Para el senador Alberto Crossetti

"Las buenas prácticas agrícolas son el camino"

El titular de la Comisión de Agricultura de la Cámara Alta se manifestó a favor de reformas en la ley de Unidad Económica Agraria y en contra del proyecto que pretende prohibir las aplicaciones aéreas. Marcado optimismo por las gestiones de la comitiva santafesina en Nueva Zelanda, a partir de la cuál podrían generarse negocios para la cadena lechera de Santa Fe.

Campolitoral

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En diálogo con Campolitoral, el representante en la Cámara alta provincial del departamento Belgrano, expresó contundentes conceptos respecto de temas de estricta actualidad rural.

Como primera medida, manifestó su interés en modernizar en materia legislativa el tema de la Unidad Económica Agraria, debido a los problemas que esta norma causa a la producción. “El sector pide que se derogue. Hace un tiempo logré una excepción por dos años, donde todos los condominios pudieron disolverse, pero quedó mucha gente que quedó afuera”, recuerda. Para Crossetti, la mayoría de los condominios son forzosos, devienen de una sucesión, de alguna compra o de viejos condominios. “Dos hermanos que reciben una herencia que no pueden dividir: uno de ellos tiene dos hijos varones y el otro dos mujeres. El primero quiere seguir con la explotación, va a la banco para comprar una cosechadora o tractor y el banco le pide el campo en garantía, pero la otra parte no suele sumarse, y eso entorpece el progreso de la región”, graficó. El legislador pide la excepción por un año como paso previo a que se derogue la ley, aunque “no hay consenso para la derogación”. Paralelamente avanza el tema del feriado dominical, para el que habrá novedades el mes que viene.

Un viaje superador

El legislador también formó parte de la comitiva que viajó a Nueva Zelanda. “La misión fue muy buena, por ser muy reducida en funcionarios pero importante en cantidad de empresarios, productores, veterinarios, ingenieros agrónomos, y miembros de toda la cadena de valor, de los más chicos a los más grandes. Tenemos casos de pymes que están exportando, y eso genera mucha expectativa por las rondas de negocios y la venida de ellos en el mes de septiembre”. Según Crossetti, todos los que viajaron se mostraron muy entusiasmados por las oportunidades que se abren. “Fue una buena iniciativa que tuvo Santa Fe como cuenca lechera de dar este paso, aunque la leche no pasa por un buen momento, de hecho en mi departamento esta semana cerró un tambo más por las actuales condiciones, que sin duda es un tema de la macroeconomía nacional más que provincial.”. También vino gratamente sorprendido por los avances en materia de investigación alcanzado por el país oceánico. “En sus institutos le dedican muchos recursos, en conjunto con las universidades, con quienes invierten mucho en temas como pasturas y fertilización. Esto hizo resurgir el proyecto del impuesto “verde” en la agenda, para dedicarlo a la Secretaría de Ciencia y Técnica”.

¿Y los agroquímicos?

Con respecto a este tema, manifestó estar trabajando en un dictamen “en el que estamos en un 90 % de acuerdo entre todos, aunque diferimos en la franja agronómica. Para algunos no tiene que haber franja, sino un especial hincapié en las buenas prácticas de aplicación, el correcto control de los equipos, la permanente capacitación y el control de policía a través de las comunas, ya que el gobierno provincial no me parece que pueda controlar toda la geografía. Además, tratando que se usen productos de franja verde, y eliminando los de franja roja”. Respecto de las franjas improductivas, dudó que se le pueda dar algún uso. “No veo que se las pueda aplicar a un feed lot, cerdos, pollos, o vacunos. Está claro que la prioridad número uno es la salud humana, pero luego, evitando la deriva y con buenas herramientas podemos controlar los efectos dañinos de los productos. Se puede hacer una buena aplicación con una mínima deriva. Las aplicaciones aéreas son una herramienta insustituible en algunos momentos, obviamente con los recaudos del caso, nunca sobre las áreas urbanas, con la distancia correspondiente para controlar que la aplicación coincida con la receta, apelando al perfeccionamiento y la buena fe de todos”.

"El hecho que la provincia salga en conjunto a buscar mercados es muy bueno, y va a devenir en un futuro inmediato en algún negocio para Santa Fe”

¿Qué dice el proyecto?

Esta semana, la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados de la Provincia, le dio dictamen de mayoría al proyecto de reforma de la ley Nº 11.273 de fitosanitarios. Con la firma de los diputados Daniele, Abello, Vega y Toniolli, el proyecto impulsa modificaciones a los objetivos, sujetos y alcances de la ley. Entre los considerandos, solicita -entre otros- cambios al Art.7 del Cap. IV, para implementar un registro y matriculación de los equipos terrestres. “Los dueños de estos equipos deberán presentar un protocolo de procedimiento, que incluya la habilitación de un Ingeniero Agrónomo matriculado que suscriba la receta; y declarar la identidad y domicilio del operario. En su Art. 33, el proyecto “prohibe la aplicación y/o aspersión aérea de plaguicidas, agroquímicos y/o biocidas químicos o biológicos, con destino al uso agropecuario en el control de insectos, ácaros, hongos o plantas silvestres de interés agrícola y/o forestal cualquiera sea el producto activo o formulado, así como su dosis. Queda exceptuada de la presente prohibición la pulverización aérea realizada con fines sanitarios con el expreso consentimiento de la autoridad sanitaria y medioambiental”. En su art. 34, el proyecto propone lo mismo, que para las aplicaciones terrestres se prohiba la aplicación de plaguicidas, agroquímicos y/o biocidas químicos o biológicos, con destino al uso agropecuario en el control de insectos, ácaros, hongos o plantas silvestres de interés agrícola y/o forestal cualquiera sea el producto activo o formulado, así como su dosis, dentro de un área de 800 metros de las plantas urbanas, parques industriales, complejos deportivos, y recreativos, barrios privados, etc. y de 1.000 metros para establecimientos educacionales rurales”.

El caso de exclusión de agroquímicos quedará delimitada por la línea 0 el ejido urbano y hasta los 800 metros o 1.000 metros si hubiere establecimientos escolares rurales. De los 800 o 1.000 metros, según sea el caso, hasta los 1.500 metros sólo se podrá usar agroquímicos de clase III y IV; desde los 1.500 metros hasta los 3.000 metros, sólo se utilizarán agroquímicos de clase II y desde los 3.000 metros en adelante sólo los productos de clase Ia y Ib, con la debida justificación conforme a la norma”. También se prohibe aplicar productos en banquinas y el almacenamiento o reciclado de los envases.