Para lucirse en vacaciones

Para los que gustan de dedicarse a la cocina, una de las cosas lindas de las vacaciones -pese al calor y a los mosquitos- es dedicarse a preparar comidas ricas. Por eso, nuestro chef presenta un buen plato con un riquísimo postre para agasajar a la familia durante el fin de semana.

Por Pedro Elías.

CARRÉ DE CERDO EN HOJALDRE

Precalentar el horno a 200ºC. Pelar dos manzanas ácidas, despepitarlas y cortarlas en láminas. Pelar y cortar dos cebollas en aros finos. Salar un carré de cerdo de 750 gr. y espolvorearlo con hierbas aromáticas. Rociar con un poco de aceite por encima. Disponer las manzanas y cebollas cortadas en una fuente que vaya al horno. Poner el carré en medio y dejar cocer durante 35 minutos.

Mientras, pelar y despepitar otras dos manzanas ácidas y cortarlas en laminas muy finas. Laminar también muy finamente otras dos cebollas. Batir un huevo con dos cucharaditas de agua. Disponer las manzanas y cebollas crudas sobre un disco de masa de hojaldre.

Sacar el carré del horno y ponerlo encima de la preparación anterior. Humedecer con agua los bordes del hojaldre y cerrarlo herméticamente sobre la carne, las manzanas y las cebollas crudas.

Cortar otro disco en laminas de unos 5 cm. de largo para decorar. Humedecerlas y disponerlas cruzadas sobre el envuelto. Pintar con huevo batido con un pincel.

Cocer a horno bajo (180ºC) hasta que la pasta esté dorada, aproximadamente de 15 a 20 minutos. Servir con el resto de cebollas y manzanas reservadas calientes.

TARTA DE CHOCOLATE EN MASA CROCANTE

Para preparar la masa, disponer 60 gr. de azúcar y 175 gr. de almendras blanqueadas en la procesadora y triturar bien. Otra opción consiste en moler sólo las almendras en un rallador de queso y luego incorporar el azúcar.

Por otra parte, en un bol mediano, batir una clara de huevo hasta que quede espumosa. Unir a la preparación de almendras con azúcar, mezclar con cuchara de madera hasta formar una masa rígida. Formar una bola, envolverla muy bien y llevar a la heladera hasta que se afirme, alrededor de diez minutos.

Derretir un poco de manteca en una cacerolita y pincelar con ésta un molde desmontable para tartas. Enharinar apenas la superficie de trabajo, retirar la preparación de la heladera y luego golpear suavemente con el palo de amasar para aplanarla. De esta manera, se logra una deliciosa masa crocante hecha de almendras, azúcar y clara de huevo.

Pasar la mezcla crocante al molde. Con la parte posterior de una cuchara, humedecida en agua fría, o con la palma de la mano, presionar la mezcla contra el fondo del molde y luego contra los costados. Enfriar hasta que se afirme, alrededor de 10 minutos.

Calentar el horno a 180º C. Poner a calentar una placa refractaria en el horno. Colocar el molde con la masa en la placa y hornear justo hasta que comience a dorarse (de 8 a 10 minutos). Sacar el molde de la placa y colocarlo en la rejilla de alambre. Dejar que la masa se enfríe en el molde. No apagar el horno.

Picar 270 gr. de chocolate para taza y colocarlo en un bol mediano. En una cacerola, llevar 375 cc. de crema de leche hasta el primer hervor; verter directamente sobre el chocolate y batir hasta que éste se derrita por completo. Reservar hasta entibiar.

Colocar dos huevos y una yema en otro bol, batir hasta que se mezclen bien. Agregar la preparación tibia de chocolate y crema. Mezclar sólo hasta combinar los ingredientes. Con cuidado, verter el relleno en la base fría. Colocar la tarta nuevamente sobre la placa y hornear hasta que el relleno comience a endurecerse, cuando todavía quede blando en el centro (de 15 a 20 minutos).

Dejar enfriar la tarta unos minutos sobre la rejilla de alambre y luego sacar el aro lateral del molde. Colocar sobre una rejilla para que termine de enfriarse por completo. Mientras tanto, picar chocolate blanco y utilizarlo para decorar. Servir la tarta de chocolate a temperatura ambiente, cortada en porciones.