A pesar de la suspensión
A pesar de la suspensión
River manda en soledad
Este partido se jugará el 24 ó 25 de septiembre, diez días antes del superclásico.
Un muñeco feliz. Marcelo Gallardo sabe que todo es posible. River no jugó pero sigue siendo el único líder del torneo.
Foto: DyN
Redacción de El Litoral
DyN
River Plate sigue siendo el único líder del campeonato de Primera División a pesar de la suspensión de anoche del partido contra Arsenal por el modo en que la lluvia persistente afectó el campo de juego en Sarandí.
A minutos del horario estipulado para el comienzo del encuentro, el árbitro Darío Herrera consideró que “no se podía jugar”.
Por su parte, el presidente de River, Rodolfo D’Onofrio, declaró: “River quiere disputar el partido en buenas condiciones, así no porque llovió mucho. Acabo de pisar el césped y parece una cancha de waterpolo”.
Horas antes se había suspendido por el mismo motivo el clásico entre Boca Juniors y Racing Club, poco después del arranque del segundo tiempo, cuando los xeneizes ganaban 1-0.
Por lo tanto, es probable que la séptima fecha se complete el miércoles 24 o el jueves 25 de este mes, diez días antes del esperado choque entre Boca y River, que tendrá lugar en el Monumental.
El cuadro de Núñez afrontará su próximo compromiso en la semana, cuando reciba el miércoles a Godoy Cruz en el marco del partido de vuelta de la segunda fase de la Copa Sudamericana.
En la ida, los dirigidos por Marcelo Gallardo se impusieron 1-0. Asimismo, y ya por la competencia doméstica, el domingo afrontarán una prueba importante en casa ante Independiente, que tras vencer 5-3 a Quilmes quedó como único escolta en el campeonato local, con un punto menos y un partido más.
Herrera: “No se podía jugar”
En rueda de prensa, aclaró que la terna arbitral recorrió “dos veces el campo de juego y se observaba que había mucha agua en los laterales, especialmente”.
“Queríamos esperar a ver si drenaba un poco con ayuda del viento, pero el principal inconveniente es que nunca paró de llover”, destacó.
Herrera, por su parte, dijo que “se escucharon todas las opiniones y se analizó bien la situación, así como las condiciones del terreno”. “Sin embargo, la decisión fue nuestra.
Llegado el momento, ni siquiera hizo falta utilizar la pelota. Los dirigentes escucharon nuestros argumentos y me dieron total libertad para tomar una determinación”, precisó.
Palermo quería jugarlo