Una industria impedida de generar divisas

El liderazgo mundial perdido

La baja de impuestos internos compensa la producción a pérdida. Pero el biodiésel argentino perdió el mercado de Europa tras la expropiación a Repsol, y las retenciones le impiden competir en otros destinos.

 

De la redacción de El Litoral

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DyN

La industria del biodiésel había advertido que se encaminaba a un “grave estancamiento” dos semanas antes de los anuncios de rebajas impositivas que formuló ayer la presidenta Cristina Fernández. Sirven para compensar costos en el mercado interno, pero sin baja de retenciones, el sector no puede generar más divisas para el país ni ocupar las inversiones industriales realizadas, la mayoría de ellas en Santa Fe.

El pasado 7 de abril, la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio) señaló que “con las alícuotas móviles vigentes, que ascienden al 27,6 por ciento para marzo 2014, la competitividad del biodiésel argentino es prácticamente nula”. Este tipo de cuestiones provocó que este negocio cayera de 1,7 millón de toneladas a 1,1 millón en los últimos dos años, y “se prevé un derrumbe aún mayor en el 2014”, añadió.

En lo que respecta a la actividad interna, Carbio refirió que “se ve también seriamente afectada, ya que los valores actuales de los precios publicados para las empresas integradas no cubren los costos variables de producción, generando pérdidas en el ejercicio comercial”.

“La falta de actualización de los precios internos obliga a las empresas a realizar entregas al mercado con precios de meses anteriores, muy por debajo de sus costos, y desconociendo si el precio que finalmente sea autorizado resulte efectivamente compensatorio”, se indicó.

Los problemas para el sector comenzaron a sentirse desde mediados de 2012, a partir de las restricciones al ingreso de biodiésel argentino a España, en particular, y la Unión Europea, en general, poco después de que se aprobara la expropiación de las acciones de Repsol en YPF.

El 20 de abril de ese año, la presidente relativizó la represalia española y la circunscribió a “una decisión soberana” de los europeos, pero poco después la Cancillería presentó su protesta formal, que profundizó al año siguiente cuando la UE elevó los aranceles de importación del producto.

Las consecuencias de las restricciones comerciales para un sector volcado preferentemente a la exportación fueron advertidas en varias oportunidades por Carbio, que el último 7 de abril denunció la parálisis del sector, que atribuyó a las trabas comerciales impuestas por Europa.

Pero los empresarios también señalaron en esa ocasión que los excedentes de producción no podían ser colocados en nuevos mercados por las “elevadas retenciones” existentes.

Carbio alertó por el “grave estancamiento al que se encamina esa industria a raíz, principalmente, de la elevada alícuota del derecho de exportación la que, junto con la imprevisibilidad en su fijación, traba las ventas al exterior”.

“Aumenta la capacidad ociosa de una industria líder debido a los imprevisibles y altos derechos de exportación, que le hacen perder competitividad internacional y le impiden ganar nuevos mercados externos”, puntualizó la entidad. La cámara advirtió que las restricciones de la UE provocaron que la Argentina haya perdido su condición de líder mundial como exportador de este bien.

Accesos congestionados

  • Los accesos a los puertos cerealeros ubicados en Timbúes, Puerto General San Martín, San Lorenzo y Rosario continuaron congestionados por miles de camiones, generando grandes dificultades en el tránsito y en la operatoria de descarga en las terminales.

Fuentes del Centro Marítimo de Rosario señalaron además que las quejas de los transportistas se centran en la falta de infraestructura en los accesos y en las playas de estacionamiento, que por momentos resultan insuficientes para el movimiento estimado en unos 10 mil camiones diarios, que deben ingresar a las 11 terminales portuarias.

También, son afectadas las Rutas Nacionales 11 y AO12, la autopista Santa Fe-Rosario. Con la veda de camiones durante el feriado de Semana Santa, se afectaron parcialmente las actividades en algunos puertos privados y la llegada de nuevos cargamentos.

Estas situaciones se vienen repitiendo año a año, en plena época de cosecha gruesa, pese a los operativos especiales que realizan la Dirección de Seguridad Vial de Santa Fe, las municipalidades de San Lorenzo y Puerto General San Martín, la Unidad Regional XVII de policía y Gendarmería Nacional.

El dato

¿Soja está?

  • La megainversión de Renova funciona “a soja”. Pero los productores podrían ser reticentes a venderla; hay buena cosecha y precio para el maíz, y los silo-bolsas podrían tentar al “ahorro en grano” de una buena parte de la cosecha, 55 millones de toneladas de soja estimadas para este año, una vez que los productores vendan lo justo y necesario para cubrir costos. La inflación se comió el efecto “devaluación” y las terminales están sugiriendo al gobierno que restituya el régimen de importación “temporaria” de soja, para que las plantas aceiteras no se queden sin trabajo.

La clave

Divisas

  • La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan un tercio de las exportaciones argentinas, ingresaron divisas por 567.531.563 dólares, por negocios concretados durante la semana anterior. El monto liquidado desde comienzos de año hasta el 11 de abril asciende a 6.447.970.096 dólares. La liquidación de divisas está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial.