Mariano Comas, una vida consagrada a la ciudad y a la provincia

Colocación del primer adoquín, por el intendente Mariano Comas, frente a la casa que perteneció al Dr. Pedro Lucas Funes, calle 23 de diciembre (hoy Gral. López) y Comercio (hoy San Martín). Iniciación del pavimento de piedras de la ciudad. Foto: Gentileza J.F. del Pazo

Juan Fernando del Pazo

El pasado 5 de agosto, se cumplieron 200 años del nacimiento de don Mariano Comas, destacado santafesino que a lo largo de su proficua vida desarrolló una vasta tarea consagrada a la función pública.

Sixto Mariano Ignacio Comas nació en la ciudad de Santa Fe el 5 de agosto de 1814, siendo hijo de don Mariano Comas y de doña María del Tránsito Troncoso. Fue bautizado al día siguiente en la iglesia Matriz por el cura don Malaquías Duarte Neves y fue apadrinado por don Francisco Antonio Candioti y doña Juana Ramona Larramendi.

Realizó sus estudios primarios en la escuela de San Francisco y los secundarios en la ciudad de Buenos Aires, bajo la dirección del canónigo doctor Eusebio de Agüero.

Pormenorizar los distintos cargos que desempeñó Mariano Comas sería demasiado farragoso y excedería los límites de esta clase de colaboraciones. Simplemente podemos decir que desempeñó funciones en los tres poderes del Estado, destacando algunas de ellas: gobernador delegado, juez de 1ra. Instancia en lo Civil y Criminal, juez de Comercio, presidente del Superior Tribunal de Alzada, diputado en la Junta de Representantes, diputado y senador provincial en varios períodos; diputado nacional, diputado en las convenciones que sancionaron las constituciones de 1856, 1872 y 1883. Jefe político de La Capital, fue también intendente (el primero que tuvo nuestra ciudad) y concejal municipal.

Además fue el primer vicegobernador que tuvo nuestra provincia, una vez implementadas las reformas que creaban ese cargo y el sistema bicameral en el Poder Legislativo. Fue presidente de la Comisión de Homenaje por el Centenario del Brigadier Estanislao López y también quien presidió la Comisión Municipal de Instrucción Primaria.

Esta consagración que Mariano Comas hizo de su vida a la “cosa pública”, no le impidió participar del movimiento de regeneración y reconciliación de la sociedad santafesina, nacido luego de Caseros. Consecuente con ese espíritu, integró el grupo de hombres que habrían de fundar una institución señera, y que sería definida en su Acta de Fundación como “un ensayo práctico del principio de asociación entre los miembros de una sociedad que comienza a disfrutar del beneficio de la quietud y de la seguridad individual”. Mariano Comas fue distinguido por sus consocios como primer presidente del Club del Orden, en aquel lejano 27 de febrero de 1853. En tal carácter le tocó oficiar de anfitrión de los convencionales constituyentes (designados miembros honorarios del Club), en el baile que en su homenaje se celebró el 25 de mayo de dicho año.

Ya próximo a cumplir ochenta años y mientras ocupaba el cargo de vicepresidente del Senado de la provincia, falleció en esta ciudad el 5 de mayo de 1894 a causa de “insuficiencia valvular” (según consigna el cura vicario D. Genaro Silva en el correspondiente asiento del libro parroquial). Sus restos fueron inhumados en el cementerio católico de nuestra ciudad.

Al morir, Mariano Comas era viudo de Da. Fortunata Sañudo, con quien había contraído matrimonio el 8 de diciembre de 1839, dejando numerosa descendencia.

Podemos decir que la vida de nuestro biografiado acompañó el nacimiento de Santa Fe, desde sus albores autonómicos, pasando por las luchas civiles, el afianzamiento como provincia independiente, el crecimiento en la senda del progreso; y en ese tránsito tuvo un papel preponderante en orden a su desarrollo institucional como Estado moderno.

Ya en el ocaso de sus días, y volviendo la vista, con una mirada retrospectiva hacia “los trabajos y los días” (parafraseando al poeta), bien se puede haber sentido satisfecho por la labor realizada.

Sixto Mariano Ignacio Comas (1814-1894).

Foto: Gentileza J.F. del Pazo