el rincón de la lij (*)

Sucedió en el pueblo

María Luisa Miretti

A propósito de Un muerto espera en el claro del bosque, de Cristina Colombo, con ilustraciones de Oscar Capristo. Colihue. Buenos Aires, 2014

Cuando no existían ni celulares ni GPS y los chicos visitaban a sus abuelos en los pueblos donde originariamente vivían, la vida transcurría plácidamente, hasta que un insólito hecho provocó que se derrumbaran todas las hipótesis y les cambiara el rumbo a los habitantes del lugar.

En esta atractiva novela para jóvenes adolescentes, Colombo (Bahía Blanca, con residencia en Buenos Aires y una excelente producción infantil juvenil), incursiona en un género cercano al policial, por la intriga y el misterio mismo que genera.

Manuel -quien está de visita en Las Casuarinas- parece un zombi, paralizado por el horror, porque acaba de descubrir un muerto en el bosque. Apenas alcanza a balbucearlo, se desmaya. Este acontecimiento será el inicio de una serie de acciones que unirá al grupo en busca de acciones, que a su vez les traerá más conflictos todavía.

De ese modo, a las escenas de intriga y de terror, le siguen las de fuerte impacto, algunas jocosas, otras, cargadas de misterio, aventura y dramatismo.

A los conflictos iniciales, le siguen intentos de secuestro, celos y competencias entre un grupo de amigos y el liderazgo que desea tener uno de ellos, al comprobar que el magnetismo que antes ejerciera sobre una de las muchachitas está cambiando de curso, motivo por el cual pergeña un plan para conquistarla y desde allí elabora miles de triquiñuelas.

Estructurada en 28 capítulos, es una novela amena, dinámica, de interesante lectura, que se presta para interactuar e intercambiar opiniones sobre los roles de los distintos personajes.

(*) Literatura infanto juvenil.