Un “estallido” en medio del relato

Se cayó el acuerdo mercantil que anunciara la presidente en Olivos

Cristina apuró el entendimiento la semana pasada, antes del paro. Pero el gremio con más trabajadores del país dice que hay reclamos desatendidos.

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Carlos de la Vega, titular de la CAC

 

De la redacción de El Litoral

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El presidente de la Cámara Argentina de Comercio, Carlos de la Vega, aseguró que “estalló el acuerdo” paritario con el gremio del sector, que había sido anunciado en Olivos con la presencia de la presidente, Cristina Fernández.

“Estamos tratando de recomponer las esquirlas”, aseguró De la Vega en referencia al fallido intento de pactar un aumento de sueldos del 27% para los empleados de comercio de todo el país.

De la Vega recordó que “estaba acordada la implementación del aumento”, y mencionó el anuncio oficial que se hizo en Olivos con las presencias de la jefa de Estado y del ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, el miércoles pasado horas antes del paro que convocaran Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Pablo de Micheli.

El acuerdo anunciado en Olivos entre la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios y las cámaras del sector incluía un incremento salarial del 27 por ciento en dos cuotas, la primera del 17 por ciento a partir del 1º de abril, y el resto desde el 1º de septiembre de este año.

Pero a ese porcentaje que satisface la “cartelera oficial” de un gobierno que intenta contener la espiral inflacionaria, el entendimiento incluía dos montos fijos de 1.200 pesos a pagarse en julio y noviembre. Sumados todos los conceptos, el sector totalizaban un aumento del 29,9 por ciento anualizado.

De esta manera, el ingreso promedio de un trabajador del sector alcanzaría desde el 1º de abril los 8.451 pesos de bolsillo.

El representante patronal en la mesa de negociación contó en referencia al fallido acuerdo que “al día siguiente” de ese anuncio “teníamos que redactarlo y firmarlo. Insólitamente aparecieron nuevos pedidos que cambiaron el equilibrio que habíamos logrado”.

El sindicato que conduce Armando Cavalieri planteó la incorporación de una suba en varios adicionales del convenio colectivo de trabajo, como suplementos para cajeros (falla de caja) y vidrieristas.

Acerca de esos reclamos, De la Vega advirtió que hace falta una nueva ronda de negociaciones antes de tomar una decisión o firmar un entendimiento. Dijo que la parte empresaria debe “consultar a los sectores” involucrados por la nueva demanda sindical.

“Estamos en un punto muerto”, reconoció De la Vega. “No hay que ser absolutamente inflexibles, pero la paciencia tiene un límite”, se quejó.

Dijo que “la gente de bien, cuando acuerda de palabra, suele mantener lo acordado”.

Los portuarios sigue negociando

Las operaciones en terminales portuarias del Gran Rosario se reactivaron en las últimas horas, tras un paro iniciado el martes en el marco de un conflicto intersindical, luego de que se acordara para el lunes una reunión entre las partes para resolver las diferencias.

El conflicto que afectaba la actividad en la ciudad de Puerto San Martín y Timbúes, a 30 kilómetros al norte de Rosario, quedó suspendido y se normalizó la operatoria de amarre y desamarre de los buques que exportan productos de la agroindustria.

Fuentes gremiales señalaron que mañana se realizará una reunión entre los dos sindicatos en pugna y representantes de las empresas, en la sede del Ministerio de Trabajo de la Nación, en Capital Federal, para buscar una solución al conflicto.

La medida de fuerza había sido dispuesta el martes por el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (Somu) y generó demoras en los puertos del complejo agroexportador en el Gran Rosario.

Al suspenderse el servicio de remolque dispuesto por la Prefectura Naval Argentina para los ultramarinos de más de 185 metros de eslora, con carga completa, no se podía cumplir con la salida y entrada de los buques a los puertos.

El conflicto se originó en una lucha de poder para controlar la actividad portuaria entre el Somu y el Sindicato Unido Portuarios Argentinos (Supa), de San Lorenzo, que conduce el presidente de la Cooperativa de Trabajadores Portuarios de Puerto San Martín, Hermes Juárez.

Este enfrentamiento se sitúa en el polo de procesamiento de aceite de soja más concentrado del mundo, donde diariamente se elaboran 125 mil toneladas de semilla de soja.

Toda esta situación paralizó, en plena época de la cosecha gruesa, la salida e ingresos de los bulk-carriers de los puertos en el Gran Rosario, generando pérdidas millonarias en dólares, a valor de unos 20 mil dólares diarios por cada buque en espera. El paro dispuesto por el Somu había afectado a once terminales de los puertos de San Martín y Timbúes.