25 DE NOVIEMBRE

Deudas en el Día de la no Violencia a la Mujer

La Campaña Abolicionista “Ni una mujer más víctima de las redes de prostitución” emitió un duro documento en el que alerta sobre las omisiones, complicidades e incumplimiento por parte del Estado.

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Según un informe de Tribunales, entre enero y junio de este año se radicaron 3.094 denuncias de violencia familiar. Muchas mujeres desisten porque el proceso implica un largo peregrinar entre fiscalías y juzgados.

Foto: ARCHIVO EL LITORAL

 

Natalia Pandolfo

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Desde la Campaña Abolicionista “Ni una mujer más víctima de las redes de prostitución” denunciaron, en el marco de la conmemoración del Día de la no Violencia contra la Mujer, incumplimientos del Estado a nivel local, que atentan contra la integridad y la vida de las mujeres.

“En el feminicidio de Noelia Muchiutti, que vivía en Villa Hipódromo, recordamos a todas las mujeres a las que les fue arrebatada la vida y denunciamos la desidia gubernamental que hace que muchas mujeres que sufren violencia no la denuncien o se cansen de hacerlo, porque el Estado a través de sus instituciones o de sus efectores las revictimizan”, consignan en el documento.

“Recordamos a Maira Alonso, de 24 años, que falleciera con el 75 por ciento de su cuerpo quemado luego de que su pareja le prendiera fuego, y nos preguntamos cuántas mujeres podrían salvarse si desde el Estado se garantizaran casas de amparo donde las mujeres pudiesen acudir en busca de alojamiento apropiado y asesoramiento.

“Patricia Bravo había perdido un riñón por los golpes que le había propinado su pareja. Concurrió más de cinco veces al hospital para conseguir un turno para ser operada, no lo logró y eso le costó la vida. En este caso denunciamos la violencia institucional que implica que en algunos hospitales no haya turnos hasta el 2016”.

También mencionan los casos de “la joven de Santo Tomé aislada y retenida contra su voluntad, en un paraje perdido del departamento Vera; las once mujeres trasladadas a las ciudades del circuito donde remiseros proxenetas montaban las llamadas ‘carpas locas’ para explotarlas sexualmente y las mujeres que desde la ciudad de Santa Fe eran trasladadas a las playas de estacionamiento para camiones, cercanas a las plantas cerealeras de San Lorenzo y Puerto General San Martín, caso que fuera a juicio este año condenándose a integrantes de esa red de prostitución”.

NO ALCANZA

El documento exige, en el ámbito provincial, “la urgente sanción de proyectos de ley que se encuentran en la Legislatura: Ley Integral para prevenir, erradicar y sancionar la violencia contra la mujer (Dip. Rico), creación del Programa de Asistencia Laboral para mujeres víctimas de violencia de género (Dip. Urruty) y licencia por violencia de género para empleadas del sector estatal (Dip. Benas)”, licencia que ya fuera incorporada en la paritaria docente provincial.

“Según un informe de Tribunales, entre enero y junio de 2014 se radicaron 3.094 denuncias de violencia familiar. Muchas mujeres desisten porque el proceso implica un largo peregrinar entre fiscalías y juzgados”, afirman.

Finalmente, en relación al Poder Ejecutivo sostienen: “Si analizamos el presupuesto que el Ejecutivo envió a la Legislatura apreciaremos cuál es la importancia que le asigna el gobierno provincial a la prevención y erradicación de la violencia contra las mujeres. El porcentaje para el área Políticas de Género en relación al presupuesto general fue del 0.0043 por ciento en 2013; 0.079 en 2014 y 0.013 en 2015”.

“En noviembre de 2012 se anunciaba la refacción de espacios para habilitar casas de amparo para mujeres víctimas de violencia, con un presupuesto total de no más de 3 millones. Todavía falta ejecutar el 70 por ciento de las obras”, denuncian.

Finalmente, subrayan que “se encuentra sin reglamentar la Ley Nº 13.339 de prevención, detección y combate del delito de trata y de protección y asistencia a las víctimas; esto significa, en concreto, negar los recursos para hacer efectivas las políticas que la normativa contempla”.

La Campaña Abolicionista “Ni una mujer más víctima de las redes de prostitución”, formada en 2007, es un espacio que integran feministas independientes y colectivas feministas de Buenos Aires, Santa Fe, Tucumán, La Pampa, La Plata y San Clemente del Tuyú. Sostienen que la prostitución y la trata con fines de explotación sexual son dos caras de una misma violencia. Esta campaña es autónoma, autofinanciada y autogestiva.