Austria
Tranquilidad por 45 dólares más propina
Retiro espiritual, paréntesis en una ciudad tan ruidosa como Nueva York, curso acelerado de mímica o manera de explorar la relación entre el hombre y el alimento. El restaurante “Eat” ha triunfado con una novedosa propuesta dominical: una cena silente.
Para su dueño, comer “tiene que ver con la relación de nosotros mismos con lo otro. Metemos algo externo en el interior de nuestro cuerpo. Eso es siempre un compromiso profundo”. Foto: Agencia EFE