Granos y tendencias

La urgencia por conseguir divisas

La exportación de granos acordó con el Gobierno aportar U$S 5.700 millones hasta fin de año. En términos de soja, representaría la venta de alrededor de 12 millones de toneladas.

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Escalera al infierno. Cada semana que pasa, el costo de producción aumenta, hasta el momento de la cosecha. Una situación que hacía mucho tiempo que no se veía en la Argentina. Foto:Archivo

 

Pablo Adreani

Finalmente, el gobierno acordó con los aceiteros y los exportadores, nucleados en Ciara-CEC, la posibilidad de que el sector pueda liquidar de aquí a fines de diciembre 5.700 millones de dólares.

La cifra aparece como muy optimista, si consideramos que estamos a poco más de dos meses de llegar a fin de año. En el convenio, el Gobierno debió ceder algunos ROE de otros productos, por caso autorizara mayores cupos para la exportación de 400 mil toneladas de trigo, 500 mil toneladas de maíz y finalmente 100 mil toneladas de harina de trigo. Sólo con estos tres productos el Gobierno se asegura un ingreso de divisas de 300 millones de dólares. En todos estos casos, los exportadores ya tenían comprada la mercadería y sólo necesitaban la autorización oficial para que se puedan exportar.

Por este motivo se estima que dicha medida no debería tener impacto sobre los precios o en la tendencia del mercado. Sin embargo, en la jornada del miércoles pasado en el Matba los mercados reaccionaron en forma positiva a pesar de la sensible baja que mostraba el mercado de Chicago. En forma extraoficial fuentes del sector indicaron que el Gobierno podría llegar a autorizar en las próximas semanas un cupo de exportación de dos millones de toneladas de trigo de la nueva campaña 2014/15, que equivale a un ingreso de divisas de 550 millones de dólares.

¿Una buena noticia?

Si esto fuera cierto, entonces, si tendríamos un impacto positivo en el mercado de trigo que, en estos momentos, está comenzando a ingresar la cosecha del cereal nuevo de las provincias del norte. Sin considerar la soja, que el Gobierno y exportadores esperan que vendan los productores, el ingreso de divisas podría llegar a un total de 850 millones de dólares.

La diferencia entre el compromiso de los exportadores, de liquidar 5.700 millones de dólares y esta última cifra, sería de 4.850 millones y correspondería en teoría a ventas de soja disponible por parte de los productores. En término de volumen de soja equivale a un volumen de venta de 12 millones de toneladas que deberían ingresar al mercado durante los próximos 70 días.

En estas circunstancias y por las proyecciones de la economía para 2015, cuando se espera un año muy complicado, con falta de liquidez y mayor caída en la actividad económica, los productores van a tratar de llegar al próximo año con la mayor cantidad de posible de existencias de soja. Como una forma de resguardar su liquidez y poder afrontar sus costos fijos y operativos. Vemos que los tiempos e interés del Gobierno no coinciden con la realidad de los productores, que asisten a una lenta sangría en el poder adquisitivo de todo grano que tienen, a medida que la inflación sube por el ascensor y el valor del dólar oficial, moneda de cambio de su soja, sube por la escalera.

 

Costos de producción

Con este esquema de dólar fijo, el ajuste en pesos de los bienes y servicios que siguen la inflación implica para los productores un aumento en dólares de dichos bienes y servicios. Y por este motivo, cada semana que pasa sin un ajuste significativo en el valor del dólar oficial, implica que los productores deben vender mucho más soja para pagar la misma cantidad de dicho bien o servicio. Si lo extrapolamos a la próxima cosecha 2015, cada semana que pasa, el costo de producción ira en aumento hasta el mismo momento de la cosecha. Una situación que hacía mucho tiempo que no se veía en la Argentina.