Un cafecito con Gerardo Martino en Barcelona
Este “Míster” de Barcelona que sigue siendo el humilde “Tata”
- No cambió en nada, no lo mareó el éxito y recibió a El Litoral con ese perfil bajo que le conocimos en Santa Fe cuando dirigió a Colón. Un montón de recuerdos de alguien que dejó su sello en la ciudad.
El Tata Martino conversa con El Litoral en Barcelona. Messi lo elogió hace unos días, tanto como entrenador como persona.
Darío Pignata
(Enviado Especial a Barcelona, España)
“Es que a éste tío no lo conocíamos, cuando Zubi (por Zubizarreta, ex arquero y ahoran director deportivo del “Barsa”) lo fue a buscar a la Argentina. Parece que los jugadores lo quieren”, dice un taxista, el primero en llevarnos desde el aeropuerto El Prat hasta el centro de la ciudad.
Gracias a la colaboración del colega Mario Demonte, que está en contacto permanente con el “Tata”, acordamos encontrarnos con Martino. La casualidad hizo que fuera el mismo día de su cumpleaños 51 y justamente el día que Lionel Messi recibió por tercera vez consecutiva su Botín de Oro.
Antes, el mismo “Tata” rompió filas en el ingreso a la vieja cervecería Estrella Dann de Barcelona para saludar a este enviado de El Litoral y a Carlos Fertonani (Santa Fe Producciones) que de entrada le dijo algo que varios piensan en Santa Fe: “Cómo te extrañamos, Tata”.
No son horas fáciles para Martino. Con Messi lesionado hasta el año que viene debe seguir el rumbo, en medio de un club donde los opositores políticos al presidente aprovechan para criticar la gestión “pegándole” a Martino por la forma que juega el equipo: “Ya no construímos paredes, ahora tiramos centros”, argumentan. Como si tirar centros fuera un pecado imperdonable.
La mayoría de los hinchas de Barcelona encuestados por El Litoral, casi todos taxistas, coinciden en los tres puntos más importantes, respecto al “Tata” Gerardo Martino:
1) Ellos, los hinchas, tenían poca referencia en España quién era Martino.
2) Todos admiten que el vestuario del Barcelona no es un vestuario de los más fáciles justamente.
3) De todos modos está claro que los jugadores lo bancan, incluso salieron algunos a decirlo públicamente en los medios de prensa, como para terminar la discusión.
El “Tata” tiene un contacto fluido con Horacio Darrás, ex presidente de Colón, que fue quien lo contrató en su momento para llevarlo a Santa Fe. Incluso, hace algunos días el que lo visitó fue Eduardo “Lalo” Vega, médico del plantel profesional de Colón, que construyó con el “Tata” una excelente relación. “Ni hablamos de fútbol, además el Lalo se la pasó comiendo”, ironiza el ex DT rojinegro por duplicado (Colón y Newell's).
“Darío, tengo media hora antes de entrenar, vamos tomar un café”, me recibe el “Tata” cuando calienta por fin el sol en Barcelona en el mediodía. El lugar de encuentro es el lujoso hotel Princesa Sofía, donde tiene sus oficinas Jorge, el padre de Lionel Messi, con quien nos cruzamos en el lobby cuando nos despedimos del “Tata”.
De los tres santafesinos que me acompañan, dos de ellos —Carlos Fertonani y Alberto Malqui—, son fanáticos de Colón y quedan asombrados por su humildad. El otro, Santiago Amézaga, es de Unión y oficia de fotógrafo (nuevo rubro de AB Sonido); también queda impactado con la sencillez de Martino.
Pasaron casi ocho años y medio. El Tata llegó a Santa Fe en 2005, luego del alejamiento de Juanchi Pizzi tras dirigir tres partidos en la primera de Colón. Martino dirige al Barcelona y Pizzi tiene muchas chances de ser el nuevo campeón del fútbol argentino. Foto: Flavio Raina
Son ellos los que comparten la anécdota de aquél equipo de Colón y de su decisión de irse cuando todos (jugadores, dirigentes e hinchas) querían que siguiera en Santa Fe dirigiendo ese equipo.
“¿Cuándo se van para Roma? Los invito mañana para ver el entrenamiento del Barcelona, que practicamos por la mañana. Yo dejo dicho en la entrada de La Macía que van de parte mía”. Esa gentileza del “Tata” es apasionante: Neymar, Puyol, Xavi, Mascherano, Alexis, Iniesta y el resto haciendo un “picadito” a un toque. Verlos entrenar es tan delicioso como verlos jugar.
Cuando nos presentamos en La Macía, los guardias de seguridad del Barcelona buscan detenidamente en la lista de invitados. “Ellos son del Diario El Litoral de Santa Fe y están invitados por el Míster”. Así lo llaman ellos a Martino, como antes lo llamaban a Pep Guardiola y a Tito Vilanova.
Ese “Míster” que hoy dirige al equipo más mirado del mundo que es el Barcelona no cambió en nada del que conocimos en Santa Fe dirigiendo a Colón. Ese “Míster” que está sentado en el banquillo más caro del Planeta Fútbol sigue siendo el mismo “Tata” de perfil bajo y humilde que llegó a Colón. Ojalá nunca cambie.
En cifras
160.000 socios
- Son los que tiene el Barcelona en este momento, de los cuales apenas 100.000 pueden acceder al Nou Camp para ver los partidos del equipo de Gerardo Martino. El resto de los socios “no tiene asiento”, por lo que deben seguir los partidos por TV. Si tomamos la población de Barcelona, el 10 por ciento de los catalanesn son socios del equipo donde juega Messi y dirige el “Tata”.
De Menotti a Bilardo
- A la hora de buscar similitudes en el banco de Barcelona, hay que decir que hace 20 años llegaba al banquillo de DT que también era rosarino: el “Flaco” César Luis Menotti, que dirigió desde 1982/1983 hasta 1984 y consiguió tres títulos en una época complicada.
Después de Menotti, desfilaron como entrenadores: Venables, Aragonés, Cruyff, Robson, Van Gaal, Serra Ferrer, Rexach, Antic, Rijkaard, Guardiola, Vilanova y ahora el “Tata” Gerardo Martino. Hasta ahora, el ex DT de Colón, sumó un título como responsable del Barcelona.
Desde aquel 2005
El recuerdo de Colón
El Tata Martino en Barcelona, posando con la camiseta de Colón y dos fanáticos sabaleros de Santa Fe: Carlos Fertonani y Alberto Malqui.
No podía pasar por alto el tema Colón en la charla con el “Tata” Martino. Y si bien el entrenador del Barcelona no puede hacer declaraciones oficiales, está al tanto de todo lo que pasó en los últimos tiempos en la entidad sabalera con sus problemas deportivos, económicos e institucionales.
Los santafesinos sabaleros (Fertonani y Malqui) advirtieron que Martino estaba informado de lo que estaba pasando en ese momento, ya que la charla en Barcelona fue el mismo día que no se jugó el partido con Rafaela en Santa Fe.
Hay que recordar que el “Tata” Gerardo Martino fue entrenador del plantel profesional de Colón a mediados del 2005 cuando el presidente sabalero era Horacio Darrás.
análisis
por Oscar Campillo (x)
El vestuario le responde
Oscar Campillo, director de Marca, en diálogo con El Litoral
Primero, felicito el esfuerzo que este diario sea el único de Argentina que llegó a Barcelona para cubrir la entrega del tercer Botín de Oro a Lionel Messi, algo que no había conseguido ningún futbolista hasta ahora en toda la historia.
Me preguntan por Martino, ustedes. Y es cierto que la aficción del Barcelona no tenía referencias de quién era y cuáles eran sus logros como entrenador. Acá estamos hablando que le toca dirigir al equipo después de haber ganado todo, con una receta que algunos de los mismos jugadores decían que se empezaba a transformar en previsible.
Es casi natural que después de 14 títulos con Pep Guardiola y 1 más con Tito Vilanova, la gente le exiga resultados. Me transmite seguridad y confianza el trabajo de Gerardo Martino.
Y lo más importante: el vestuario le responde. A los jugadores les cayó muy bien su forma de ser, cómo se maneja, cómo los habla, cómo toma las decisiones. En este tipo de planteles donde relucen las estrellas, tener alineado el vestuario no es poca cosa.
Todo lo que no le pasó a Pep y Tito, le está pasando al Tata: las lesiones están persiguiendo como nunca al Barsa, por lo que debe pasar el temporal tratando de mojarse lo menos posible. Terminar bien este 2013, recuperar sin fallas a Messi y arrancar con todo el 2014.
A mí, en lo personal, me pasa lo mismo que a los jugadores: Martino me cayó muy bien. Es una persona respetuosa como pocos en este ambiente del fútbol. Barcelona no es fácil, no lo fue para Pep en su arranque de ciclo en 2008, menos para Tito con todo lo que le pasó.
Insisto en la idea, que va más allá de los jugadores argentinos: el vestuario está feliz con tener a Martino. Y esto, que es clave en cualquier club, vale doble en el Barsa.
(x) Director Diario Marca
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