patria o buitres

Cristina pide aval del Congreso

La Constitución consagra que los legisladores son los que definen en materia de deuda. Axel Kicillof ya avanzó a todo o nada; el país ante un escenario inédito.

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“Estoy un poco nerviosa, discúlpenme si me pongo un poco nerviosa, normalmente suelo tener más aplomo”, se sinceró la jefa de Estado ante la evidencia de su propia emoción. Foto: EFE/Presidencia

 

De la redacción de El Litoral

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DyN/Télam

Cristina Fernández cuenta con el kirchnerismo incondicional. Pero desafía a todo el peronismo parlamentario y a sus aliados, también a los opositores, a hacerse cargo de la convalidación -o no- en el Congreso de la estrategia bautizada como “patria o buitres”, que diseñó Axel Kicillof.

“Quédense tranquilos, esto está todo estudiado en profundidad. Se tomaron las medidas para impedir que la reconstrucción de la situación financiera de la Argentina esté en riesgo por pequeños grupos que no buscan otra cosa que jaquear a los países”, dijo el ministro a fines de agosto. La estrategia llevada adelante desafía a la Justicia norteamericana a nombre de la soberanía argentina; el escenario es inédito.

La presidente apeló anoche al art. 75 inc. 7 de la Constitución Nacional (“corresponde al Congreso: ... arreglar el pago de la deuda exterior e interior de la Nación”) para buscar el respaldo o el rechazo sobre hechos consumados. Anunció anoche por cadena nacional el envío de un proyecto de ley donde invita a los bonistas canjeados en 2005 y 2010 a aceptar que se les pague en Buenos Aires bajo jurisdicción argentina.

El margen parlamentario es estrecho. El texto propuesto por el Poder Ejecutivo no sugiere qué pasaría si los bonistas canjeados no aceptan la “invitación” para que tomen nuevos bonos.

Esos bonistas tienen un pago retenido por U$S 539 millones en la cuenta que el Bank of New York tiene en el Banco Central de la República Argentina. Los fondos no están embargados, pero la entidad crediticia es una persona jurídica bajo jurisdicción norteamericana, y el juez Thomas Griesa ha sentenciado que si hace el pago desacata su sentencia.

Esa controversia es parte de lo que la Casa Rosada apeló ante la Corte de La Haya; Washington adelantó que rechaza esa jurisdicción pero no formalizó su postura. La Argentina pagó, Griesa retiene fondos que no son materia de su expediente (la extralimitación argumentada por la Argentina) pero los acreedores no cobraron. ¿Default o no default..? ésa es la cuestión.

El proyecto de “ley del pago soberano local de la deuda exterior de la República Argentina”, declara de “interés público” la reestructuración de deuda 2005 y 2010, así como el pago “en condiciones justas, equitativas, legales y sustentables al ciento por ciento de los tenedores de títulos públicos”.


Desacato

  • “Tres semanas después del default, la Argentina hizo una movida para burlar una orden judicial de Estados Unidos”, advirtió hoy The Wall Street Journal. Para Jorge Capitanich, “el impacto de una eventual orden de desacato lo debe explicar el mismo juez. No es exactamente lo mismo una persona física o una persona jurídica, que un país soberano”. Las decisiones argentinas se proponen en la propia razonabilidad argumental, desafían el contexto internacional y plantean consecuencias inciertas en un escenario inédito.

Bolita

  • “Era una bola de nieve y ahora se convirtió en una bolita”, definió Kicillof. “Tenemos la voluntad indomable de pagar”, dijo esta mañana; aceptó que el cambio de jurisdicción “es voluntario” durante una rueda de prensa junto al secretario Legal y Técnico, Carlos Zanini y la procuradora del Tesoro, Angelina Abbona. Igual que la presidente, el ministro se encargó de repartir responsabilidades a la historia antes de “K”; sobre el futuro admitió: “No sabemos qué va a hacer el juez Griesa”, pero ratificó que su sentencia es de cumplimiento “imposible”.

En clave

  • Pagador. El proyecto “autoriza” (no obliga) al Ministerio de Economía a remover al Bank of New York como agente fiduciario del pago de deuda a bonistas canjeados. Y a designar a Nación Fideicomisos SA en su reemplazo.
  • Acreedores. El texto reconoce que los tenedores de bonos canjeados tienen el derecho de designar a un nuevo agente fiduciario que les “garantice el canal de cobro”.
  • Condiciones. La propuesta de la Casa Rosada determina que los bonisrtas que acepten nuevos bonos bajo ley argentina y pagaderos en la cuenta de Nación Fideicomisos en el BCRA, cobrarán en las mismas fechas y los mismos montos que lo dispuesto en los títulos que poseen.
  • Buitres. El proyecto crea una cuenta especial en Nación Fideicomisos abierta “de buena fe” para los holdouts (7,2 % no canjeados) que acepten cobrar en términos similares a los que entraron al canje. Algo que la presidente se negó a hacer (“ni un peso...) cuando Thomas Griesa se lo pidió antes de la sentencia, y que los buitres nunca aceptaron.