Brutal crimen en barrio Abasto

Trece tiros a quemarropa

• La víctima es un hombre de 58 años. Fue acribillado a tiros por un sujeto que lo interceptó en Pedro Espinosa al 6600. Murió en el lugar.

Danilo Chiapello

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Un hombre dejó de existir a poco de ser acribillado a tiros, en un hecho acontecido ayer en las calles de barrio Abasto.

La víctima fue identificada como Demetrio Wasilkowski, de 58 años. Si bien era de nacionalidad chilena, se supo que desde hacía varios años se había establecido junto a su familia en una vivienda ubicada en Pedro Espinosa al 6600.

Ayer a la tarde, cerca de las 19.30, el nombrado salió de su domicilio y no alcanzó a llegar a la esquina cuando fue interceptado por dos sujetos que aparecieron a bordo de una motocicleta.

Uno de estos individuos descendió del rodado e increpó a Wasilkowski. Acto seguido sacó a relucir un arma de fuego y lanzó un furibundo ataque, el que incluyó más de una decena de disparos.

No menos de 13 proyectiles hicieron blanco en el cuerpo del infortunado que, ya herido de muerte, cayó a un costado de la calle. Cometido el criminal acto sus autores escaparon con rumbo incierto.

A todo esto, ocasionales testigos y familiares de la víctima dieron cuenta de lo sucedido a la policía, toda vez que reclamaban por una ambulancia.

Minutos después un patrullero arribó al lugar aunque el personal policial al ver la gravedad del asunto cargó con el hombre en el móvil y lo trasladó hasta el hospital Mira y López donde, pese a los esfuerzos realizados, llegó ya fallecido.

Como causa de muerte se dictaminó múltiples heridas de arma de fuego. En este sentido vale acotar que el nombrado presentaba impactos de bala en ambas piernas; en los glúteos; abdomen; cintura; en el pecho y en la cabeza.

En la escena del crimen, trabajaron agentes de la seccional 7ma. (que interviene por jurisdicción) junto a personal de la sección Homicidios y peritos de la Unidad Regional I.

Según se supo, los uniformados se hicieron de gran cantidad de vainas servidas pertenecientes a un arma calibre 9 milímetros.

Los trabajos de los investigadores fueron supervisados por los titulares de la Unidad Fiscal de Homicidios, doctores Jorge Nessier y Cristina Ferraro, presentes en el lugar.

Un hombre reservado

Tras una recorrida por la zona, los vecinos se mostraron sorprendidos por lo sucedido a este hombre, al que describieron como “trabajador y de un perfil más bien reservado”.

Se supo que Demetrio se ganaba el sustento diario con dos automóviles (un Renault 21 y un Renault 18) los que utilizaba como los llamados remises “barrial” o “truchos”.

La zona de trabajo estaba comprendida entre su domicilio particular y los alrededores del hospital Mira y López, donde se lo podía encontrar a diario.

No obstante, desde hacía algunas semanas Demetrio no realizaba sus labores debido, al parecer, por la rotura de uno de sus coches.

Se investiga

Consultado al respecto, el fiscal Jorge Nessier precisó que “por el momento estamos procurando conseguir algunos testigos del suceso ya que recién nos encontramos en lo que llamamos la primera etapa de investigación”.

En cuanto a los pormenores del hecho, el funcionario explicó que “anoche fuimos con la doctora Ferraro al hospital Mira y López y nos entrevistamos con la esposa e hijos de la víctima. Ellos entienden lo ocurrido como un hecho de robo.

Incluso uno de los hijos nos comentó que al hombre le había desaparecido su billetera y que también le faltaba su teléfono celular”, agregó.

“No obstante -prosiguió- nosotros seguimos investigando en distintas direcciones hasta tanto podamos encontrar las confirmaciones del caso”.

Por último, Nessier también se mostró sorprendido “por la virulencia que tuvo el ataque, que se consumó en plena vía pública, cuando el hombre estaba caminando”, culminó.