“Don Quijote” trajina nuestras tablas

La delegación de la gira cuenta con un total de 52 personas, compuesto por 38 bailarines y 14 técnicos.

El viernes 13 de junio, en el Teatro Municipal, el Ballet Estable del Teatro Colón presentará el ballet de Petipa y Minkus con dirección y coreografía de Lidia Segni. Será en el marco de una gira nacional, y la función local tendrá al santafesino Edgardo Trabalón como protagonista. Directora y primer bailarín charlaron con Nosotros para anticipar una velada de excelencia.

TEXTOS. IGNACIO ANDRÉS AMARILLO. FOTOS. GENTILEZA ARNALDO COLOMBAROLI, PRENSA TEATRO COLÓN y máximo parpagnoli.

“Hacemos la gira con un ballet completo, con toda la gente que forma parte de este Ballet, en las funciones del Teatro Colón”. La que habla es la maestra Lidia Segni, directora del Ballet Estable del Teatro Colón, que cerrará el tour nacional de “Don Quijote” el viernes en el Teatro Municipal (San Martín 2020), con el protagónico del santafesino Edgardo Trabalón junto a la primera bailarina Carla Vincelli.

—Otra vez en gira nacional, y de nuevo con un ballet completo como fue con “Carmen”. Es un gran esfuerzo pero es valioso.

—Es gran esfuerzo, es valioso, y la verdad es que el público responde muy bien, porque asiste a las funciones, se agotan, e inclusive tendríamos que hacer más funciones en cada ciudad; pero los compromisos en el Teatro no lo permiten, porque tenemos al próximo coreógrafo que está llegando cuando termina la gira.

CLÁSICO ACTUALIZADO

—Este ballet es ya un clásico, si bien no es tan célebre como “El cascanueces” o “El lago de los cisnes”, pero pertenece al repertorio más tradicional. ¿Qué lo ha convertido en algo tan especial?

—Que tiene un primer acto muy alegre, con todo el cuerpo de baile, con mucha picardía y danzas muy lindas; el segundo acto puramente clásico, y un tercer acto donde está el gran pas de deux que todo el mundo siempre espera por su gran esfuerzo técnico y toda la gran coreografía que hace que el público se despierte.

—¿Cómo fue su trabajo sobre la coreografía original de Marius Petipa?

—Más que nada fragmenté la obra, usé las partes musicales más importantes, así que ahora dura un poco más de dos horas, de la otra manera duraba casi tres horas y media. Y por otro lado aggiorné con algunas cosas: un pas de deux de ellos cuando llegan al campamento gitano, que no está en la obra completa siempre. Y con danzas de los varones, porque tengo muy buenos varones en la compañía y quería lucirlos, así que hice una danza de gitanos verdaderamente muy importante.

—Ya de por sí tiene la parte de los toreros, muchas partes de lucimiento personal.

—Todo eso está: el primer acto está completo, que dura casi 40 minutos; con los toreros, la mujer de la calle, las amigas. Nada más que quizás con algunas cosas de técnica descollante, no simplificada.

—Lo bueno de esta obra es que combina la danza narrativa con momentos para mostrar danza pura.

—Exactamente, en especial en el segundo acto. Lo que quise más que nada es que la compañía se luciera, pudiera bailar y pudiera mostrar lo que es la técnica actual, que ha evolucionado muchísimo. Recién llegué de Moscú donde fui jurado del Benois de la Danse, estuve viendo cómo se está trabajando allá y es lo que se está haciendo en todas partes. La técnica ha avanzado mucho y estamos tratando de alguna manera de ir evaluando las cosas que estamos haciendo.

PERSONAJES

—Cuando hablábamos por “Carmen” destacaba el gusto que tiene el público por los personajes, cómo se identifica. ¿Qué encuentra usted o piensa que encuentra la gente en los personajes de “Don Quijote”?

—Mucha alegría, que creo que es lo que la gente en este momento necesita y quiere (risas). Verdaderamente en todos los personajes, tanto en el de Kitri como en el de Basilio hay mucha alegría, en el pueblo, en el final, y creo que es lo que la gente quiere ir a ver, no quiere ir a ver dramas.

—El personaje de Kitri tiene algo del “salero” de Carmen pero de una manera más inocente.

—Es diferente: Carmen es una mujer más sensual, Kitri es una persona alegre y caprichosa.

—Las une lo impetuosa, la “parada”...

—Exactamente.

—¿Cómo trabajó con el elenco y con cada una de las parejas que se presentan en cada función?

—Trato de respetar un poco la personalidad de cada uno. No quiero tener una compañía donde todos bailan el mismo personaje de la misma manera. Dentro de la coreografía y el estilo, trato de aceptar la personalidad de cada uno. Hay gente que lo percibe más de una manera, siempre guardando el rol, y otros de otra.

—Cierra en Santa Fe la gira...

—Esta vez cerramos en Santa Fe. Empezamos en Rosario, seguimos por Córdoba, Mendoza, San Luis, y Santa Fe.

A FUTURO

—¿Qué proyectos hay para el futuro cercano?

—Tenemos ahora un estreno en la Argentina, una obra de Boris Heinzmann, director y coreógrafo de San Petersburgo. Después seguimos con un “Romeo y Julieta”, y en medio de todo eso tenemos giras a México, Cuba, Paraguay. La compañía se está moviendo continuamente.

—¿Con qué van a girar?

—A Cuba vamos con unos tangos con música de Piazolla y unos pas de deux. A México y Paraguay vamos con pas de deux, y estamos armando otra gira grande a fin de año que todavía no tengo firmada: y hasta que no firmo los contratos no la digo por cábala (risas).

—¿Algún proyecto suyo por fuera de la compañía?

—Termino de llegar de ser invitada como jurado del Benois de la Danse en Moscú, y ahora me llegó la invitación para ser jurado en Suiza del Prix de Lausanne, una competencia muy importante de ballet. Estaré del 30 de enero al 8 de febrero.

—El año que viene...

—Y sí, ya tengo programado todo el año que viene en el Colón, tenemos que vivir así, sino no llegamos con la gente importante que queremos traer: la gente está muy ocupada, hace contratos con dos y hasta tres años de antelación, así que tengo que adelantarme a eso, de otro modo no conseguiría los coreógrafos que tengo.

REENCUENTRO

“Por tercer año consecutivo el Ballet del Colón va a Santa Fe en esta gira a nivel nacional y lo bueno de esta vez es que llevemos un ballet completo clásico, que es la especialidad de la compañía. Estoy muy contento, estar en mis pagos, mi tierra, con mi gente, pudiendo mostrarles lo que vengo haciendo hace ya varios años en el Teatro Colón”, afirma Trabalón.

—Llegás con toda la compañía jugando para vos.

—Vamos con toda la compañía y voy a estar haciendo el rol principal junto con Carla Vincelli, como Basilio y Kitri. Súper feliz: cuántas veces he hecho “Don Quijote” en el 1º de Mayo, y esta vez con el Ballet del Colón, es una fantasía que en el interior se pueda ver lo que hacemos dentro del Teatro.

—Es un ballet que lo tenés bastante incorporado.

—Sí, además me siento cómodo en el personaje, porque tiene que ver un poco con mis características, mi personalidad, mi carácter.

PERSONALIDADES

—¿Cómo te relacionás con el personaje, qué encontrás en él?

—Es un personaje muy pintoresco, muy alegre, simpático, eso de muchacho pícaro me gusta y tiene que ver con mi personalidad. Soy bastante alegre, trato de buscar el lado bueno de las cosas, de estar sonriente todos los días. Para mí es cómodo el personaje, si bien lo más complicado es en la parte técnica: buscar siempre la limpieza, la precisión de los pasos, de los saltos, la conexión con la bailarina y el cuerpo de baile, el estilo.

—¿Qué es lo más difícil a la hora de interpretarlo?

—Tenés que tener cuidado en el estilo: en el momento que hacés la técnica que esté en el estilo español, con sus colores propios, los vuelos del movimiento. Para mí este personaje no me es incómodo, lo vengo haciendo de muy chico, con mi mamá en Santa Fe: lo primero que empecé a bailar fue español.

—¿Qué es lo que vos pensás que tiene de especial este ballet como para haberse convertido en un clásico?

—Justamente eso: que es especial, por eso es clásico (risas). Creo que un poco la música (de León Minkus), la historia, habla un poco de la gran obra maestra de Cervantes, “Don Quijote de la Mancha”. Don Quijote en sus vuelos, en sus aventuras, se enamora de Kitri pensando en su Dulcinea.

A la gente le gusta muchísimo, es muy famoso a nivel nacional e internacional, y me da mucha alegría poder llevarlo completo al interior: es algo que requiere de mucho esfuerzo, sacrificio y es un buen logro.

—¿Cómo es bailar con Carla Vincelli, compartir la pareja?

—Fantástico, nos llevamos súper bien, tenemos personalidades parecidas: somos bastante chispeantes en la forma de bailar, es una gran compañera, hace muchos años que venimos bailando. Ella tiene una gran técnica y es muy brillante lo que hace, le va a gustar mucho al público.

DÍA A DÍA

—¿Qué proyectos tenés para el futuro cercano?

—Estoy dando clases en el Instituto a los varones superiores de séptimo y octavo año, y mi idea es seguir estudiando e incorporando nuevas formas de la danza, cada vez más conocimiento para, además de seguir bailando, poder pasarlo algún día a los alumnos y a quien me toque entrenar o ensayar. Por lo pronto, seguir bailando, entrenándome y poder mejorar día a día: convertirme cada día en un mejor artista de lo que soy ahora, y mañana y pasado. Siempre ir mejorando, también como persona; ésa es mi filosofía de vida. Un granito por día.

La maestra Segni, convocada como una de las jurados en los más importantes concurso internacionales de la especialidad.

Quise que la compañia se luciera, pudiera bailar y pudiera mostrar lo que es la técnica actual, que ha evolucionado muchísimo.

Trabalón se siente muy orgulloso de estelarizar en su ciudad natal una obra con la que se siente consustanciado.