Un veterano en carrera

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Más utilizado como actor de reparto que en roles protagónicos, Dern demostró en cinco décadas que es un intérprete dúctil. Uno de sus últimos trabajos fue un cameo en “Django desencadenado” de Quentin Tarantino.

A los 77 años Bruce Dern protagoniza la película “Nebraska” de Alexander Payne, papel que le valió una nominación al Oscar. Perfil de un actor que, aunque no alcanzó el rango de “estrella”, trabajó a la altura de los grandes.

TEXTO. JUAN IGNACIO NOVAK ([email protected]). FOTO. AGENCIA EFE.

Casi todos los años en las nominaciones al Oscar, el premio más codiciado de la industria cinematográfica, se cuela algún candidato menos conocido que los demás o con quien la Academia busca saldar décadas de omisión. En esta oportunidad, una figura que podría adaptarse a esta premisa es la de Bruce Dern, de 77 años con cinco décadas de carrera en Hollywood, quien aspirará por primera vez a la dorada estatuilla en la categoría Mejor Actor por su trabajo en “Nebraska”, de Alexander Payne. La película, que cuenta el viaje de un padre alcohólico y su distante hijo desde Montana a Nebraska para recoger lo que creen es un premio de un millón de dólares, hasta el momento no hizo más que acumular elogios para Dern.

Obtener el galardón, no será una tarea fácil para el veterano actor, a pesar de una trayectoria que le permitió trabajar con reconocidos actores y directores desde los ‘60. Es que en el mismo rubro aparecen como aspirantes Christian Bale por “Escándalo americano”, Leonardo DiCaprio por “El lobo de Wall Street”, Chiwetel Ejiofor por “12 años de esclavitud” y Matthew McConaughey por “Dallas Buyers Club”, todos de magníficas labores en películas diversas. Es cierto que Dern se quedó con el premio del prestigioso Festival de Cannes 2013 por su trabajo en “Nebraska”, pero habrá que ver qué pesa más para los miembros de la Academia a la hora de tomar una decisión.

CON LOS GRANDES

Nacido en 1936, Dern forma parte de esa generación “bisagra” entre las grandes estrellas que forjaron el artificio de los años dorados y los actores que acercaron más el cine a la realidad y dieron a sus personajes una impronta más cercana a la gente común. Ya a mediados de los ‘60, Dern había trabajado con los grandes: en “Cálmate, dulce Carlota” (1964), de Robert Aldrich, con Bette Davis, Olivia de Havilland, Joseph Cotten y Agnes Moorehead. Y en “Marnie, la ladrona” (1964), junto a Tippi Hedren y Sean Connery bajo las órdenes de Alfred Hitchcock.

También durante esa década el actor -que por entonces se convertiría en padre de Laura Dern, actriz de cine y TV- trabajó con Roger Corman en “The St. Valentine’s Day Massacre” (1967); “The Trip” (1967) y “The Wild Angels” (1966). Intervino en dos películas que protagonizó un Charlton Heston: “Will Penny” (1968) y “Number One” (1969). Y formó parte de “El baile interminable” (1969), con Jane Fonda en el papel principal, basada en la novela negra de Horace McCoy.

PELÍCULAS RECORDADAS

En los ‘70 participó en varias películas recordadas como “Regreso sin gloria” (1978) de Hal Ashby, donde se muestran las cicatrices de los soldados de la guerra de Vietnam, y “Domingo negro” (1977) de John Frankenheimer, que Dern protagoniza junto a Robert Shaw e interpreta a un desquiciado ex combatiente de Vietnam que se une a un grupo terrorista. Actuó también en “Posse” (1975) donde compartió cartel con Kirk Douglas, quien además dirige.

En “El gran Gatsby” (1974), de Jack Clayton, mítica película escrita por Francis Ford Coppola, con Robert Redford y Mia Farrow como pareja estelar, interpretó a Tom Buchanan. Y otro de sus trabajos de esta década fue otra vez con la conducción de Alfred Hitchcock, en “Trama macabra” (1976), donde encabeza los créditos junto a Karen Black, Barbara Harris y William Devane. Este filme fue el último dirigido por el “maestro del suspenso” antes de su muerte en 1980.

VOLVER A ESCENA

Aunque fue un actor prolífico, no tuvo en los ‘80 muchas chances de mostrar su talento. Solo se destacan sus interpretaciones en “That Championship Season” (1982) donde compartió cartel con Stacy Keach, Robert Mitchum, Martin Sheen y Paul Sorvino. Esta película, centrada en un grupo de antiguas glorias del basquet, le valió un premio al Mejor Actor en el Festival de Berlín de 1983.

Ya en los ‘90 intervino en interesantes películas dirigidas por Walter Hill: “Entre dos fuegos” (1996) donde encarna al sheriff de un polvoriento pueblo fronterizo donde llega John Smith (Bruce Willis) para desatar una sangrienta pelea entre dos bandas rivales y “Wild Bill” (1995) un western centrado en la figura del pistolero “Wild Bill” Hickok. Luego trabajó en “La maldición” (1999), “Espíritu salvaje” (2000), “Monster” (2003) “Perversa seducción” (2005), “El granjero astronauta” (2006), “Twixt” (2011) y “Django desencadenado” (2012), con papeles secundarios.

Con “Nebraska”, Alexander Payne -nombre destacado del cine norteamericano actual, responsable de “La elección” (1999) “Las confesiones del señor Schmidt” (2002), “Entre copas” (2004) y “Los descendientes” (2011)- le brinda la oportunidad de volver al ruedo con un papel hecho a su medida.

Nacido en 1936, Dern forma parte de esa generación “bisagra” entre las grandes estrellas que forjaron el artificio de los años dorados y los actores que acercaron más el cine a la realidad.