Andar en bicicleta es símbolo de inteligencia

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Persona importante en bicicleta: el economista jefe de Inversiones del Grupo Santander, Hugo Penteado, en San Pablo, Brasil.

Foto: Archivo El Litoral

Por Mariana Salvador

“En Estocolmo... los ciudadanos consideran que una persona joven que se desplaza en coche, por muy pudiente que sea, es un pobre diablo. Cuanto más nivel intelectual, social y económico tienes, con más razón se practican políticas ambientalistas...” (María Neira, directora de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS).

Desde el 26 de febrero al 1º de marzo, Santa Fe en Bici asistió y expuso su experiencia en el Foro Mundial de la Bicicleta (realizado en Medellín, Colombia).

El foro es el evento ciudadano global más importante a favor de la bicicleta; es absolutamente horizontal, diseñado, organizado y mantenido por ciudadanos de varios países.

El foro nació en 2011, cuando durante un paseo en bicicleta por Porto Alegre, Brasil, un conductor de carro atropelló a 20 ciclistas. Luego de ese hecho decidieron darle un giro positivo y crearon el Foro Mundial de la Bicicleta, que busca unir a los miles de ciudadanos del mundo, que trabajan a favor de ciudades más sostenibles, con la bicicleta como símbolo.

Se busca reflexionar sobre cómo las ciudades pueden ser organizadas para el beneficio de todos sus ciudadanos, mientras utilizan la bicicleta como un vehículo para el cambio social y la equidad urbana. El encuentro promueve el trabajo de diversos grupos (individuos, colectivos, ONG, empresas, y entidades gubernamentales) que trabajan juntos para lograr un cambio positivo en todos los niveles: individual, local, regional, nacional y mundial. (http://www.fmb4.org/es/sobre-el-fmb4/que-es-el-fmb4/)

En el mismo, además, expusieron más de 150 expertos de todo el mundo, planteando la necesidad inmediata de un cambio de paradigma sobre el modelo de ciudad actual no inclusiva, diseñada para autos.

La bicicleta ha sufrido y sufre un estigma social: ¿No te da vergüenza ir en bici, a tu edad? ¿Cómo voy a ir en bici, si tengo que visitar a un cliente? y, quien decide desplazarse en ella, deberá soportar una fuerte presión implícita y explícita, teniendo que dar explicaciones, como si quienes van a trabajar en auto colapsando toda la ciudad, contaminando y arriesgando vidas, tuviesen que explicar por qué lo hacen.

Este desprestigio del vehículo de dos ruedas se produjo de la mano de falso status social, otorgado al automóvil a través de cientos de publicidades que transmiten falsos valores de juventud, felicidad, belleza, etc. Pero, ¿es sustentable trasladar una máquina de más de una tonelada para transportar a una persona durante 5 kilómetros a una media de 30 km/h?

Entonces, así como están las cosas, quien opta por usar la bicicleta, debe soportar una serie de presiones sociales, desde el conductor de vehículo motorizado que no “reconoce” al ciclista como tránsito, hasta quienes lo “desprecian” por considerar que no tienen derecho de estar en la calle.

Por eso, es que en Santa Fe, necesitamos “Re-prestigiar la bicicleta”, mostrando sus factores positivos (desde la salud pública y el paisaje urbano hasta la practicidad).

Andar en bicicleta es un símbolo de inteligencia, y aquí es importante el papel del gobierno, los funcionarios públicos, el sector privado y las instituciones educativas.

Creemos necesario el convencimiento de quienes asumieron la representación política porque un alto porcentaje de la comunidad está diciendo “queremos una ciudad democrática, donde puedan convivir con prioridad los peatones y ciclistas”, entonces se debe actuar en consecuencia y para ello los funcionarios deben subirse a una bicicleta para ir a trabajar, dando el ejemplo, generando conciencia y poniéndose en lugar de sus “representados” y tomando decisiones inmediatas.

Santa Fe es geográficamente un ciudad pedaleable los 12 meses del año, si bien se puede circular por todas las calles de la ciudad, consideramos que la infraestructura sería un enorme incentivo ante quienes aún no optaron por la bicicleta: red de ciclovías, arboladas y con bebederos para una ciudad donde las temperaturas en verano son tan elevadas y estacionamientos públicos/privados seguros.

En temas de salud pública, se estaría haciendo prevención primaria. Evitar la exposición al aire contaminado, previene enfermedades crónicas que son muy caras y la obesidad. Invertir en prevención primaria es baratísimo, lo “costoso” es que quienes toman decisiones a través de los años lo entiendan. Pensar un ciudad para todos es una cuestión que trasciende la política partidaria e involucra a toda la comunidad, incluso a nuestras generaciones futuras.