El Congreso todavía no empezó a debatir el anteproyecto

El Código Penal se convirtió en excusa para la disputa política

  • Massa capitalizó las críticas a la iniciativa, con argumentos que sus defensores desmienten. Diferencias dentro de la oposición.
 

De la redacción de El Litoral

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El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, acusó hoy al diputado y líder del Frente Renovador, Sergio Massa, de ejercer “oportunismo” para “llevar agua a su molino” y advirtió que es de “ignorancia supina” querer convocar a una consulta popular en contra del anteproyecto de reforma del Código Penal, que impulsa el gobierno.

Capitanich sentenció que Massa, en sus cuestionamientos, cometió “groseros errores que ofenden la calidad profesional de quienes han participado del proceso de elaboración del anteproyecto”, entre ellos el jurista radical Ricardo Gil Lavedra y el ministro de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni.

“El camino de una reforma es a través de un sistema amplio de participación y debate (en el Congreso) y quien tenga observaciones, las podrá hacer cuando se conozca el proyecto. Lo que no se puede hacer es oportunismo político, llevar agua para su molino”, advirtió Capitanich en su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada.

El funcionario aclaró que “se trata de un anteproyecto a partir de una comisión conformada por especialistas, con un carácter plural y de alta calificación, que debe ser luego emitido al Congreso como proyecto de ley”, pero advirtió que “desde usinas opositoras, más precisamente del Frente Renovador y de quien lidera ese espacio, se han pergeñado estrategias comunicacionales” para desacreditarlo.

Capitanich apuntó que Massa “dice que va a pergeñar una consulta popular” pero “sorprende la ignorancia supina respecto de las limitaciones” de ese mecanismo, “porque ésta no se puede aplicar para tratados internacionales, tributos, presupuestos, y en materia penal”.

“Cuando dice que va a someter a una consulta popular la reforma del Código Penal, está mintiendo al pueblo argentino, porque es absolutamente inviable desde el punto de vista jurídico”, expresó el ministro. Además, señaló que “cuando habla de prisión preventiva y de excarcelaciones, sabe que ésta es una cuestión de Código de Forma, en consecuencia, corresponde a la provincia; no puede confundir, teniendo en cuenta su título de abogado, el fondo y la forma”.

Discrepancias

En tanto, el debate generó discrepancias internas en partidos de la oposición, mientras que el kirchnerismo se mantiene en silencio respecto de la iniciativa y el massismo ratificó su total rechazo.

Las principales diferencias se observaron en la Unión Cívica Radical (UCR) y en el PRO, al tiempo que el jefe del Frente Amplio Progresista (FAP), el diputado Hermes Binner, valoró que la discusión obliga “a debatir temas concretos”.

Quien reapareció en el escenario público fue el ex presidente Eduardo Duhalde, al respaldar la postura del massismo y rechazar “absolutamente” la reforma del Código Penal porque las modificaciones no las puede proponer un “gobierno que está casi en su último año”.

En el radicalismo, el diputado y ex vicepresidente, Julio Cobos, se pronunció en contra del proyecto al advertir que “disminuye” las penas en algunos delitos, y se diferenció así del jurista Ricardo Gil Lavedra, quien consideró que “la reforma es necesaria”, pero alertó por las “condiciones” para su tratamiento.

“El anteproyecto disminuye la intensidad de las actuales penas de prisión en los principales delitos que hoy mantienen en vilo a la sociedad”, afirmó Cobos en un comunicado firmado, además, por los diputados nacionales de la UCR de Mendoza, Luis Petri, Patricia Giménez y Enrique Vaquie.

El ex vicepresidente agregó la iniciativa “disminuye las escalas penales de los delitos de homicidios, robos, trata de personas y tráfico de estupefacientes”.

Por su parte, Gil Lavedra rechazó las críticas del diputado y jefe del Frente Renovador, Sergio Massa, y aclaró que “ningún delito va a ser excarcelable por sí” porque “eso lo decide el juez en cada caso concreto”.

“Mi percepción es que en estas condiciones es imposible hacer un debate en serio. La reforma es necesaria pero en estas condiciones, no”, consideró el ex diputado radical que integró, junto a Carlos Arslanian (por el kirchnerismo), María Elena Barbagelata (PS) y el diputado Federico Pinedo (por macrismo), la comisión que, coordinada por el ministro de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni, llevó adelante el anteproyecto.

En debate

En el macrismo, el diputado Federico Pinedo afirmó ayer que “es bueno abrir el debate del Código Penal”, aunque aclaró que sus “disidencias” con la iniciativa “son claras y no hay Código sin consensos muy amplios”. Pero la también diputada macrista Laura Alonso reconoció que tiene “diferencias con algunos de los contenidos del anteproyecto, inclusive con Pinedo”.

En medio del creciente debate, que se reavivó el sábado cuando la presidente anunció el envío del proyecto al Congreso, Binner resaltó que la iniciativa “nos obliga a debatir los temas concretos y saber por dónde están los peligros principales. Después viene el tema de la pena, que tiene que ser racional para el delito cometido. Éste es un tema que seguramente va a exigir debate”, amplió el referente socialista, quien evitó manifestarse a favor o en contra, pero rechazó la posibilidad de “bajar” las penas a delincuentes.

Por su parte, Massa advirtió que quienes lo criticaron por rechazar el proyecto, como el juez Zaffaroni y Gil Lavedra, “tienen que explicar por qué (en la iniciativa) reducen las penas de 146 delitos”.

“Hicieron un texto, lo que tienen que hacer ahora es explicarle a la sociedad por qué ocho de cada diez delitos son excarcelables. Esto se responde con sí o con no”, planteó el ex intendente de Tigre.

En línea, se pronunciaron sus aliados Mario Das Neves (diputado del Frente Renovador), Rubén Sciutto (diputado) y José Eseverri (intendente de Olavarría).

El dato

Juristas

La comisión redactora del anteproyecto de la reforma del Código Penal son los juristas Carlos Arslanián (por el kirchnerismo), Ricardo Gil Lavedra (la UCR), la ex diputada María Elena Barbagelata (PS) y Federico Pinedo (por el macrismo), coordinado por el ministro de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni.