Reunión, en tiempos preelectorales

Con el deporte como excusa, se encontraron Barletta y Del Sel

  • Esbozaron opiniones sobre problemas de los clubes de Santa Fe, con los que simpatizan. Desvincularon la reunión de especulaciones políticas, pero durante la charla con la prensa, hubo chanzas, ironías y chicanas sobre fórmulas, internas y eventuales rivales.
6-IMG_9236.JPG

“Una fórmula de altura”. Por ahora, nada más que un chiste.

Foto: Mauricio Garín

 

Ivana Fux

[email protected]

Hablar sobre los problemas del deporte en general y de los clubes de Santa Fe en particular fue el motivo -o la excusa- para reunir en un café a dos precandidatos a gobernador: el radical Mario Barletta y el líder del PRO, Miguel del Sel. Los flashes se multiplicaron esta mañana en un bar céntrico de la ciudad para retratar el saludo, el abrazo y los gestos de dos dirigentes cuyos espacios son diferentes, pero que por momentos se acercan -y quizá confluyan- en el campo de las negociaciones preelectorales, que todavía tienen mucho camino por andar.

“Si tomamos este encuentro para otro lado, no tiene razón de ser”, le reclamó Del Sel a los periodistas, tras insistir en que la razón que motivaba el café era demostrar que “la política tiene que servir para el consenso y no sólo para la división, a diferencia de lo que plantea el modelo kirchnerista, que todo lo que tocó lo partió en dos o más pedazos”. Consenso entre referentes con pertenencias políticas distintas, y con rivalidad en lo deportivo: Del Sel, tatengue; Barletta, sabalero.

Pero pese al pedido explícito del humorista, fue imposible escindir el encuentro de las especulaciones electorales, porque fueron los propios protagonistas los que plagaron sus respuestas e intervenciones de chanzas, chicanas y provocaciones.

Las preocupaciones que enunciaron sobre el deporte fueron desde la aspiración de que Unión y Colón asciendan “y vuelvan a estar en primera”; pasando por “la berretada” de tener que jugar partidos sin hinchadas visitantes o sin público, hasta las irregularidades que esconde Fútbol para Todos y la sospecha sobre algunos gobernadores “con aspiraciones políticas” que el año que viene podrían dar “ayuditas” a clubes de sus provincias, en detrimento de otros. No hablaron de proyectos concretos sobre ninguno de los puntos, aunque se comprometieron públicamente a trabajar desde el Congreso para abordarlos.

¿Fórmula?

¿Cómo imagina usted que le cayó al socialismo esta reunión suya con Del Sel?, inquirió una colega a Mario Barletta. “Pregúnteselo a los socialistas -exclamó con una mezcla de humor e ironía-. No veo por qué tendrían que sentirse molestos”, continuó. Después siguió Del Sel con su sugerencia de que no se tergiversaran los objetivos del encuentro. “Tomo la política desde otro lugar, para hacer el bien a la gente... Si tomamos este encuentro para otro lado, no tendría razón de ser...”. “Más allá de que sería una fórmula con mucha altura...”, intervino el propio Barletta que -en términos futbolísticos- la dejó picando.

“Cada uno está trabajando -siguió diciendo el ex intendente-; cada uno quiere lograr la mayor adhesión. El tema electoral se irá definiendo... No hay dudas de que el tema del Unen y el PRO está instalado y la dirigencia y la sociedad lo discute, y en algunas provincias ya hay un acuerdo avanzado. Pero si quieren, después hacemos otra convocatoria en caso de que eso suceda -prometió, en un intento por ordenar el discurso-. Aquí -insistió-, estamos tratando de demostrar que en un país donde se instaló el blanco o negro, es posible dialogar y obtener consensos más allá de las pertenencias políticas, si es que los objetivos son compartidos”.

Relaciones

¿La buena relación que tiene con Del Sel la tiene también con otros dirigentes del Frente?, fue otra de las preguntas a Barletta durante la conferencia, en clara alusión a los referentes del socialismo. “Hay personalidades con las que uno tiene más feeling... Pero el diálogo con Pablo Javkin, por ejemplo, es excelente. Y con dirigentes del socialismo siempre hemos tenido una relación muy respetuosa”, definió.

Otra pregunta indagó puntualmente sobre Miguel Lifschitz, su rival directo en una eventual primaria del Frente Progresista. “Me llevo bien. Además, somos los dos ingenieros, así que tenemos algunas cuestiones en común. Giustiniani también es ingeniero”, acotó. Al actual senador nacional por el socialismo nadie lo había nombrado; lo introdujo Barletta en su discurso por voluntad propia. Retomó el juego de las profesiones -que internamente en el socialismo, según el folclore, enfrenta a médicos con ingenieros- y recordó que “Giustiniani fue decano de Ingeniería (en Rosario), igual que yo”. Otra coincidencia... Semanas atrás, una foto de ambos en un acto que organización conjunta, irritó a los socialistas y desató especulaciones sobre supuestas fórmulas.

El dato

Bancas

Del Sel confirmó hoy que renunciará a fin de año a su banca para encarar de lleno su campaña a gobernador. Barletta, que también es diputado nacional, expuso otro criterio. “No renunciaría a la banca; siento que si la ciudadanía me eligió con el cargo de diputado, debo cumplir hasta el último día con eso, salvo que en el interín me toque ganar la gobernación de Santa Fe. Pero si no, no renunciaría a la banca”, manifestó.

Reformas electorales

Mario Barletta rechazó cualquier modificación a la Ley Electoral actual. Consultado por El Litoral, admitió que la norma es perfectible, pero consideró que no es el “momento” para dar ese debate. “A esta altura, no corresponde. Dejemos que pasen las elecciones, y al día siguiente, empecemos la discusión”, planteó.

En tanto, defendió los postulados de la Ley Rubeo, que establece la gratuidad de las campañas políticas. Dicha norma pretende ser derogada por el Poder Ejecutivo, en virtud de que el gasto debe ser absorbido por el Estado.

“Que se haga cargo el Estado, como está establecido por ley. Así está definido y así tiene que ser. No comparto la derogación de la Ley Rubeo -dijo a El Litoral. Tampoco creo que hoy sea oportuno estar generando en ese tema una posible modificación. Además, por qué se esperó hasta último momento -se preguntó-. Si hubiese algo que analizar al respecto, se debería haber hecho en otro momento; si no, parece que el oficialismo quiere sacar ventaja política del tema. En cuanto al financiamiento de la política, hoy tal como están dadas las cosas, es preferible que el Estado haga un esfuerzo a que se estén buscando otros mecanismos y alternativas que a la larga, generan más sospechas en la ciudadanía sobre de dónde sale la plata. No digo que no haya que discutirlo y poner un límite -aclaró- porque el Estado no es un barril sin fondos para estar financiando campañas, pero diría que en esta oportunidad tratemos de saldarlo con el esfuerzo que haya que hacer y a futuro se discutiría”.