Piden prisión

Mató a una mujer porque lo echaron de una fiesta

Télam

La fiscalía de juicio de La Plata pidió la pena de 47 años y 6 meses de prisión para un hombre que en el 2012, enojado porque lo echaron de una fiesta, mató a una mujer e hirió a otras dos personas, informó hoy una fuente judicial.

Se trata de Luis Alberto Morales (26), acusado de matar a Lorena Salgueiro (37) y de herir a la madre de ésta, Araceli Arias (69) y David Altamirano (29).

El hombre es juzgado por el Tribunal Oral en lo Criminal I de La Plata, que dará a conocer el veredicto el próximo lunes.

La fiscal de juicio, Silvina Langone, pidió una condena de 47 años y 6 meses de prisión por considerarlo culpable de los delitos de homicidio y tentativa de homicidio en dos hechos.

En tanto, la defensa de Morales planteó la inimputabilidad del hombre por haber sufrido “un trastorno que le impidió al momento del hecho comprender lo que estaba haciendo y dirigir sus acciones”.

El hecho que se juzga ocurrió el 5 de enero de 2012, en una vivienda de las calles 10 y 475, de City Bell, partido de La Plata, donde se celebraba una fiesta de cumpleaños.

En esas circunstancias, Morales ingresó y fue sorprendido cuando colocaba unas pastillas en las botellas de cerveza que se bebían en el festejo, lo que motivó que el dueño de casa, identificado como David Altamirano, lo echara. Morales, enfurecido, tomó una cuchilla y aplicó varias puñaladas a Altamirano, tras lo cual fue reducido por varios asistentes a la fiesta, quienes lo desarmaron y echaron.

Morales corrió a su casa, ubicada a pocas cuadras, y tomó una cuchilla y un bate de béisbol y regresó a la casa de Altamirano, pero fue corrido de ésta por varias personas.

En su huida, el hombre se encontró con Araceli Arias y su hija, Lorena Salgueiro, que paseaban tras realizar compras por la celebración de Reyes Magos.

Sin mediar palabras, las atacó a puñaladas, por lo que la mujer mayor cayó a la vereda herida y su hija, que la cubrió para protegerla, recibió 14 puñaladas que le ocasionaron la muerte.

El agresor, al declarar en el juicio, aseguró que recuerda todo lo que hizo ese día hasta el ataque a las mujeres, cuando, dijo, entró en “una nebulosa”.