tiene 44 años y es paraguayo. Estaba oculto en matorrales del mismo islote, en donde momentos antes había sido desenterrado el cuantioso botín del robo a la entidad en San Javier. Su cómplice ya estaba en prisión.
El delincuente trató de huir y esconderse, pero no opuso resistencia al verse rodeado por efectivos de la Guardia Rural Los Pumas y de otras secciones de la Unidad Regional XIV.
Joaquín Fidalgo
Los policías siguieron las instrucciones de uno de los delincuentes. Partieron del puesto islero en donde los ladrones habían buscado refugio y caminaron 70 pasos largos hacia el sur. Justo allí, enterrado, encontraron el “tesoro”. No estaba en un pesado cofre de madera, sino en una liviana conservadora de telgopor. No se trataba de monedas de oro y plata, sino de billetes: 238.580 pesos en efectivo, casi la totalidad de lo robado en la sede que la Mutual Belgrano tiene en la ciudad de San Javier. Sólo faltaban unos 500 pesos, que los malvivientes habían gastado en provisiones: un poco de combustible, un poco de comida y mucha bebida (whisky, vino, aperitivo, fernet y coca).
El asalto, ya esclarecido, ocurrió en horas de la siesta del sábado. Dos sujetos armados, disfrazados con ropa de trabajo (fajina), gorros y tal vez también pelucas, maniataron al gerente y a un empleado de la Mutual y se llevaron toda la recaudación.
Rápidamente se puso en marcha un operativo cerrojo en toda la zona para bloquear cualquier ruta de escape, pero los investigadores de la Unidad Regional XIV, con el mismo jefe a la cabeza, el comisario mayor Luis Gola, pudieron determinar que los asaltantes estaban “aguantándose” en la zona de islas ubicadas al este de la ciudad.
No debieron esperar mucho. El martes, uno de los sospechosos fue apresado cuando apareció a bordo del Peugeot 405 de vidrios polarizados con el que se habría cometido el atraco. Es un joven de 23 años, soltero, nacido en San Javier pero domiciliado en Buenos Aires.
El operativo de búsqueda en zona de islas requirió del uso de lanchas, vehículos todoterreno y caballos.
Fotos: Corresponsalía San Javier
En contados minutos, este muchacho confesó haber participado del golpe y guió a los investigadores hasta un islote ubicado a pocos kilómetros al este de la ciudad.
Allí, en un puesto, estaba el cómplice, que alcanzó a huir antes de la llegada de los policías. Los uniformados alcanzaron a ver cómo este sujeto se perdía entre los matorrales. “Ahí lo perdimos, porque este hombre estaba armado y no quisimos poner en peligro la vida del puestero que no tenía idea de lo que habían hecho sus ocasionales compañeros”, explicó Gola en esa oportunidad.
El arrestado también indicó a las autoridades dónde habían ocultado el dinero, bajo tierra, unos 70 metros al sur de ese puesto.
El último capítulo del caso se escribió ayer. Aproximadamente a las 16, en un sitio ubicado entre los arroyos El Revólver y Las Banderas, una patrulla de la Sección 14a. de la Guardia Rural Los Pumas se topó con el prófugo. Éste trató de esconderse nuevamente en el paisaje frondoso de la misma isla en la que fue encontrado el botín, pero ahora estaba acorralado y terminó esposado sin oponer resistencia. El arma de fuego todavía no fue hallada.
Se trata de un hombre de 44 años, de nacionalidad paraguaya y con domicilio en el partido bonaerense de Moreno.
Los dos arrestados permanecen alojados en la Alcaidía de la UR XIV, incomunicados, a disposición de la Justicia de Instrucción.
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