BRIAN DE PALMA

Jugar a ser Hitchcock

  • A mediados de mayo se estrenará en Argentina “Passion”, película de suspenso rodada por De Palma en 2012. Repaso por la irregular filmografía de un artista controvertido, que dejó su huella en el arte cinematográfico.
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El director Brian De Palma y la actriz canadiense Rachel McAdams, protagonista de “Passion”. Foto: EFE

 

Juan Ignacio Novak

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Admirado y cuestionado casi en partes iguales, dueño de un talento extraño, capaz de imitar sin tapujos a Alfred Hitchcock y de rodar superproducciones desmesuradas y pequeños thrillers psicológicos con la misma desenvoltura, Brian De Palma constituye un ejemplo de esos cineastas que, con sus defectos y virtudes, lograron dotar a prácticamente toda su filmografía (con excepción de algunos fiascos estruendosos) de un sello autoral. De modo similar, salvando las distancias, al que proponían los irreverentes artistas franceses de la nouvelle vague a fines de la década del ‘50.

Aunque su carrera comenzó mucho antes (casi en sintonía con la de Martin Scorsese, Steven Spielberg, por nombrar a los más exitosos y prolíficos) fue en “Carrie” (1976) adaptación de la novela de Stephen King, cuando logró combinar calidad artística y comercialidad. Al punto de que muchas de las escenas de “Carrie” mantienen, cuarenta años después, plena capacidad para sorprender y provocar escalofríos (basta recordar la escena final en la tumba) y las actuaciones de Sissy Spacek y Piper Laurie reafirman su brillantez con cada visionado. De hecho, ambas fueron nominadas al Oscar en las categorías de Mejor Actriz y Mejor Actriz de Reparto, respectivamente.

Sus mejores momentos

Aunque “Vestida para matar” (1980) posee ciertos guiños a Hitchcock y secuencias notables, su próxima gran película y tal vez su obra más significativa, sea la violenta “Scarface” (1983). Esta remake del clásico de 1931, ambientada en Miami y con un aparatoso Al Pacino como narcotraficante de origen cubano, se convirtió en una de las obras de culto del cine de los ‘80 y algunas de sus frases (“Dí hola a mi pequeña amiga”, en relación a una ametralladora o “En este país primero hay que tener dinero, cuando tienes el dinero tienes el poder, y cuando tienes el poder tienes las mujeres”, en referencia a Estados Unidos) quedaron para la historia en la cuidada caracterización de Pacino.

Poco más tarde, De Palma rodó la entretenida y sólida “Los intocables” (1987) con pulcras presencias de Kevin Costner, Robert De Niro (que realizó una de sus famosas actuaciones de método para encarnar a Al Capone) y un oscarizado Sean Connery, en una excelentemente recreada Chicago de los años ‘20 sumida en la violencia de los traficantes de alcohol. Desde entonces, a pesar de algunas singularidades como “Carlitos’s way” (1993), la obra de De Palma entró en un declive sólo compensado con algunos tramos interesantes (sobre todo gracias a su impresionante manejo de la técnica) en las películas “Ojos de serpiente” (1998) interpretada por Nicholas Cage y “La dalia negra” (2006).

Retorno al pasado

Precisamente lleva la firma de De Palma (tanto en la dirección como en el guión) la película “Passion”, rodada en 2012 bajo la forma de una coproducción franco-alemana, pero con fecha de estreno para el próximo 14 de mayo en la República Argentina.

Con división de aguas por parte de la crítica -como ocurrió con casi todos los trabajos del director en los últimos 15 años- se trata de una remake de la película francesa “Crime d’amour” (2010, Alain Corneau) sobre una joven ejecutiva que planifica un asesinato para vengarse de su jefa y mentora.

En apariencia, emerge como una especie de “retorno” por parte de De Palma a las temáticas que abordó en sus mejores trabajos en los que emuló sin tapujos a sus maestros con clase e imaginación, como “Doble de cuerpo” (1984), “Vestida para matar” o la más antigua “Obsession” (1976).

El film está protagonizado por Rachel McAdams, quien intervino en populares filmes a lo largo de la última década como “Medianoche en París” (2011), “Sherlock Holmes” (2009) y “Diario de una pasión” (2004) y la ascendente Noomi Rapace, quien intervino por su parte en la serie de películas suecas basadas en la serie de novelas “Milennium” de Stieg Larsson y luego participó en filmes como “Prometeo” (2012), dirigida por Ridley Scott.