Inédita innovación digital de un joven de la ciudad

Freud en clave tecno: un santafesino creó una app que “captura” sueños

Es una aplicación para dispositivos móviles que permite registrar en audio o texto las imágenes oníricas, almacenarlas y compartirlas en una red social. La información sobre lo que dicen los sueños podría servir en terapia o psicoanálisis.

A_FR_DSC_1486.jpg

El recolector de sueños. Daniel Romano creó una red social donde los usuarios comparten lo que sueñan. Y es santafesino. Foto: Flavio Raina

 

Luciano Andreychuk

[email protected]

Ni en un millón de años se hubiese imaginado Sigmund Freud al escribir “La interpretación de los sueños”, en 1899, que más de un siglo después, a un joven santafesino de apenas 32 años se le ocurriría crear una aplicación para dispositivos móviles adonde se pueden registrar manifestaciones oníricas, grabarlas o escribirlas, almacenarlas y compartirlas con miles de usuarios en una red social. Y que esa información psíquica, en un tiempo transcurrido, podría ser de ayuda para un psicólogo o un psicoanalista, en el caso de que el usuario de la aplicación necesite hacer terapia. La cosa es así: usted está durmiendo -de noche o a la siesta- y de repente un sueño lo despierta. Como hacían los viejos escritores franceses de fines del siglo XIX -que tenían sobre la mesita de luz, además de opio, un cuaderno para anotar lo que soñaban-, ahora usted tiene su smartphone o I Pod. En su dispositivo móvil graba un audio contando su sueño, o si quiere lo escribe. Sigue durmiendo. Más tarde podrá compartir ese sueño con otros miles de usuarios.

Ésta es la propuesta de IceDreamApp, una red social de sueños, literalmente. Es como Facebook o Twitter, pero con sueños. Y fue creada por Daniel Galán Romano, un santafesino diseñador gráfico y web egresado en 2003 de la UNL. La red está pensada sólo para dispositivos Apple (en Argentina aún no tiene mercado). El gran desafío para este año es habilitar la red social para el sistema operativo Android, uno de los más populares, y así abrir el juego aquí y en todo el mundo. Hace menos de un año que IceDreamApp fue lanzada, ya tuvo 11 mil descargas y cuenta con 3.500 usuarios activos de EE.UU., Israel y algunos países de Latinoamérica.

Soñar no cuesta nada

“El proyecto tiene casi un año y medio de desarrollo, y sigue desarrollándose. Ya en mayo pasado se podía descargar gratuitamente desde una App Store (tienda virtual). Cada usuario crea su perfil, sigue y es seguido por otros usuarios. La aplicación permite ‘colgar’ sueños en la red, darles likes (Me gusta), compartirlos, almacenarlos en un calendario. Se busca una aplicación simple, que demande la menor cantidad de tiempo para el usuario y la mayor interacción”, cuenta Romano a El Litoral.

La aplicación permite registrar cuál fue el sueño, con quién se soñó, y compartirlo. Más adelante, el sistema podría definir cómo era la situación emocional en el momento del sueño (si se sintió miedo, bienestar, alegría, ansiedad, etc.); si hubo algún episodio irregular antes del sueño, y otros datos que puedan tener alguna relación con los sueños. Y también podrá dar estadísticas: cuántas pesadillas se soñaron durante un período de tiempo determinado, o cuántos sueños felices se disfrutaron, o en qué período no se soñó nada, etc.

“Todo está en desarrollo. Actualmente estoy trabajando con programadores de Rosario. Tengo tres modelos de negocios: uno, por ejemplo, es la venta de información a empresas para saber qué sueña la gente como herramienta para posicionar un producto en el mercado. Es un trabajo que llevará su tiempo y demandará una inversión que estoy buscando, pero la plataforma está armada y el esquema es rentable”, asegura el joven, que en forma autodidacta aprendió los secretos del marketing empresarial.

Para el diván

El usuario de la red social hoy puede cotejar sus sueños con los de otros y recibir sugerencias sobre su sueño. Más adelante podría interpretar el contexto y la circunstancia en que fue concebido ese sueño, si hay algún conflicto interno, las tentativas de su subconciente o los “incumplimientos de sus deseos”, como diría el padre del psicoanálisis. Para ello, podría llevar todo ese registro psíquico a su terapeuta o psicoanalista.

“Un ejemplo: te mudás a vivir a Europa. Llegás y no te adaptás, no dormís bien, soñás cosas feas o particulares. Si se cargan los datos de los sueños, el sistema puede recordarte en un calendario qué soñaste, con quién y cuántas pesadillas tuviste en ese proceso de cambio, o cuántos días no soñaste. Supongamos que ese cambio personal y emocional te lleva a requerir la ayuda de un profesional de la salud mental. Esa información podría servir así en un proceso de terapia o de psicoanálisis para superar ese conflicto. Lo mismo que con una separación amorosa, etc.”, puso como caso hipotético Romano. La tecnología no tiene techo.

Un maestro de música que se convirtió en diseñador web

Daniel Romano tiene 32, se crió en barrio Centro y egresó de la UNL como diseñador gráfico. También es maestro de música, pero dejó los acordes y pentagramas por la programación. “Yo quería crear algo útil para la gente dentro del entorno virtual. Una noche me levanté exaltado por una pesadilla. Me acordé de un programa de TV que vi cuando niño, donde se resolvía el problema de una máquina gracias a un sueño. Ahí se me encendió la lamparita. ¿Por qué no usar los sueños llevándolos al espacio digital, que es dinámico e interactivo?”, cuenta el joven.

Al principio, Romano trabajó free lance en fundaciones y en proyectos de extensión de la universidad. “Seguí como autodidacta sobre el universo de la programación y diseño web, que me interesaba cada vez más. Pero no surgían oportunidades. Decidí irme a Buenos Aires, sólo con una mochilita. Ahí me relacioné con gente del palo... Hasta que surgió la posibilidad de irme a Israel en 2012 por un programa para emprendedores. Allí le di forma a la idea de esta red y la impulsamos con Aaron Sternlicht (quien fuera inicialmente su inversor)”. Ese fue el inicio de todo.

2_ICECREAMAPP001.jpg

Usos. En la captura, se muestra cómo la red social permite a sus usuarios compartir interactivamente sus sueños, hablar de ellos, hacer sugerencias, entre otras funciones. Foto: Gentileza D. Romano

+ información

Contacto para interesados

[email protected]