A PROPÓSITO DEL FELISA 2015

“La base del Festival son las lecturas en vivo”

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El viernes 8 tuvo lugar la mesa 3: “Lo monstruoso” (La escritura como forma de nombrar lo inenarrable), con lectura a cargo de Erica Rozek (primera desde la derecha) y la participación de Gabriela Cabezón Cámara, Juan José Burzi y Roque Larraquy. PABLO AGUIRRE

 

Estanislao Giménez Corte

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http://blogs.ellitoral.com/ocio_ trabajado

Un “colectivo organizador” reducido pero poderoso alumbró el año pasado el Felisa, (primer) Festival de Literatura de Santa Fe. Acaba de concluir, en un crescendo de cantidades, convocatorias y repercusiones, su segunda edición, la 2015. En el grupo que originó este encuentro alrededor de la literatura se cuentan Mariano Pagés -que acaba de lanzar por María Muratore ediciones su novela “Los cachitos”-; Federico Coutaz -profesor, escritor, editor y columnista en el periódico “Pausa”-; la escritora Mercedes Bisordi y Luis Escobar, librero de “Palabras Andantes” y también editor. Ellos acercaron voluntades, amistades y conocidos, ya en la forma de personas físicas, ya en la de instituciones y entidades afines. La segunda edición del Felisa, desarrollada entre el 7 y el 9 de mayo en lugares varios de la ciudad (Estación Belgrano -Centro Experimental del Color y Pub Saer-, librería Palabras..., Centro Cultural Ochava Roma) trabajó una vez más en torno de la idea rectora de hacer un festival “independiente” y de “celebrar” (enfatizaron) el amor por la literatura. La radio de Ochava (www.ochavaroma.org, 107.1), una de las tantas iniciativas del centro motorizado por Claudia Chamudis y Juan I. Vergara, transmitió, en vivo, las lecturas y las mesas.

El escritor Francisco Bitar -“Luces de navidad”, “Tambor de arranque”- abrió el festival el jueves 7 con la lectura de su ensayo “En defensa de lo pequeño” (se lo puede leer en el blog de la editorial Eterna Cadencia http://blog.eternacadencia.com.ar/). A lo largo de los tres días, en diferentes lugares, expusieron, leyeron y/o dieron talleres Hernán Vanoli, Alejandra Zina, Maximiliano Crespi, Leonardo Oyola, Mariano Dubin, la mencionada Chamudis, Jorge Consiglio, Carlos Godoy, Patricio Zunini, Gabriela Cabezón Cámara, Roque Larraquy, Carina Radilov Chirov, Gonzalo Geller, Cecilia Moscovich, Tamara Naymark, Graciela Prieto, Érica Rozek, Juan José Burzi, Mariano Pagés, Martín Maigua, Raquel Cané, Beatriz Vignoli, Pablo Escudero, Juan José Burzi, Agustina Lescano, Julia Enriquez, Analía Giordanino, Lolita Copacabana, Rosina Lozeco. Los músicos intervinientes fueron: Die Morrone, Galíndez y José Piccioni.

LITERATURA Y FESTEJO

El Litoral consultó a los organizadores (Bisordi, Coutaz, Pagés y Escobar) a propósito de esta nueva edición de la propuesta, que crece en el ámbito de la cultura santafesina. Una mutual, una radio y empresas privadas (de transporte, de alimentos, de ambientación de espacios) jugaron un rol fundamental en la ejecución y en la lógística del encuentro. La Secretaría de Cultura de la Municipalidad cedió algunos de los lugares aludidos.

—¿Cómo se origina la idea de organizar un Festival de Literatura en Santa Fe? ¿Creen que había, o que hay, en este sentido, un vacío que el Felisa viene a reparar?

—La idea surge a partir de un Filba que se realizó en la ciudad, del cual había formado parte Luis (Escobar) y su librería. Él retoma esa idea de festival y la adaptamos según nuestra perspectiva.

—¿En qué cosas el Felisa se diferencia de otros encuentros de y sobre literatura de la zona -Argentino de Literatura de UNL, por poner un ejemplo-?

—No hay un objetivo de diferenciarse. Lo que sí proponemos es la idea de festejo. El intercambio en un ámbito lo más relajado posible.

—¿Cómo se resuelven las cuestiones atinentes a la organización del encuentro? ¿Qué instituciones, organismos, personas (además del “colectivo organizador”) intervienen?

—Tenemos muchas reuniones a lo largo del año. En la organización Claudia (Chamudis) y Juan (Vergara), de Ochava Roma, son parte fundamental. Las chicas de la librería Daniela Pavetto y Eugenia Gramajo colaboran con los talleres y la recepción de mensajes y consultas. Javier Benedetto interviene como anfitrión y chef de los almuerzos que hacemos con los invitados. Asimismo, todos los músicos que han participado de las dos ediciones del Felisa han hecho su aporte desde su arte y los consideramos parte, también.

—¿Cómo se organizan las mesas y cómo se elige a los expositores? ¿Hay una intención de “convergencia” (por poner este término, tan de moda) entre literatura, música y otras artes, además de “llevar” estas artes a diversos lugares, de centros culturales a bares, “del claustro a la calle”, de la página a la oralidad?

—A veces las mesas las definimos en base a quiénes pueden participar en determinada fecha y, otras, es al revés, buscamos invitar a quienes puedan aportar a determinado tema.

—¿Qué programan para la edición 2016? ¿Cuáles son los objetivos hacia adelante?

—Todavía estamos tomando aire, reponiéndonos de la alegría inmensa que fue esta segunda edición. La intensidad del Felisa hace necesario que nos tomemos unas semanas de reflexión y descanso. Los objetivos siempre son ampliar el público, que sea diverso, y seguir creando redes entre autores, lectores, editores. Ese es nuestro desafío. También queremos enfatizar que la base del Festival son las lecturas en vivo. Siempre queremos que las lecturas estén en un plano privilegiado frente a toda discusión o debate.