Historias de ayer nomás...

Cuando $ 100 eran 50 kilos de pan

Alfonso Prat Gay rescata no muy viejas políticas del Banco Central. Sugiere que todo cambió cuando Néstor Kirchner se comportó como Billy the Kid.

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Prat Gay y Mario Barletta compartieron anoche en la Facultad de Ciencias Económicas un panel sobre política y economía en la Argentina.

Foto: Guillermo Di Salvatore

 

De la redacción de El Litoral

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DyN

“Me río cuando dicen que la inflación es un fenómeno multicausal. Nadie discute que no lo sea; el problema es que eligen la causa que más les conviene. Dicen que la inflación es producto de la concentración oligopólica de los sectores económicos más poderosos; es la admisión más contundente del fracaso de una gestión, porque llevan 12 años gestionando y la inflación pasó del 5 % al 40 %”.

Alfonso Prat Gay es economista pero ha ganado locuacidad. Acompañado por Mario Barletta, postulante radical a la gobernación santafesina, compartió reflexiones con El Litoral.

“Me fui del Banco Central hace 10 años cuando Kirchner me ofreció seguir. En ese momento con un billete de $ 100 uno podía comprar casi 50 kilos de pan en cualquier panadería del país. Hoy no llegás a 4 kilos y es el mismo billete”, apuntó.

Recordó que “había confianza en el peso” y “llegamos a tener una tasa del 1 % anual”. Consultado por qué esa pesificación de hecho se extravió, dijo que “les pareció más atractivo monetizar el balance del BCRA. Fue una decisión de corto plazo como tantas otras; alguien les dijo que era bueno saquear al Banco Central porque ahí estaban los recursos. Hay un cuento sobre Billy the Kid; cuando lo agarran le preguntan por qué robó tantos bancos; y respondió porque la plata está en los bancos. Néstor ésa la tuvo clara desde el inicio”.

Preguntado acerca de si hubo diferencias entre los superávit de Néstor y la pérdida de reservas de Cristina, Prat Gay apuntó que “la excepción al kirchnerismo fueron los dos años en los que gobernaron con el 22 % de los votos. Cuando tuvieron la mayoría en 2005 empezaron a ser ellos mismos, los de Santa Cruz. Se cayó la piel de cordero.

“El kircherismo -explicó- ganó las elecciones de medio término en 2005 a Chiche Duhalde; en 2006 se aprueba la reforma del Consejo de la Magistratura y se modifican dos leyes esenciales, la de administración financiera para lo que entendemos como superpoderes y la reglamentación de los DNU pendiente desde el ‘94”.

Explicó que cada año “alrededor del 25 % de los recursos se termina gastando por fuera de la aprobación presupuestaria gracias a superpoderes y DNU. No es que Néstor era bueno... ellos estaban asustados porque no tenían los votos. Y cuando los tuvieron hicieron todas estas cosas”.

Apuntó que desde entonces “le pagaron por anticipado al FMI, lo echaron a Lavagna. Hubo pésimas decisiones financieras y la prueba está que ahora volvieron al Fondo para que bendiga el índice de precios, cosa que todavía está en dudas.

“En el arreglo con el Club de París -añadió- estaban orgullosos porque el FMI no participó de la discusión. ¿Pero cuál fue el costo? Que no hubo un árbitro que podía establecer si la Argentina merecía o no una quita. Es la primera vez en la historia que un país renegocia sin quita con el Club de París, con punitorios de 3.700 millones de dólares. Es falso -como dijo Kicillof- que no hubo acuerdos con quita”, mencionó Prat Gay apuntando una negociación de Alfonsín entre otras.

“Yo pregunto: si uno es deudor y arregla en 24 horas como dijo el ministro... o sos un boludo o el acreedor es muy generoso”.

Más deuda

  • “Con la devaluación, la deuda en dólares creció más que el PBI. Este año cerraremos con una deuda del 48 % y como referencia en 2001 la deuda era del 42 % del PBI”.

Prat Gay explicó ante la pregunta sobre el desendeudamiento que “no es cierto que sea baja la deuda, aunque buena parte está en manos de dos organismos oficiales: la Anses y el BCRA. Ellos dicen que hay poca deuda en manos privadas, pero esto de ir “neteando” acreedores implica que quizás no van a pagar.

“Si no le pagás al BCRA -explicó-, decretás la quiebra, y si no le pagás a la Anses, la próxima administración no va a tener para pagar a los jubilados”. Para el ex presidente del BCRA, la autoridad monetaria hoy “no blanquea la situación. El 70 % del activo del Banco Central no vale nada, porque son promesas del Tesoro nacional, que no va a pagar.

“Lo que habría que hacer con eso es darle un bono al Banco Central que sea negociable y con valor de mercado para que el Banco Central lo vaya recuperando. Hoy, lo que tiene el BCRA es una gran cantidad de letras intransferiblesque vencen el 6 de enero de 2016. El próximo gobierno no terminó de asumir y tiene un vencimiento de U$S 10 mil millones.

Advirtió Prat Gay que para comprar dólares el BCRA emite pesos; “el cuento del desendeudamiento es una medida regresiva porque los dólares se compran con emisión y con ese exceso se le paga a los bonistas. Se paga la deuda con el peor impuesto que es el inflacionario”.

"El blanqueo no funcionó. ¿Por qué no vienen los traficantes de todo el mundo a depositar sus dólares..? porque entre narcotraficantes no se confían entre sí, no le confían a este gobierno. Esta es una medida de la desconfianza”.

Alfonso Prat Gay

Economista

no alcanzan

  • “Llegamos a 2016 peor que ahora; no sabemos cuánto peor. Éste es el único país del mundo que está con el problema de reservas; ni siquiera Venezuela lo tiene, porque vende petróleo. Nosotros volvimos a generar una crisis del sector externo cuando todo demostraba que no la teníamos que tener”, pronosticó Prat Gay ante la consulta.

Dijo que “la soja baja profundiza el problema. Este año, la Argentina cierra con un déficit de cuenta corriente a pesar de la recesión y de los buenos precios que tuvimos en soja y otros productos. Hoy importamos más de lo que exportamos. El atraso cambiario es una realidad, las economías regionales están muertas.

Ejemplificó con la industria vitivinícola: “Cada vez hacen falta más litros para compensar los insumos: gasoil, fertilizantes. Suben los costos en dólares y el productor pequeño y mediano no tiene salida exportadora. Entonces hay déficit de cuenta corriente, el que no teníamos que tener. No se nos cayó el mundo encima”.

En su cuenta, a Cristina no le alcanzan los dólares para finalizar el mandato. “El déficit de cuenta corriente más los capítulos de la cuenta capital más el dólar ahorro y deuda externa sin refinanciación: todo eso suma más de 32 mil millones de dólares y en el BCRA hay 20 mil millones de dólares netos. Además, añadió que “hay 7 mil millones que son de los ahorristas o de los bonistas a los que el gobierno dice que les pagó pero todavía cuenta los dólares en el BCRA. Es una incongruencia grande del relato”.

China

“Son 25 países que firmaron swaps y sólo dos lo gatillaron: Australia y la Argentina, que puede tener allí una fuente de recursos si los U$S 10 mil millones por año de importaciones desde China puedan pagarse con este swap. Hasta ahora es más importante el swap de las automotrices -unos U$S 3 mil millones- y otros sectores. Hay U$S 5 mil millones pisados por el BCRA.

“El swap con China luce elegante, pero es una nueva ronda del todo atado con alambre. De tanto restringir importaciones, el país tiene una deuda flotante comercial de 5 mil millones de dólares. Esto no sucedía desde la época de la hiperinflación”.

¿Cómo se sale?

“Me hice cargo del BCRA en 2002. Lo de hoy puede ser tan malo como entonces, pero es más fácil de resolver. Los problemas ahora son autoinflingidos, de mala gestión. La Argentina no tiene energía no por otra razón que una mala política energética. Hoy no exportamos trigo simplemente porque hay un señor que lo dice, y carne lo mismo.

“El cepo lo inventó el gobierno y le jugó mal: Kicillof le dijo a Cristina a finales de 2011: ni caída de reservas ni devaluación. Desde entonces cayeron 50 % las reservas y la devaluación fue 50 % oficial y 100 % si mirás el paralelo. El cepo se resuelve en 10 minutos; es más relevante el paralelo o el contado con liqui. Este gobierno es el que no puede levantar el cepo”.

Diferencias

“Somos 8 partidos diferentes en Unen y nadie ha dicho que se va. Los equipos están acordando políticas de Estado en temas económicos, institucionales y sociales. Venimos a cambiar la lógica de poder: no creemos en verticalismo, caudillismo, el manosanta. Nuestra fortaleza son los programas y los equipos de gobierno... nuestros errores son no poner las energías en estas cuestiones, no mostrar que somos los únicos que podemos dar lucha en serio contra la corrupción.

“Tenemos gente como Mario que fue intendente, como Binner que fue gobernador, como Cobos que fue mandatario en Mendoza, que no tienen casos de corrupción a cuestas”.