Panorama complicado

Se cayó la negociación de privados con houldots

De la Redacción de El Litoral

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DyN

Mientras las negociaciones entre los bancos extranjeros y los holdouts entraron en un callejón sin salida, ayer comenzó el proceso para gatillar los seguros por default a quienes se cubrieron contra una nueva cesación de pagos del país.

En materia de un eventual arreglo entre privados para estirar la situación hasta enero y que Argentina no deba atender la cláusula Rufo, representantes del multimillonario Paul Singer manifestaron que “no” existieron propuestas concretas.

De acuerdo con las agencias internacionales, “las conversaciones entre un grupo de bancos internacionales” y el Fondo NML también “se han derrumbado”, al tiempo que atribuyen a “la falta de compromiso del gobierno argentino de cumplir con el pago de la sentencia”.

En ese sentido, precisaron que “un escollo para llegar a un acuerdo es que no hay garantía de que el gobierno pagará la sentencia, una vez que la cláusula Rufo expire a fin de año”.

Por otra parte, el fondo de inversión Aurelius Capital dijo que “no recibió ninguna propuesta realista en las conversaciones que mantuvo con varias instituciones financieras privadas para terminar con el conflicto con la Argentina”, con porcentajes que rondaría 40% del valor nominal.

En tanto, la Asociación Internacional de Swaps Derivativos (Isda) determinó que el próximo jueves 21 se realizará la subasta de bonos para el cobro del seguro contra el default de la Argentina.

Esta mañana el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, afirmó que son “amenazas infundadas e irracionales” los vaticinios del fondo buitre Aurelius de que “lo peor está por venir” para la Argentina y advirtió que es una “patraña, una mentira, que no tiene la más mínima razonabilidad” que un juez de Nevada avance sobre los activos del empresario Lázaro Báez.

“Observamos una pretendida instalación sistemática por actores de la oposición, desde sindicatos, partidos políticos, grupos mediáticos concentrados” que “pretenden establecer una acción permanente de zozobra en la sociedad, con la clara consigna de desestabilizar al gobierno”, afirmó.

Capitanich señaló que las amenazas del fondo Aurelius son “infundadas e irracionales, más teniendo en cuenta nuestra condición de país soberano”, y además los acusó de ser “grupos minúsculos de interés, voraces, que constituyen una verdadera mafia internacional, y que manejan los hilos del poder”.