Ganó 1 a 0 en Posadas y es líder

Central es un Crucero de alegría: puntaje ideal

  • El equipo del “Chacho” Coudet festejó con otro gol de Niell y alcanzó los 9 puntos en tres partidos. Los hinchas “canallas” enloquecidos con este arranque.
Central es un Crucero de alegría: puntaje ideal

Un infierno encantador

A pesar de los más de 30 grados y del siempre comentado pasto alto brasilero, Rosario Central se trajo los tres puntos de la cancha de Crucero del Norte en Misiones. Con una base de muy buenos jugadores y un entrenador “con vestuario y potrero”, el “Canalla” está puntero.

Foto: Gentileza Prensa Crucero del Norte

 

De la Redacción de El Litoral

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Rosario Central suma y sigue adelante. Al igual que contra Tigre su actuación no fue del todo convincente, pero otra vez aprovechó la notable contundencia de sus hombres de ofensiva y sobre el final se quedó con el triunfo en el difícil reducto de Crucero del Norte, en el alto pasto brasileño de la cancha misionera. Esta vez el héroe fue Franco Niell, que en el minuto 41 del segundo tiempo aprovechó un mal despeje del arquero local y le dio la victoria a los del “Chacho”.

El pasto alto, el clima cálido (33 grados), dos equipos que ya estaban funcionando con el tanque de reserva de combustible. Todo se encaminaba a un empate sin goles ni mayores novedades, tal como ocurrió con el debut de Crucero del Norte en Primera, hace dos semanas, con un 0-0 ante Tigre. Pero para los últimos cinco minutos quedaron dos jugadas, una en cada área, que le pusieron el sello al partido, con una influencia dispar de los dos arqueros.

A los 41 minutos del segundo tiempo, más cansado que decidido a desbordar, Jonás Aguirre envió un centro a media altura que no entrañaba mayores riesgos para Caffa, ya que no lo acechaba ningún adversario. Pero el arquero hizo un despeje frontal que pasó entre un par de defensores locales y cayó en los pies de Niell, un delantero rápido y astuto, que no suele perdonar los descuidos ajenos. Tampoco lo hizo en esta oportunidad, para marcar el gol; una victoria que se consumó en tiempo de descuento, luego de que Caranta, en una gran demostración de reflejos, desvió el potente cabezazo del zaguero Tomasini.

No se terminó de incorporar Caranta de la volada que Vigliano marcó el final, recibido con gran euforia por Rosario Central, constituido en una de las sorpresas del torneo con tres triunfos consecutivos y el 100 por ciento de los puntos. Impulsado por el triunfo de la primera fecha ante Racing en Avellaneda, Central responde a la idea de ser un equipo compacto y con pretensiones que impone su nuevo técnico, el “Chacho” Coudet.

Central no se desesperó nunca, ni aun cuando Marco Ruben desperdició algunas oportunidades más que propicias. A Crucero le faltaron variantes e ideas. El entusiasmo fue insuficiente y los resultados empiezan a mellar la confianza. Todo lo contrario de Central, que subió a lo alto de la Mesopotamia para hacer cima en el torneo.

Hubo Luna de día en Tigre

  • Tigre venció a Olimpo de Bahía Blanca por 1-0 y logró de esta manera su primera victoria del Torneo Julio Humberto Grondona. Carlos Luna, a los 19 minutos de la primera mitad, le dio los tres puntos al elenco de Gustavo Alfaro que justificó en esos 45 minutos iniciales un triunfo que en ningún momento corrió riesgo. Lo de Olimpo fue muy pobre. Falló de tres cuartos de cancha hacia adelante, casi no generó alternativas de gol y volvió a Bahía Blanca con las manos vacías. Tigre fue superior en la primera mitad y logró trasladar esa hegemonía al marcador, en gran parte por el olfato de Luna para capitalizar un error del adversario a los 19 minutos. Una buena jugada por derecha, tramada por el colombiano Sebastián Rincón y Kevin Itabel, derivó en un centro desde la derecha que Iván Furios no alcanzó a despejar. Y el “Chino” Luna estuvo atento para recibir detrás del defensor y poner el 1-0 de cabeza.

Olimpo, pese a tener bastante gente en el mediocampo, no lograba generar fútbol en ese sector. Recién a los 27 consiguió arrimarse al arco azulgrana con un disparo de Gonzalo Klusener que atajó sin problemas Javier García. Más cerca estuvo Tigre de aumentar cuando a los 34 Lucas Wílchez habilitó a Rincón, quien le pegó por encima de Nereo Champagne, pero cerca de la línea logró salvar Cristian Villanueva cuando la pelota se metía.

La segunda parte fue muy pobre. Olimpo tuvo un poco más la pelota, pero careció de profundidad para generar alguna alternativa de gol. De hecho, la oportunidad más clara del segmento la tuvo Luna, quien a cuatro del final recibió solo por derecha, pero elevó demasiado su remate. De todos modos, Tigre ganó merecidamente por esos buenos 45 minutos iniciales en los que dominó al cuadro aurinegro y estableció esa diferencia en la red.

" Jugamos el partido que teníamos que jugar. Seguimos siendo sólidos en el fondo y eso me da mucha tranquilidad. Estas eran las condiciones y nos teníamos que adaptar: no queríamos poner como excusa el pasto ni el calor, pero sabíamos que iba a ser un partido muy físico. Pateamos cuatro o cinco veces al arco y ellos prácticamente no lo hicieron nunca”.

Eduardo Coudet / DT de Rosario Central

síntesis

CRUCERO 0

CENTRAL 1

Crucero: Germán Caffa; Alejandro Pérez, Gabriel Tomassini, Federico Rosso, Nicolás Dematei; Fabián Monserrat, Fabio Vázquez, Marcelo Lamas, Dardo Romero; Gabriel Avalos y Ernesto Alvarez.

Director técnico: Gabriel Schurrer.

Rosario: Mauricio Caranta; Pablo Alvarez, Yeimar Gómez Andrade, Alejandro Donatti, José Luis Fernández; Damián Musto; Fernando Barrientos, Gustavo Colman, Franco Cervi; Franco Niell y Marco Ruben. Director técnico: Eduardo Coudet.

Gol: en el segundo tiempo, a los 41 minutos, Niell (RC).

Cambios: en el segundo tiempo, a los 19 minutos, Walter Montoya (R) por Colman; a los 23, Alejandro Martínez (C) por Romero; a los 29, Diego Torres (C) por Abalos; a los 32, Javier Chironi (C) por Monserrat; a los 38, Jonás Aguirre (R) por Cervi y, a los 48, Jonathan Ferrari (R) por Ruben.

Arbitro: Mauro Vigliano.

Cancha: Crucero.

6 Años

  • Son los que pasaron desde que Rosario Central no ganaba los tres primeros partidos de un torneo de la categoría superior. En esa ocasión llegó a cuatro éxitos en fila.