El próximo martes

La presidente inaugurará el Incape por videoconferencia

Se trata del nuevo edificio para este instituto de investigación en catálisis y petroquímica creado en 1978. Cristina Fernández usó la misma modalidad a distancia para inaugurar otros dos centros del Conicet en 2014.

Mariela Goy

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La presidente Cristina Fernández de Kirchner tiene previsto inaugurar el próximo martes 31, a través de una videoconferencia, el nuevo edificio destinado al Instituto de Investigaciones en Catálisis y Petroquímica (Incape), que ya funciona en el predio del Centro Científico Tecnológico (CCT) Conicet Santa Fe, ubicado entre la Ciudad Universitaria y barrio El Pozo.

Así lo anticipó esta mañana a El Litoral, Albor Cantard, rector de la Universidad Nacional del Litoral, en el marco de la presentación de los 63 proyectos de extensión que se desarrollarán este año en la UNL. “Acabamos de recibir la confirmación vía telefónica de que vamos a estar inaugurando el Incape, que es un instituto de investigación de doble dependencia entre la UNL y el Conicet, con la presencia de la presidente de la Nación a través de una videoconferencia, y en horario a confirmar”, indicó el rector.

La misma modalidad a distancia había sido utilizada el año pasado por Cristina Fernández para dejar inaugurados el Instituto de Agrobiotecnología del Litoral (IAL) y el de Matemática Aplicada del Litoral (Imal), en el mismo lugar donde ahora se terminó de construir la nueva sede del Incape.

El flamante Instituto de Investigaciones en Catálisis y Petroquímica está dirigido por el Dr. Ulises Sedrán, quien destacó que en esta obra se invirtieron más de 20 millones de pesos, a través de un préstamo del BID que fue gerenciado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, mediante el Conicet.

El nuevo edificio de Incape tiene una superficie de 1.790 m2 y está estructurado en dos bloques: uno de ellos contiene las actividades de gobierno, administración, reuniones y docencia, y el otro, las actividades específicas de investigación donde se ubican 16 laboratorios en planta baja y 16 oficinas de los investigadores en planta alta. Otros dos laboratorios especiales están fuera de estos espacios. Ambos bloques se unen por un hall donde se ubica el ingreso.

“Hasta ahora, el Incape funcionaba, mayoritariamente, en dos sedes céntricas: en el Edificio Gollán de la Facultad de Ingeniería Química, y en el Edificio Damianovich. La nueva sede alberga a 82 investigadores, becarios y administrativos (del total de 129 existentes), que es el máximo que permite el inmueble. Ya se fueron mudando casi todos. Otros grupos de investigación seguirán funcionando en sus ubicaciones actuales”, explicó Sedrán.

El director del Incape destacó que el edificio que se inaugurará el martes “es moderno, está diseñado para investigación y cuenta con salas de reuniones y una estructura de apoyo que antes no teníamos, así que bienvenido sea este nuevo espacio. Antes estábamos hacinados y hasta hubo problemas de seguridad”.

Catalizadores

Desde su creación en 1978, el Incape realiza investigaciones del más alto nivel científico en el campo de la industria en general (química, petroquímica y de refinación del petróleo) y de procesos catalíticos en particular, forma recursos humanos científicos, tecnológicos y auxiliares, y transfiere los resultados de las investigaciones a los sectores interesados.

La importancia de los catalizadores radica en que hacen factibles a nivel industrial, acelerando su velocidad sin ser parte de las mismas, reacciones químicas que de otro modo serían inviables. Entre las líneas principales de investigación pueden citarse los procesos de refinación de petróleo y petroquímica, el desarrollo de catalizadores para la preservación del ambiente incluyendo la producción de combustibles menos contaminantes, el desarrollo de procesos para el mejor aprovechamiento de los recursos energéticos del país (tanto convencionales como no convencionales y renovables), la valoración de recursos de la biomasa, las nuevas formas de energía, y el diseño, desarrollo y aplicación de reactores no-convencionales (membrana, estructurados y microreactores).

También se destaca la interacción con el sector productivo, particularmente en relación con refinación, combustibles y petroquímica, donde pueden mencionarse importantes convenios sobre biodiesel, procesos de refinación, recuperación de catalizadores y cuidado ambiental con empresas como, entre otras, YPF.