Montoya Muñoz no vendrá y se iría a Portugal...

De la Redacción de El Litoral

Los dirigentes de Colón esperan tener novedades entre esta noche y mañana en torno a la posibilidad de sumar al volante Jonathan Fabbro, a la vez que el anuncio formulado el sábado por el propio vicepresidente Demanuele, sobre la incorporación del colombiano Montoya Muñoz, quedó en veremos porque surgió una chance del fútbol portugués para el volante que jugó en All Boys y que en la temporada pasada defendió los colores del Vasco da Gama.

Fabbro viene de jugar en River y quedó en libertad de Cerro Porteño de Paraguay por una abultada deuda que el club paraguayo mantiene con el futbolista. “El tiene un permiso de Fifa para jugar en el club que desee”, dijo esta mañana Ricardo Scarone, abogado del futbolista, quien al igual que su hermano, Darío Fabbro, no sólo le dieron identidad a la oferta de Colón sino que esperan ajustar algunos detalles para concretarla. Fabbro se declaró jugador libre debido, precisamente, a esa deuda que el club paraguayo mantiene con él.

En cuanto a Montoya Muñoz, parecía que la incorporación del volante ofensivo a Colón se iba a producir en estas horas, pero desde Portugal se da por hecho su incorporación por un año al Vitória de Guimaraes. De todos modos, la dirigencia del Vasco no confirmó aún la salida del jugador, que fue apuntado por Diego Osella. Ahora surgió el nombre de otro volante para sumarse al plantel rojinegro.

Se esperaba para hoy la llegada de Cristian Pavón, el volante cordobés que llega en parte de pago por la transferencia de César Meli a Boca. Sorprende que Meli ya haya jugado un partido amistoso con la camiseta auriazul, cuando todavía no se ha firmado el contrato profesional.

Ballini ya está desde el sábado en Santa Fe con sus nuevos compañeros, mientras que al margen de lo que pueda pasar con Fabbro habrá que esperar más novedades en la zona de volantes, pues Osella apuntó a un jugador que llegaría en el lugar que no será ocupado, finalmente, por Montoya Muñoz.

El plantel sabalero jugará mañana un amistoso con Patronato, a partir de las 10 y luego aguardará el encuentro del domingo venidero, a las 16.15, ante Lanús, en cancha de Arsenal, correspondiente a la Copa Argentina.

Se recuerda que el debut en el torneo de la B Nacional, para los sabaleros, será el domingo 3 de agosto, en horario a confirmar, ante Instituto en el Centenario.

análisis

¡¿Quo vadis Colón?!

Carlos Héctor Parodi (x)

Es probable que, abierto un nuevo horizonte futbolero como consecuencia del Mundial de Brasil, los ecos de tamaña actividad —y publicidad— influya en problemas mucho más locales, pero no por ello menos importantes, como el que afecta al club Atlético Colón.

No soy, precisamente, alguien que, por palabra o por consejos, pueda dar orientaciones a seguir. Me apresuro a aclarar que estos párrafos sólo valen como elucubraciones de alguien que, no obstante su vocación periodística, su pase libre a cualquier espectáculo, ni durante su actividad, ni antes ni después, concurrió a ver un partido de fútbol y destinó esos menesteres a un asistente.

Fueron los seis años cumplidos en El Litoral, más ocho años en Clarín, que sigo en igual conducta, y leo algunas crónicas deportivas con el mismo escepticismo que, asimismo, me permite definirme como integrante de una agrupación inexistente, cuyas siglas serían AFF (“Agrupación Fanáticos Frustrados”), que es la expresión de una desilusión casi final, como darían los entendidos, a la de un enamorado engañado.

Pero he aquí que otras circunstancias nos llevan a repensar los decisorios de la impronta amorosa y se nos ocurre replantearnos el caso de un mortal engañado... Con ansias de perdonar “el cuerno”.

En el caso presente parecía que no cabía justificación y que debía imponerse una dura sanción, pero de repente, el ansia de perdonar tuvo un nombre: FELIPE.

En mi caso particular, en el barrio en que vivimos en 4 de Enero al sur, calle de por medio vive un FELIPE que calza los cuatro añitos y que es tremendamente colonista, a tal punto que un equipo que le fuera obsequiado hace bastante tiempo, se negaba a sacárselo aún para dormir.

Y tanto más patético aún cuando lo veíamos con una bandera de Colón arrollada a un palo, con la que salía a festejar, sentadito en el umbral de su domicilio, los partidos que ganaba Colón. El grito de guerra era: ¡¡Viva Colón!!

De modo tal que, si bien una, dos, tres o no sé cuántas generaciones, podrán tratar de olvidarse del “desastre colonista”, no hay dudas que los “Felipe” retomarán la ilusión —digamos— y será muy difícil, no podemos decir si uno, dos o cien años adelante, alguna dirigencia, alguna circunstancia, como lo señalan las historietas interplanetarias, replantearán el tema Colón, y si no es muy tarde ya, algunoas dirigentes, aún con los trajes de astronautas, logren triunfar definitivamente, en la forma que seguramente dirigirá Felipe.

Nosotros, los antiguos, los del rubro cero a cien, a lo mejor nos quedamos con ganas de verlo, pero también es probable que, ocupando el rol que nos otorguen, como observadores o como partícipes y, probablemente, con la dirección de Felipe, podamos al fin alcanzar el campeonato.

No se ría mi querido lector, no se olvide que Felipe y yo somos colonistas de corazón, no de dirigencia. ¿Le parece muy ridículo esto?

(x) Periodista-abogado-sabalero de corazón

" “Osella me dejó en claro que en este equipo somos todos laburantes, que todos tiramos para el mismo lado y cuando las ideas están bien claras en un plantel y se forma un buen grupo, se puede hablar de cosas grandes y eso también es muy positivo”.

Matías Ballini

Volante central, refuerzo de Colón.